LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA
CARLOS REYES (Unocome.cl)
(1 enero) KINTARO (Monjitas 460, Santiago Centro, fono 638 2448): “¿Por qué uno siempre va a la segura cuando come en Kintaro? Tiene claridad ambiental, tiene onda de barrio, precios al alcance de cualquier mortal y una puesta en escena cuyo orden se guía por el sentimiento japonés, pero en el fondo es una picada para el santiaguino promedio, pero con otro acento. El servicio, rápido, expedito sin mayores aspavientos, que sabe reconocer a sus parroquianos -muchos-, y que funciona al ritmo del lugar. Su cocina, aparte de algunos pequeños preciosismos -a ojos de occidental-, es de una sencillez que permite ir a diario y no aburrirse, donde juega bien con sus opciones frías y mucho mejor en las calientes, por sabrosas y abundantes. Resumiendo, uno de los puntos altos del buen comer en el centro, independiente de su estilo.
PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(2 enero) QUINOA (Luis Pasteur 5393, Vitacura, fono 954 0283): “Partimos pidiendo un jugo de piña y zanahoria, que no estaba en la carta pero me prepararon encantados. Para picar, traen una bolsita de tocuyo en que vienen pancitos integrales y galletas de granos hechas en casa increíbles, como para llevárselas. Al lado, una suerte de pebre molido, sanito y rico. Probamos la ensalada de quínoa roja, que venía sobre un mix de hojas verdes, con palta, tomates cherry y un aliño con limón, miel y jengibre. El timbal de quínoa, grandecito, tenía aceitunas. El otro plato fue una lasaña de berenjenas con zapallitos italianos y queso de cabra, también con ensalada verde, muy bien presentada en porción individual. Estaba superrica. De postre compartimos uno de yogur con salsa de maracuyá acidita, muy bueno. La carta también ofrece buenos sándwiches vegetarianos, quedó pendiente probarlos.”