miércoles, 13 de enero de 2010

BUENOS PALADARES

LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

RODOLFO GAMBETTI (Las Últimas Noticias)
(8 enero) TANTA ((Boulevard Parque Arauco. Local 37, fono 364 1368): “¿Un dato para el verano? El Tanta, en el boulevard Parque Arauco.” “No es una picada, con platos de entre $5.000 y $ 8.000, pero sabrosos, con excelentes productos y que valen por un almuerzo o cena, con amplia variedad de cervezas, espumantes, jugos naturales y buenos vinos por copas. El pisco sour, memorable. Más seductora lista de 60 postres, planeados por la propia Astrid.” “Entraditas como picoteos, atractivas ensaladas, sánguches –que también los llaman así-, y toda la parafernalia de salteados, tiraditos y pastas, platos populares pero muy bien hechos. Recién abierto, conviene ir con una pizca de paciencia porque el servicio se está afiatando y puede haber esperas en las horas de mayor demanda.”

ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(8 enero) ETNIKO (Constitución 172, Barrio Bellavista, fono 732 0119): “Buena cosa: un buen sitio como para empezar una noche algo más larga de lo habitual. Eso es esta cebichería instalada en el restaurante Etniko. Una barra de corte moderno con pequeños salientes como para dos, una extensa carta de pequeñas raciones -frías y calientes- casi todas a menos de dos mil pesos. Y si a esto se suma una atención rápida, es sin duda un buen panorama crepuscular.” “…en las preparaciones mediterráneas, léase un tártaro de atún y un carpaccio, hay algo claro: tienen que esconderle el aceite de oliva al cocinero.”

SOLEDAD MARTÍNEZ (Wikén)
(8 enero) OLIVIÉ (Rancagua 0396, Providencia, fono 269 8241): “De entradas, optamos por los blinis con caviar de salmón ($5.500) y "julien" (¿juliana?) de champiñones ($3.200). Hay también blinis con crema ácida, pero francamente no me gustaron por lo gruesos, como panqueque enrollado, sin la consistencia a la vez suave y esponjosa que esperaba y muy inferiores, por ejemplo, a los que pueden hallarse en el Carrousel. En cuanto a los champiñones, venían con trozos de pollo en fina salsa cremosa y gratinada, servidos en fuentecita de loza, en grata combinación. Ofrecen, además, varias pastas típicas.” “De los platos de fondo, tuve oportunidad de probar tres: el pescado Monastirsky ($7.200), al horno, con papas, cebolla, tomate y salsa blanca, que ahogaba el sabor marino; buzenina, láminas de pierna de cerdo a las finas hierbas, con juliana de zanahoria aliñada, repollo y salsa de ciruela ($6.200), y beef Stroganoff, cortado en tiras bastante duras con salsa de tomate, crema, champiñones, vino blanco y arroz como acompañamiento ($6.200), todo, como lo anterior, para nostálgicos de las estepas.”

BEGOÑA URANGA (El Sábado)
(9 enero) DOMENICA (Tobalaba 405, Providencia, fono 415 1515): “Un lugar sencillo y acogedor que cuando se instaló, hace unos años, tuvo pocos parroquianos debido a sus elevados precios.” “Es una cocina sencilla, casera, rica, pero algo anticuada. Mucha bechamel y gratinados. Como esa comida italiana porteña, que llevaron los emigrantes a principios del XIX a Buenos Aires y que aquí se sigue preparando sin variaciones. Los canelones de la casa, rellenos de ricota y centolla, con salsa blanca, gratinados y con setas, resultaron ricos pero pesados. Muy pesados.”

DANIEL GREVE (Qué Pasa)
(9 enero) VENDETTA (Parque Arauco, local 372, fono 245 3398): “Cada cierto tiempo Vendetta tomas siestas más largas de lo normal. Por suerte, llega el chef corporativo José Luis Marín con la alarma en la mano. Cambia la carta y todo vuelve a funcionar.” “Las ensaladas son realmente notables y ahí sobresale la Di Polipo ($5.900), de pulpo con verdes, choclo peruano, palta, pimientos rojos, aros de cebolla morada, huevos de codorniz y un crocante -un bastón más harinoso que turgente- de aceitunas. Los raviolis pasan sin muchas reverencias, pero los aplausos se quedan en los Agnolotti de ossobuco ($6.900), hechos con salsa de berenjena asada, vino, tomates y una carne cocinada por más de seis horas. Los postres son abundantes y rústicos, en clave mall, pero no bajan la sintonía del lugar.

CÉSAR FREDES
(La Nación Domingo)
(10 enero) LA FUENTE SUIZA (Irarrázaval 3361, Ñuñoa, fono 204 7199): “Hoy, la Fuente Suiza tiene uno de los mejores lomitos de Chile, apenas por detrás de los de la Fuente Alemana y los de la Fuente Mardoqueo.” “La clave es, primero, un buen pan redondo y grande, a medio camino justo entre frica y amasado, un lomo notable, que es lomo-lomo de cerdo de aquel que últimamente se ha dado en llamar “de centro” y que suma fácilmente un cuarto de kilo de carne. El resto es opcional, completo con chucrut y mayonesa, italiano, con tomate mayonesa y palta u otras combinaciones, todos los que cuestan entre $3.200 y $3.700. Es verdad que barato no es, pero es muy bueno, muy abundante y muy sin grasa. Casi un almuerzo completo. Nuestra palta estaba sabrosa y en su punto y el tomate maduro al justo, en grandes tajadas. La novedad es que la Fuente Suiza se amplió, ganando el local que está a su costado poniente y ahora hay una segunda barra y mesitas bien atendidas.”

PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(10 enero) ANAKENA (Hotel Grand Hyatt, Av. Kennedy 4601, fono 950 3177): “La carta es amplia y ofrece especialidades de la cocina thai. Al almuerzo hay un menú que permite comer fondo + postre por $9.900 y sumarle la entrada por un poco más.” “Yo me tenté con un curry de pato que traía berenjenas, piña, tomatitos de cóctel y otras verduras, con curry rojo bien picante como me gusta. Era de esos platos para comer con el pañuelo al lado. Me pareció original y rico.” “Destaco mucho que los platos del menú eran tan grandes como los de la carta, y venían con una porción de arroz igual que los otros. También que cada uno tenía su sabor propio e identificable, tanto que uno podría volver y pedir lo mismo. A todas nos encantó el Anakena, y salvo por una leve demora en la llegada de lo pedido, fue una experiencia perfecta.”