martes, 30 de diciembre de 2014

BUENOS PALADARES

CRÓNICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA

MUJER
PILAR HURTADO
(DICIEMBRE) PIU (Vitacura 3269, fono 22207 3192): “La carta ofrece ensaladas, pizzas, pastas, pescados y carnes. Como fondos pedimos una milanesa de filete, que estaba muy buena, jugosa por dentro y crocante por fuera, además de blandita, que venía acompañada con una ensaladita de tomates cherry y rúcula, un bloque de papa frita (bonito, como una papa dorada pero rectangular) y un gel de limón que nos pareció demasiado ácido, en este caso una choreza innecesaria para una excelente milanesa. La otra opción fueron unas medialunas rellenas de calabaza con mantequilla, salvia y parmesano reggiano, donde la pasta y relleno estaban bien, pero faltó saborcillo a salvia, el resultado era un poco plano.” “En suma, en este local usan buena materia prima y se nota que hay oficio en lo que hacen, pero falta hacer algunos ajustes para que todos los comensales tengan una experiencia grata y completa.”

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(DICIEMBRE) PUNTO NATURAL (Vista Hermosa MZ 23, Sitio 14, Cerro Tacna, Maitencillo. Cel. 6-6761738): “Maitencillo se está transformando en un interesante polo culinario de la zona de Quintero a Papudo.” “Instalado en el cerro Tacna, frente al despegue de los parapentes -entretenido ver sus maniobras-, el chef produce una cocina de gran atractivo, a la que solo le falta meditar más y acuñar bien su mensaje. Porque este elemento de juicio, momentáneamente postergado, no se olvida. No se olvida uno de que es ser humano, no gato.” “La carta es breve y exhibe una mezcla de estilos y técnicas que no alcanza a ser "fusión" -bendita sea-. Unas mollejas, cortadas en bocados, marinadas en limón y luego flambeadas al Drambuie ($5.900) y una ensalada Austral ($6.800; diversas verduras, queso cabra, deliciosos trozos de salmón grillado, con aliño perfecto) fueron un excelente punto de partida.” “Seguimos con un atún, apenas sellado, como nos gusta, acompañado de lentejas de estilo indio ($13.800): perfecto el pescado, buen trozo, conjunto armonioso. Luego, un hermoso trozo de salmón grillado con un delicioso risotto de couscous, que al comienzo nos inspiró desconfianza, para luego rendirnos a su maestría ($12.200): el salmón, en perfecto punto, con su piel estupendamente crocante y sabrosa.”

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(DICIEMBRE) MATSURI (Hotel Grand Hyatt, Avenida Kennedy 4601, fono 22950 3051): “De entradas, tras una croqueta con carne como gentileza, llegó uno de los mejores platos probados: Tako wasabi-zu, trozos de pulpo y láminas de pepino marinados en vinagreta de wasabi ($5.500), un mix fresco y con el punzante picor de aquella raíz verde intenso. A su lado, un gyutataki, trozo de filete de res sellado, con su centro crudo, cortado en pequeños bocados que son bañados en salsa de jengibre ($7.500). Junto a la carne, una suerte de miniensalada a la chilena, con tomatitos cherry y ají verde en tiritas. Logrado.” “Dos extremos fueron los escogidos. Una sopa de intenso sabor, con toques ahumados, plena de tallarines gruesos, verduras y cortes de lomo vetado: un shabu shabu udon ($7.900). Se trata de un plato de corte más popular, que llama al sorbeteo para no quemarse, aparte de la difícil manipulación que exige una pasta casi con vida propia. Para el frío, la resaca o buscando dormir como angelito. Junto a este magno cuenco, unos pinchos de mariscos y pescado apanados -Kushi age ($9.000)-, algo poco para el precio, y con el aceite a flor de piel.”

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS
RODOLFO GAMBETTI
(DICICMBRE) PERÚ CRIOLLO (Mall Arauco Maipú, Av. A. Vespucio 399- L.534, Maipú): “En Perú Criollo podemos olvidar el verano calcinante con una  cremolada, granizado de chicha morada (sin alcohol, $2.200). Para seguir con un tequeño picante, de camarón envuelto en masa de wantán con salsa caucau, con hierbabuena. Luego un piqueo o una papa rellena ($4.100). Por supuesto, platos que se acompañan bien con un Gran Tarapacá etiqueta blanca. Antes del cebiche de pescado con chicharrón de jibia ($7.800) o una pollada -pollo frito criollo con zarza criolla (cebolla morada picada, con limón). Cortado en láminas aparece el tradicional anticucho de corazón ($5.800) con sabroso ají panca. Y como final, crema volteada, suspiro de limeña o unos curiosos guargüeros (palabra popular en desuso para nombrar la parte superior de la tráquea, y también un postre de tubos de masa frita rellena de manjar blanco).”