martes, 3 de marzo de 2015

BUENOS PALADARES

CRONICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONOMICA

MUJER
PILAR HURTADO
(FEBRERO) EL CAMARÓN DE GORBEA (Manuel Montt 1574, Providencia / 22503 2870: “La carta se centra en los crustáceos a los que debe su nombre el local, aunque también hay platos de pescados y carnes, como lengua a la sevillana, plateada o costillar” Mi madre pidió su ración de camarones que en verano no son los del río Limarí, nos explicaron, si no de Copiapó; son 500 gramos y los pidió al ajillo. El plato que llegó era monumental, con camarones de buen tamaño, algunos bien grandes. Al lado, una fuente para dejar las cáscaras y un aguamanil para lavarse los dedos, ya que evidentemente se comen con las manos. Un alicate hubiera sido perfecto para poder partir las tenazas, pero se nos ocurrió muy tarde pedirlo (ideal si llega de todas maneras). Yo opté por unos crepes con camarones que me sorprendieron, pues estaban realmente muy bien hechos: panqueque delgadito, salsa suave y equilibrada, cebolla frita, colitas de camarón en proporción justa, un toque discreto de queso; ¡deliciosos! Pensamos que no seríamos capaces de terminar con los camarones al ajillo, pero sí, se pudo”

QUÉ PASA
DANIEL GREVE
(FEBRERO) BAUTISTA (Nueva Costanera 3950, Vitacura / 22207 1661): “El debut de Bautista ha ido in crescendo. Sus errores de principiante -punto de la pasta en una ensalada fría, tipo de pan en la hamburguesa- se han ido corrigiendo con las semanas. Ya en una segunda visita, estas Costillas de cordero ($13.000) sirven de ejemplo: jugosas, hechas en su punto, sobre un cremoso de mote -dócil, sabroso-, abundante pebre -quizás demasiado, considerando que aporta otra temperatura- y, bajo todo, un suculento aceto balsámico reducido, que resulta ser un buen puente dulce. Para coronar, sutiles granos de quínoa crocante, otro guiño lúdico. Como ven, mucha agua -bendita- sigue y seguirá corriendo por este río.

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(FEBRERO) SARITA COLONIA (Loreto 40, Centro / 2 2881 3937) “Un par de "abrebocas" -pequeños bocados por parte de la casa-, junto a pan y mantequilla de rosa y miel. Quien atiende conoce la carta, que es breve y -por lo mismo- sospechosa, pero el prejuicio es un error. Para empezar, un piqueo de mariscos a la chalaca ($6.900), servido en cucharitas chinas, y el mejor plato de la noche: rocoto relleno de carne sobre pastel de papas ($9.400).” “ ¿Pastel de papas en un lugar tan ondero? ¿De verdad? Bueno: es uno de los mejores que puedan probar en su existencia. Y era el plato favorito del mozo. Un punto por él.” “Luego, los fondos, de una carta que se ofrecía como "cocina peruana travesti". ¿No les pasa lo mismo, que cuando ven adjetivos arriesgados se les prende la sirena? Bueno, apáguenla. Primero, un cebiche de salmón con toques de salsas orientales que se acerca al tiradito, sabroso a más no poder (cebiche chino, $8.500). Y el punto algo bajo de la noche: un lomo saltado envuelto en una masa que no estaba malo (mim-pao, $8.100), para nada, pero que más parecía un wantán gigante relleno de filete mongoliano. Le faltó la crocancia de la cebolla y la textura del tomate salteado, señores. No basta con que esté rico, tiene que parecerse a lo que ofrecen.” “Entonces, hay que reservar. Ya tienen fanaticada. Ni se le ocurra ir sin llamar antes.”

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(FEBRERO) MR. JACK (Tabancura 1108, Vitacura / 2 2326 3098): “Partimos con onion rings ($4.900) crujientes y grasosos (difícil de lograr), más llenadores que una comida china entera (alternativas: papas granjeras, tejanas, etc., todas con mucho lípido incorporado o adyacente). Después de este introito, una hamburguesa Mr. Caprese ($6.400; hay 18 otras posibilidades): croqueta de carne (buena) abajo; tomate, ¡pesto!, mayonesa, queso y otras cosas. Otro ejemplo: Mr. (todas son "Mr.") Brie, con carne, cebolla caramelizada, mayonesa, queso brie, jamón serrano, tomates secos, rúcula...” “Hay 4 sánguches en pan pita. El "Sr." (traducido, esta vez) Serrano ($5.500) tiene jamón, palta, queso fresco, aceitunas, mayonesa, lechuga (cosas que Ud. pondría por separado en un cóctel). Hay también ensaladas, enormes. Probamos la Morgan ($5.400), con lechugas, aceitunas verdes y negras, palmitos, alcachofas, tomatitos, todo en inmensa cantidad. Con cada sánguche, papas fritas y pote de kétchup. Las ensaladas, con potecito de "dressing". “Balance: comida limpia (cuán saludable, dependerá de la frecuencia de su consumo), creada por una imaginación sin límites. Muy buena croqueta (la próxima, la pediremos sola). Mucha cosa salada, crujiente, adiposa, dulcísima: éxito comercial absoluto. Algunos comensales comían silenciosos, ensimismados, celular al lado.”