miércoles, 17 de febrero de 2010

LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR


EL COMEDOR DEL HOTEL NH

El “gordo” Kallens ya no lo es. No podremos volver a llamarlo así ya que decidió ponerse a la altura de los tiempos y adelgazar. “Por salud”, me comentó. Y ya se le nota con menos peso y más activo. Pasé a saludarlo ya que tenía una reunión en las cercanías y almorzamos juntos casi a la suerte de la olla ya que era francamente tarde para la merienda. Un jugo para él y un gin con gin para mí. ¿Por qué no un pisco sour? Fácil. Personalmente no pido sours en los hoteles ya que dejan mucho que desear. Y aunque los españoles (los dueños del hotel) tampoco conocen el gin con gin, lo preparan como es de mi agrado.

Pero me salí del tema. Kallens quería tentarme con dos platos nuevos que incluyó en su carta de verano: un cebiche mixto de pulpo - corvina y un salmón con polenta al pesto de albahaca. Dos platos que renuevan una carta que no deja a nadie disconforme. Si me preguntan qué diferencia la comida de Alan Kallens al resto diría que ésta es una gastronomía entretenida, donde el chef juega con productos y el comensal se entretiene probando mixturas diferentes. No hay que ser mago para preparar pantrucas, por ejemplo, pero las que hace Kallens se disfrutan tanto o más que las preparadas por la abuela o la mamá. Y creo que ahí esta el secreto de este chef. Entretiene a sus clientes.

Acá hay comida con cuento, como acompañar unos filetitos de salmón con polenta al pesto, una polenta que queda rica a rabiar y que aporta sabor y textura a ya nuestro vilipendiado salmón. Lo mismo hizo años atrás con su “charquicán del bicentenario” donde el aporte lo entrega un verdadero charqui de equino. Lo mismo hace cuando ocupa las legumbres y les da un toque original a ellas. En fin, mucho se podría decir del “flaco Kallens” que lleva ya ocho años liderando las cocinas de este hotel de capitales españoles.

Entretiene hasta el menú del día que entregan durante la semana laboral. Siempre varía y eso es un plus para los que almuerzan en ese lugar. Y parece que gusta, ya que siempre está repleto.

El año pasado conté que al comedor le faltaba “una manito de gato”. No precisamente en su gastronomía sino en su ambientación. Parece que viene en camino el V°B° para su remodelación. Ojala pronto veamos un comedor tan acogedor como las preparaciones que salen de estas cocinas. Valdrá la pena (Juantonio Eymin)

Hotel NH Ciudad de Santiago: Av. Condell 40, Providencia, fono 341 7575