LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA
YIN Y YANG (La Segunda Internet)
(13 noviembre) OSAKA (Av. Isidora Goyenechea 3000, Las Condes, fono 770 0081): “Con la maravillosa “excusa” de ser un restaurante nikkei (o sea japonés-peruano), cabe en su oferta una enorme cantidad de recetas de autor que mezclan de manera notable distintos productos con perfecta rigurosidad técnica, además de ampliar sus influencias a la tailandesa y la china.” “Como ejemplos, entre las tapas hay scallop philly, ostiones envueltos en una masa crocante de arroz y servidos con una salsa de “sweet miso” cremosa ($ 4.000), y kani tan, crocantes rellenos de centolla, negi y maní con miel de rocoto al maracuyá ($ 8.000). De los cebiches, sin perjuicio de uno clásico, destaca el thai, con una combinación de sabores tropical y agrio picante gracias al chilli jam, limón, mango, cebolla china, cilantro y leche de coco ($ 8.000). De los tiraditos, el dos olivos, con el pulpo en dos versiones -botija y verde-, servidos con tostadas y ensaladita aparte ($ 6.000), y el carpassion, con miel de maracuyá, limón, berros y philo strips ($ 7.500). Y en causas, una de ebi, con langostinos en salsa de puerro y curry rojo ($ 2.500).”
ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(13 noviembre) PIMIENTA NEGRA (Condell 1308, Providencia, fono789 5974): “Aquí el tema es, prioritariamente, pasta y carne a precios nada de caros. Y mozos realmente diligentes, no muy ayudados por la lentitud de la cocina ni por el personal de la caja (¿hay algo más fome que esperar la boleta? Sólo el pagarla)” “Camarones apanados para empezar (ricos, pero un poquito aceitosos, $3.690) y un carpaccio de vacuno (fríiiiio, a $2.990). Luego unos platos de pasta fresca -spaghetti ($2.290) y unos ñoquis ($3.290)- y un entrecot ($5.890) que exhibió la diferencia de las carnes a uno y otro lado del hueso: la mitad, ligeramente grasa y deliciosa, y la otra, dura del verbo tieso.” “Lo que les falta es un poco más de nervio. O pimienta.”
SOLEDAD MARTÍNEZ (Wikén)
(13 noviembre) OX (Nueva Costanera 3960, Vitacura, fono 799 0260): “En una entrada, repetimos la experiencia de los ostiones “jumbo” ($14.900) llegados de Canadá, realmente grandes, sólo sellados en mantequilla compuesta y cocinados apenas, con una espumosa y suave salsa de locos, crujientes papas hilo y una ramita de hinojo.” “Un fresco sorbete de apio y limón separó las entradas del plato principal, que en verdad bastó para dos. (Las porciones de carne oscilan entre 350 y ¡800! gramos. En este caso eran 450). Se trata de un nuevo corte, el “asado de (lomo) liso” ($13.900), de excelente carne que, para su mejor sabor, trae hueso y una protectora capa con más grasa, y cuya cocción elige el comensal entre cinco puntos diferentes. Lo acompañamos con ensalada de tomates baby, amarillo y pera y quesos fresco, filadelfia apanado, y ricotta, aliñados con orégano ($4.500).”
CARLOS REYES (La Tercera)
(13 noviembre) KINTARO (Monjitas 460, Santiago Centro, fono 638 2448): “Por precios, es una picada con todas sus letras, en un barrio donde la onda -sus vitrinas dan justo frente al inefable mural donado por Agatha Ruiz de la Prada- sobra. Por esa misma característica de local sencillo, no hay para qué exasperarse con un servicio que no siempre es solícito, sino más bien olvidadizo en cosas como la entrega de platos o de cualquier insumo a la mesa. Sin embargo, esa limitante impacta poco si se pone del otro lado de la balanza una calidad culinaria que prosigue sus buenos oficios en el área de la cocina fría. Un grato resumen de lo anterior está en el Sushi Mori ($ 5.900), que concentra varias de sus opciones de sushi en un solo plato, con arroces de grumo y temperatura precisa (a no olvidarse: el sushi a la japonesa se consume con arroz tibio), con pescado de tonos vivos y cortes impecables que resaltaron su frescura marina. Existe además una versión extendida y también una larga lista de rolls y sashimi, en un sitio de esos que, en resumen, saben hacerse querer como comedor de diario.”
PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(15 noviembre) GURIA (Manuel Montt 1599, Providencia, fono 474 6605):”Partimos con sendos vasos de sangría, en un lluvioso día de esta esquiva primavera; sangría fresca con una tajada de manzana verde. Luego, pedimos tortilla de papas, que el mozo nos ofreció a punto, ¾ o bien cocida. La preferimos mojadita. Estaba muy sabrosa, y nada chica. Todos los platos son generosos, en verdad. También pedimos unos boquerones, que me fascinan, en vinagre y ajo: muy power.” “La carta es bastante amplia, y aunque me llamaron la atención unos ravioles de berenjenas, les juro que me contuve y esta vez pedí garbanzos caserón, una sopa de garbanzos con camarones. Estaba bien buena, pero tenía más expectativas. Mi amiga pidió una merluza bravísima, que venía a punto perfecto. Exquisito el pescado, sobre un risotto que ella encontró salado. Terminamos con un flan casero de rica textura pero con el caramelo algo quemado.”
CÉSAR FREDES (La Nación Domingo)
(15 noviembre) DOMÉNICA (Tobalaba 405, Providencia, fono 415 1515): “Tal como se muestra ahora, Doménica es imbatible, no sólo en su relación precio-calidad, sino también en términos absolutos: la pasta casera de Doménica en su altísima calidad y carácter, no la hace nadie en Chile.” “¿Es lasaña o canelones lo que le llevó al señor de la mesa del rincón? Le preguntamos al garzón en nuestra visita de la semana pasada.
“Canelones con bolognesa”, nos informó preciso y rápido el reconcentrado camarero.
Y eso fue lo que pedimos, mejorando incluso el pedido (éramos cuatro personas) con vitello tonato formando parte de una gran entrada con tomate y palmitos y luego fettucine con ragú de cordero, tortelloni al pesto y el mejor plato de la carta, la gran fuente de pasticciatta, variedad de tres pastas rellenas y con salsas distintas: bolognesa, alfredo y provenzal, pilpileando crema y queso en la vajilla.” “Doménica puede seguir contando con público abundante por mucho tiempo. Muy bueno.”