miércoles, 16 de septiembre de 2009

LA NOTA DE LA SEMANA

HUIFA RENDIJA
La mama y la hija...

Estamos de lleno en nuestras fiestas patrias. La semana ha sido a media marcha y muchos de los que no han viajado ya están preparando sus vituallas para celebrar como corresponde. Ad portas de un bicentenario que no es tal ya que el verdadero recién será el 12 de febrero de 2018 (fecha en que se firma la independencia), y tratando de dejar atrás una crisis económica que fue bastante menor que la anunciada, los chilenos saldrán a las calles a celebrar una fiesta costumbrista y de larga tradición.

De que tengamos recuerdos, el asado y las empanadas mandarán este año. Las fondas y ramadas también aunque ahora algo más modernas, con ritmos tropicales y todo. Una fiesta casera por así decirlo. Los restaurantes, salvo excepciones, pasan a segundo plano y la estrella es la parrilla, nueva o vieja, de la casa. Ahí, entre marraquetas, choripanes, vino blanco y del otro, asado carnicero y los más pudientes un lomo veteado, se pasan las fiestas, las que continúan al día siguiente donde los sobrevivientes logran, entre pestañada y pestañada, ver la parada militar.

Así somos y seguiremos siendo. Achilenados durante una semana al año. Felices y contentos celebrando las fiestas y el inicio de la temporada de terrazas, vino rosé y de la vida al aire libre. Nosotros también haremos lo mismo. Iremos tras los asados, las empanadas y el vino tinto y postergaremos nuestros comentarios habituales de la gastronomía nacional. Es una vez al año y hay que celebrarlo como corresponde.