miércoles, 6 de junio de 2018

MIS APUNTES



JOHNNY B. GOOD

 El rock es eterno. Con esta atmosfera un grupo gastronómico cordobés abrió en el Alto Las Condes una sucursal de sus similares en Argentina y Paraguay.

 
Los cordobeses hablan arrastradito y sin tener la pachorra del bonaerense incursionaron en un modelo de negocios parecido (las cosas hay que decirlas como son) a los famosos Hard Rock Café, que inundaron el mundo desde que abrieron su primer local en Londres en el año 1971. Ambas marcas llegaron a Santiago y apuntan casi al mismo público, aunque en el caso de Johnny B. Good, la gastronomía es más cercana, donde la pasta (bien preparada) es uno de sus caballitos de batalla.

Como está en un centro comercial, el Johnny B. Good debe cumplir el horario de atención del Mall, por lo tanto abren desde el desayuno con una entretenida y variada oferta para todos los gustos ya que a los café de especialidad le suman batidos, medialunas, desayunos americanos e incluso los famosos Croque Madam (3.200) y Bagels con salmón (4.300). La música a esa hora…rock, pero muy suave, al igual que al almuerzo, donde su público es bastante heterogéneo.

Conocí el lugar un día de semana a la hora de almuerzo. Mamás con sus coches, parejas adultas y mesas con ejecutivos indican que acá el rock duro y la gastronomía que creció al alero del pueblo norteamericano, no es lo principal del mediodía. Con mesas con sus respectivas sillas o coloridas butacas con mesitas más bajas, decidimos almorzar en estas últimas, más por comodidad que por la dificultad posterior al comer pastas. Aun así, y con aperitivos y vino en botellines (no hay servicio de copas de vino), llegaron a nuestra mesa algunos “apetizers” de bastante buen gusto como los Avocado Shrimps (6.900), originales camarones a la plancha y emulsión de palta, sobre crocantes de plátano macho, coronados con salsa criolla de mango; y la Italian Bruschetta (6.500), sabroso de pan de campo con salsa filetto, queso mozzarella marinado, jamón crudo, tomatitos asados, rúcula y albahaca. Para los vegetarianos, tan en boga en la actualidad, ofrecen el Healthy (8.900), un lindo y colorido bowl con quínoa, hummus, hongos confitados, tomatitos cherry, rúcula, arvejas, zapallo asado, palta, cubos de mozzarella rebozada con mix de semillas y huevo poché, aderezado con lactonesa de tomate. ¡Genial!

Buenas pastas considerando el amor que sienten los argentinos por ellas. Dos platos que nos dejaron con cero apetito para seguir engolosinándonos. Un muy bien logrado Linguine di mare (8.900) con salsa filetto (salsa de tomate sin carne), camarones, pulpos enanos y choritos salteados, albahaca fresca y aceite de ajo, para finalizar con unos enormes Conchiglioni di bosco (9.900) con salsa de hongos y tocino ahumado. Además de las pastas, la carta ofrece carnes y pescados bien elaborados, que van más allá de lo que se piensa al pasar por el lugar, que con injusta razón se puede pensar que acá no salen de las hamburguesas, las alitas de pollo y las Bbq ribs. Los niños también tienen un pequeño menú a escoger entre nuggets, hamburguesas o spaghetti, todos a $5.900. 

Con una tremenda batería de cócteles, predominan los antiguamente llamados tragos de fantasía y que en la actualidad le llaman coctelería de autor o mixología, con tragos suaves, moderados o intensos a escoger. El vino está relegado a una pequeña mención dentro de la carta y esperamos que pronto este ítem sea más destacado y variado.

En resumen: Johnny B Good es más de lo que parece ser, y si bien tiene un target muy definido entre el adulto-joven, la opción gastronómica es bastante interesante, sea o no cultor del rock. Buena apertura en el sector de los nuevos restaurantes del Mall que complementa una oferta gastronómica que se amplía día tras día.  

Johnny B. Good / Mall Alto Las Condes /Av. Presidente Kennedy 9001 / 22299 6965