PUNTO OCHO
El nuevo comedor del chef Claudio
Úbeda
Le
ha costado al Cumbres Lastarria posicionar su cocina. Este es un hecho que no
se puede desmentir. Desde su inauguración han tenido varias propuestas que no
tuvieron buena respuesta del consumidor. Cuatro chefs han pasado por sus
cocinas sin mayor trascendencia. El Punto Ocho, un nombre que imagina un salón
de pool, cuenta desde hace un par de semanas con un par de novedades dignas de
mencionar. La más importante, por así sentirlo, es que Claudio Úbeda, chef
ejecutivo de la cadena hotelera y a la vez chef del Cumbres Vitacura, tomó las
riendas del hotel de la calle Lastarria, con el fin de mejorarlo
definitivamente.
Para
ello, y junto con renovar completamente la carta del comedor principal ubicado
en el octavo piso de este lindo lugar, complementó la cocina del bar,
actualmente en alianza con Catad’Or, donde a una generosa oferta de vinos y
cócteles se suman tapas y platillos que maridan a la perfección con esta nueva
barra del barrio Lastarria.
Fiel
a su estilo, la carta del Punto Ocho creada por Claudio Úbeda, se enfoca en la
cocina chilena de mantel largo, su especialidad. De ahí una de sus entradas,
como una increíble Perdiz en escabeche, perfumada a la trufa negra de Futrono,
con tostadas y mantequilla de perejil (9.100), es un “hit” que no hay que
perdérselo. Para los que prefieren lo
marino, sus Láminas de atún selladas con aire de eucalipto, crujiente de luche
y selección de brotes (11.100), es otra de sus genialidades.
Con
todo esto del nuevo siglo, es fácil deducir que en el país hay diecisiete
millones de fotógrafos, y de ello dan fe todas las redes sociales. Mientras más
lindo se vista un plato, mayor es la posibilidad de convertirlo en best seller.
Sin embargo, los que captan imágenes no sabrían cómo calificar uno de los platos
más gratos y sabrosos que ha salido de las cocinas de Claudio Úbeda desde sus
inicios en Puerto Varas. Se trata de una Malaya de cerdo cocinada a baja
temperatura, con estofado de repollo con murtilla, papas asadas y salsa de
merlot (14.000), que, si bien parece un típico plato alemán familiar, su sabor
y texturas son para elevar las manos y agradecer a los dioses la llegada del
chef Úbeda a esta cocina del centro de Santiago.
Carnes,
pescados, mariscos, pastas y postres (como su Torta de Cola de Mono - $3.800-) en
una nueva carta que se agradece. Poco a poco, este comedor hotelero –donde el
servicio es otro de sus puntales- se está convirtiendo en uno de los mejores
restaurantes del barrio, ya sea a la hora del happy hour en la renovada barra
del bar, o en el piso 8, donde la calidad no se transa y el sabor es
inconfundible.
Esperemos
que la quinta sea la vencida.
Punto Ocho / Hotel Cumbres
Lastarria / Lastarria 299 / 22496 9000