BALANDRA DE PUERTO VARAS
Una gran cocina para un gran hotel
Hacerse “fan” de Puerto Varas no cuesta
demasiado. A orillas del Lago Llanquihue, con su monumental vista al volcán
Osorno y de gran desarrollo, Puerto Varas se está convirtiendo en algo así como
la capital del sur. Inicialmente fue comuna dormitorio de los puertomontinos,
sin embargo el encanto de la ciudad ha encantado a una nueva ola de inmigrantes
–esta vez no alemanes- que le están dando un giro sustancial a lo que alguna
vez fue un pacífico pueblo de rubios extranjeros. Por eso no extraña que el
desarrollo haya llegado a la gastronomía y al turismo, convirtiéndose en uno de
los pilares económicos de la ciudad.
Buena hotelería para todos los bolsillos,
desde pequeños hostales a una hotelería 5 estrellas es posible encontrar en
Puerto Varas. Lindos y cuidados hoteles, donde nada queda al azar. Entre ellos
el Colonos del Sur, construido sobre los cimientos del antiguo Hotel Playa,
aposento de los primeros colonos alemanes que poblaron la zona, convirtiéndose
en uno de los hoteles más tradicionales de la ciudad lacustre, hasta que fue
consumido por un incendio en marzo de 2006.
Es así como a fines de 2007 comenzó el
proyecto de reconstrucción del Gran Hotel Colonos del Sur, pero esta vez, de
categoría 5 estrellas. Este nuevo y moderno recinto hotelero, regido por
estándares internacionales de calidad, pero que mantiene las características
tradicionales de la arquitectura colonial alemana del Sur de Chile, fue inaugurado
en febrero de 2009.

Allí llegué la semana pasada con el fin de
conocer sus instalaciones y su cocina. El hotel, lindo y con todas las
comodidades que pueden esperarse: desde un pequeño business center a un moderno
Spa y 71 comodísimas habitaciones. Luego de un pequeño descanso, un par de días
para conocer la gastronomía del Balandra, el restaurante del hotel, ubicado a
un costado de lobby, donde las manos del chef ejecutivo, Álvaro Morales, entrega
una cocina llena de sabores (y colores), donde manda el producto local pero
adaptado a un turista poco acostumbrado a nuestros intensos sabores. Una cocina
donde platos alemanes de los inmigrantes interactúan con el producto local
conformando una fusión intensa, agradable y lúdica, en un comedor elegante y cálido.

Grandes platos salen de su cocina e
imaginación: brillante y sólido resultó un CIERVO GAMO Y LAGER ($10.900) con
blandísimos cortes de lomo de ciervo acompañado con spatzle de calamar y salsa
de arándanos y peras, una sinfonía de sabor y aromas que no deja de sorprender.
(Encontrar carne de ciervo –un animal de caza- que quede blanda luego de su
cocción es un verdadero desafío). Luego, entre los platos que me llamaron la
atención, un PEROL A LA FIURA ($7.500), un mix de corvina, locos, caracol
trumulco, papines, cebolla morada y sal ahumada, acompañada de un camarón
apanado sobre una pequeña cama de palta. Rico y original. Le juro que encontré
piures en la preparación pero no lo eran, el sabor lo aportó el caracol
trumulco. ¡Uno nunca termina de aprender!
Otra sorpresa resultó ser el CHAU CHAU DE ATÚN
ROJO ($7.900), dos eximios cortes de atún rojo sobre una cama de ají amarillo, mastuerzo
y espárragos de mar, acompañado de un ostión en tempura, plato que asombra y
que deja los ojos muy abiertos.
Ojos tan abiertos como con el resto de la
carta ya que me extendería demasiado comentando cada uno de los platos que
probé esos días. No es definitivamente una cocina para todos los días y hay que
atreverse a probar los platos por raras que parezcan sus combinaciones. Acá ha
habido un serio trabajo para encantar al turista y reencantar al público en una
ciudad donde la gastronomía es uno de sus fuertes. El Puerto Varas del hoy en
día no permite el fracaso y por ello todos los establecimientos se las juegan
para adquirir diariamente más fortalezas. Y la cocina del Balandra, que partió
el 2009 bajo las órdenes de Pamela Fidalgo, es un ejemplo claro de la
permanente búsqueda de la excelencia.
En plena costanera de la ciudad, a orillas de
lago y con entrada independiente, el Balandra es parte fundamental del circuito
gastronómico de la Región de los Lagos. Lugar al que llegué luego de un
relajado vuelo en Sky Airlines, línea aérea que poco a poco ha ido convenciendo
a los viajeros y que en la actualidad ya posee el 26% del mercado nacional. (Juantonio Eymin)
Balandra: Hotel Colonos del Sur, Del Salvador 024, esquina
Av. Costanera, Puerto Varas, fono 65- 223 1111