miércoles, 11 de noviembre de 2009

BUENOS PALADARES

LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

YIN Y YANG
(La Segunda Internet)
(30 octubre) CAFÉ DEL ÓPERA (Merced 389 -391, Santiago Centro, fono 664 3048): “El “Café del Ópera”, con capacidad para unas 80 personas, presenta a la entrada una variedad de helados y sorbetes artesanales de elaboración propia (como en todos los rubros) y sabores originales” “Aparte de una decena de cafés diferentes, más tés e infusiones ($ 1.200 a $ 2.000, salvo los que llevan licor) para consumir a cualquier hora, hay desayunos de precio fijo ($ 5.000 el que incluye canasta de panes, omelette, jamón y queso, jugo natural de frutas, café o té y mermelada casera como los panes) y a la carta. Asimismo, ensaladas y sopas ($ 2.500 a $ 4.200), tortas, pasteles, postres con o sin masas, galletas y pralinés con chocolate belga ($ 1.000 a $ 3.000). Entre los ingredientes hay también chocolate de Venezuela, tés Twinning e Inti Zen (de Inés Berton), infusiones Chamanna, pistacho y vainilla de Irán y café de Italia.” “Sin duda, la apertura del “Café del Ópera” es una gran noticia no sólo para el barrio sino para todo el centro de Santiago y su numeroso público.”

ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(6 noviembre) JUAN Y MEDIO (Huérfanos 2076, Barrio Brasil, fono 696 6337): “Rico y abundante, bien servido (aunque lento, casi media hora entre pedido y servido) y haciendo de lo simple un estilo. Así es esta picada que nació caminera (Longitudinal sur, Km. 109) y que debe su nombre al tamaño de su fundador, el de un ser humano y medio.” “Aquí se parte con empanadas, lengua de vacuno mayo o jamón con palta, para luego pasar por: un conejo escabechado de cuento (glorioso: $5.300), una plateada exquisita ($4.400), una lengua casi íntegra (le faltó sazón, ojo, $2.650) o el plato del día, que a veces son, por ejemplo, riñones al jerez, y en este caso guatitas a la jardinera ($3.100). Por ahí una ensalada surtida ($2.400) y en casi todos los casos la compañía de papas fritas (de las mejores de la capital, y no es exageración, a $1.600 la porción).

SOLEDAD MARTÍNEZ (Wikén)
(6 noviembre) BAR AUSTRAL (Maturana 515, casi esquina de Catedral, fono 688 8892): “La carta de comidas es breve y centrada en los productos del mar, con unas lenguas de erizos pequeñas ($7.000), servidas con "barritas" de pan en vez de tostadas y reemplazadas luego por toscos trozos de pan francés. Las seis empanaditas fritas de locos ($5.000, aunque la lista decía $6.000), adecuadas para compartir. Los locos "a la orden", pedidos al natural, traían cuatro unidades por plato ($10.500), bastante blandos y de porte discreto, con pocillos de mayonesa, pasta de ají y cilantro, y gran cantidad de verduras cortadas casi en hilos que, como adorno, resultaba excesivo, y como acompañamiento carecía de todo aliño. Mejor me pareció el "pastel" (más bien chupe) de jaiba ($6.500), suave y de cubierta dorada, servido en ollita de greda. Hay variedad de mariscos, pero sólo se anuncian tres pescados.”

CARLOS REYES (La Tercera)
(6 noviembre) DALOU (Cirujano Guzmán 194, Providencia, fono 848 8773): “… las opciones protagónicas transitan por la tradición francesa y belga, era que no, pero por variar y buscar más público, experimentan con opciones peruanas y un par de pastas. Un recorrido por ambos estilos dirimió que lo mejor es decidirse por el recetario francoparlante. De seguro no habrá arrepentimiento al pedir un Tártaro de Salmón ($ 4.200), impecable en su frescura y fina grasitud, junto a una sazón jengibre y pimienta que es pura chispa, sin dejar de lado lo estelar del ingrediente base. Del Cebiche a la Peruana ($ 5.100), lo contrario: dados pequeños y un tanto pasada la marinada, pero sobre todo sin esa picardía propia de los vecinos norteños, que da mucha ventaja.” “Así es que en resumidas cuentas, pastelero a tus pasteles. La matriz gala de Dalou es la que cuenta -y por cierto, la suavidad y textura de su Créme Brulée ($ 2.800) corrobora esa sensación-. El resto, de momento, no tiene mayor brillo. Sin contar con una atención que necesita ponerse las pilas. Pero a la hora de pensar en un europeo atinado en su sencillez y a precio razonable para el estilo, este es un sitio indicado.”

YIN Y YANG (La Segunda Internet)
(6 noviembre) OX (Nueva Costanera 3960, Vitacura, fono 799 0260): “Así, si bien desde la lista de entradas figuran platos dedicados a los carnívoros, como mollejas, matambre, tártaro, achuras o longanizas, los hay allí de gran finura, incluido el foie gras, o creados por su chef, como el “eggroll de prieta”. En cuanto a los mariscos, más que ofrecerlos al natural, predominan las recetas elaboradas. Así hay croquetas de cangrejo y de locos, o los ostiones importados de Canadá, apenas sellados en mantequilla con fina salsa de locos. Pero también están en un plato surtido o en el caso de la centolla, cuyo precio de $ 90.000 lo explica el restaurante asegurando que su tamaño alcanza para tres o cuatro porciones, y que además la centolla se sirve con ensalada a $ 14.900.” “Pese a lo dicho, está claro que el fuerte del local son sus cortes “premium” de vacuno, donde aparte de los más conocidos, como el asado de tira, el lomo vetado o el filete, existen otros más originales, entre ellos el filete y lomo liso con hueso, el petit tender o el suculento corte cow-boy de 800 gramos. Para el delicado tema del grado de cocción de la carne. Se propone una lista muy completa de cinco puntos: a la inglesa, inglesa medio, medio, a punto y bien asado, en cuyo exacto cumplimiento se compromete el parrillero.”

DANIEL GREVE (Qué Pasa)
(7 noviembre) SOUL OF INDIA (Av. Vitacura 4111 fono 228 2825): “Toda esta puesta en escena pop sirve de evocación, de contexto para todo lo demás: grandes y crocantes naans -panes típicos de la India-, ricos lassis dulces -bebida de yogurt casero y almendras- y buenas porciones especiadas, con ligeros picores. Ahí están los excelentes Murgh Makhanwala ($ 6.800), trozos de pollo marinados, con crema, mantequilla y especias indias -tika masala- y salsa de tomates; el Fish Bangal Curry ($ 6.900), reineta marinada con yogur, en salsa atomatada, garam masala, ajo y cilantro, muy sabroso, de sabores envolventes; y el alucinante Dal Tarka ($ 4.000), lentejas amarillas de la India cocinadas con mantequilla, curry, ajo y ají rojo, un vicio. No se pierdan los helados caseros de almendras frescas y de pistacho. Ni dejen pasar la oportunidad de fumar en la terraza. Puede ser una excelente avant première.”

BEGOÑA URANGA (El Sábado)
(7 noviembre) LAS CARNES DE MORANDÉ (Morandé 538, Santiago Centro): “Una parrilla preside el salón de no fumadores, pero sorprendentemente no tiene mucho "género" en ella. Una pechuga de pollo y un par de lomos y sería todo. Nada que tiente a los golosos. Quizás aquí se almuerce temprano. Buen tiraje de los humos cárnicos, todo hay que decirlo. Nada de olor en la ropa.” “Preguntado por las parrilladas, trajo un pequeño papel en el que se ofrecían de dos tipos... pero nunca figuraron en el menú ni se supo de su existencia si no se hubiera preguntado. Raro. Suelen ser como la oferta central de una parrilla. En todo caso, un lugar agradable, para comer sin sorpresas, pero que tampoco entusiasma demasiado. Correcto.”

PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(8 noviembre) CAFÉ ARMANI (Alonso de Córdova 3053, Vitacura, fono 919 4805): “La carta está en italiano, pero –por suerte– traducida, para no perderse. Tuve que preguntar por el plato del día, ya que nadie me lo ofreció. Eran unos tagliatelle con espárragos, ambos exquisitamente al dente, y su copa de sauvignon blanc de Leyda. Mi acompañante pidió una melanzane ripiene, berenjena que según la carta venía rellena con mozzarella de búfala y tomatitos cherry. El plato era bastante pecaminoso: traía pan frito, y no poco. Estaba delicioso y muy bonito, pero de light, nada. De postre, pedimos una preparación de ricota con canela y salsa de naranja, que era mejor de lo que sugería su descripción. Llegó una tartaleta casera exquisita, con un relleno sutil y poco dulce, canela y salsita al lado. Divino. Nos tocó atención amable y a buen ritmo.”