RUBAIYAT
Luego de una larga espera debido a problemas
municipales, hace unas semanas abrió en plena Av. Nueva Costanera y con una
novedosa arquitectura y decoración, la sucursal chilena de esta cadena de carne
gourmet que está revolucionando los paladares capitalinos. Con un excelente
servicio y una mise en place llena de detalles exquisitos, no será extraño
verlo escalar posiciones en el circuito gastronómico de la ciudad, ya que
merece estar en un muy buen sitial.
Para muchos el nombre “Rubaiyat” no tiene pies ni
cabeza. Sin embargo, los propietarios de la marca, dos gallegos -padre e hijo-
que tienen locales en Brasil, Madrid, Ciudad de México, Buenos Aires (conocido
como Cabaña Las Lilas) y hace un mes en Santiago, hacen un homenaje al poeta
persa Omar Khayyam y a su obra Rubaiyat, que canta los deleites del amor y los
goces de la vida.
La madera, el fierro y el cuero se hacen presentes
en este elegante lugar. Construido para este fin, sus propietarios no dejaron
detalle sin resolver. Desde el aperitivo, bebido en su acogedor bar dirigido
por Miguel Larraguibel, hasta un excelente bajativo con licores herbales.
Con carnes premium que provienen de sus propias
haciendas (la más grande es la Rubaiyat, ubicada en el sur de Brasil), aquí
todo se cocina mediante dos métodos de cocción: parrilla y horno de piedra. La
gracia de la filial chilena es que utilizan las mismas carnes que en su par
argentino: esto es, más de diez tipos de cortes de raza Angus, Hereford y
Wagyu, como bife chorizo, ojo de bife, vacío y la picanha, que es una de las
estrellas del local ($ 14.900 los 250 gr.) acompañada con papas “soufflé” y
tomates asados. Otra buena opción –y para dos- es el Queen Beef ($ 33.500 los
650 gr.), un corte de lomo liso de excelente calidad.
Si bien es cierto que el concepto parrilla es un
sinónimo de carne, hace tiempo que las buenas parrillas gourmet están
explorando (y explotando) la opción de los pescados y mariscos, que al horno o
a la parrilla son toda una opción a la hora de un buen almuerzo o cena. En
Rubaiyat la variedad incluye -entre otros- un blando y delicioso Pulpo al horno
(14.500) con aceite de pimentón y papas aplastadas, como también sabrosos Locos
a la parrilla (10.900) con papas confitadas y mayonesa de cilantro.
La variedad de vinos es grande y al contrario de lo
que se pueda pensar –por la elegancia y excentricidad del lugar-, tienen
etiquetas bastante económicas, tanto como su Menú Amable, que por $ 18.900
permite escoger –al almuerzo y de lunes a viernes- una entrada, un fondo y un
postre que incluye los clásicos platos de la carta, incluido cortes a la
parrilla.
Los postres sacan suspiros. Como el famoso Panqueque
Cabaña Las Lilas ($ 5.900) con mucho dulce de leche, y el Quindim ($ 5.900),
una sabrosa preparación brasileña en base a yema de huevo, crema de chantilly
de cachaça y coco tostado.
En resumen: un lugar “hecho a mano” que encanta y
seduce. Tanto, que ya hay que reservar para lograr mesa. Sin duda le va a hacer
“collera” a todas las parrillas gourmet de la capital y también a muchos
restaurantes que están en primera línea. Como toda nueva operación, hay que
ajustar algunos detalles gastronómicos, pero no son impedimento para elogiar el
lugar.
Rubaiyat: Nueva Costanera 4031, Vitacura / 226 179 800