miércoles, 4 de enero de 2012

BUENOS PALADARES



LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

SOLEDAD MARTÍNEZ
(Wikén)
(30 diciembre) CASA LASTARRIA (Lastarria 70, local 1, Santiago Centro): “Como entradas, cuatro empanaditas triangulares de camarón con queso y ciboulette, en buena masa de hoja ($3.500), y tártaro (más bien "crudo") abundante, aliñado con pepinillo, cebollín, pimentón y mostaza, servido con trozos de pan frito ($4.900). Como platos de fondo, ravioles grandes y bajos con relleno de alcachofa y jamón, cuyo sabor murió bajo una desproporcionada invasión de salsa de tomate líquida con queso, hojas de rúcula y aceite de vainilla ($5.900), y pastel de jaiba con mucha carne del crustáceo, pero aún más queso, no sólo gratinado, que secaba y salaba el conjunto, y unos camarones anunciados que no logré encontrar, con el adorno de una galleta también de queso ($6.200).” “En el conjunto se alternan recetas bien identificadas con los gustos chilenos actuales, principalmente de carnes pero también de pescados, que atendiendo a lo que conocí no sobresalen pero, según se aprecia, dejan satisfecha a la clientela y tienen precios razonables.”

ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(30 diciembre) LOS TOROS ITALIANOS (Av. Fco. Bilbao 2435, Providencia, fono 341 0992): “En Los toros italianos sus platos son de carne CON pasta, lo que a primera vista es muy poco dietético y que a la segunda, tras uno de sus platos, se presenta como una apuesta sabrosísima.” “El plato en cuestión es un lomo vetado con ñoquis al pesto ($8.990). Tan, pero tan glorioso que es como para guardarlo en la memoria del gusto. Junto a él, un par de grandes canelonis rellenos con una pasta de tres carnes ($6.990). Sabroso, pero junto a esa otra maravilla resulta difícil descollar.” “¿Dieta? Ja. La oferta es clara y contundente, poco tímida y muy a la casera. Además tienen la opción de pedir carnes "al kilo" con dos pastas a elección, para compartir.”

RODOLFO GAMBETTI (Las Últimas Noticias)
(30 diciembre) BRISTOL (Alameda 816, Santiago centro, fono 360 4454): “¿Un pronóstico positivo para el 2012? Que cada día hay más gente que descubre la excelente comida chilena, y siguen destacando más cocineros que se esmeran para que se reconozca la identidad nacional.” “En la entrada, un pincho de pejerrey de mar de mar escabechado sobre habas tiernas ($7.500). Aunque aligerado de vinagre con algo de vino blanco, mantiene una tradición que es un delicioso recuerdo. Después, privilegio de caleta, un congrio colorado con la más rica ensalada de algas locales, que enloquecerían a un japonés ($12.400). Como alarde de cocina, un plato a los tres vacunos: como tártaro sobre champiñones, en arrollado de malaya con pebre y como charqui en chancao de papas ($8.900). Hay que reconocer eso sí que el Bristol es de primera categoría desde que abrió, y que su chef, el afamado Axel Manríquez, hace honor a tan notable gastronomía.”

PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(31 diciembre) JUAN Y MEDIO (Km 109 sector Rosario, Ruta 5 Sur): “Nosotros pedimos un pastel de choclo, aliñadito al comino y bien rico; un par de humitas tremendas (acá todo es grande, en honor a don Juan y Medio, que era un señor de casi dos metros) y ensalada de tomates XL. Yo no me pude resistir a un sándwich de lengua con tomate, mayo y ají verde, uno de mis favoritos. El único problema es que ¡era demasiado! Venía una verdadera montaña de tajadas de lengua de vacuno y de tomate que se escapaban del pan y que tuve que comerme primero antes de poder siquiera tomar el pan como si de veras fuera un sánguche. Cuando eso pasó, no me lo pude terminar pues estaba repleta.” “De todo lo descrito comimos 2 adultos y 3 niños, y sobró una humita completa, la que fue envuelta como la mayoría de los platos que el público no se alcanza a comer. Como en toda picada que se precie, hay bebidas de litro y medio. En suma, Juan y Medio sigue siendo una excelente parada en relación precio-calidad.”

YIN Y YANG (La Segunda Internet)
(30 diciembre) DA CARLA (Av. Nueva Costanera 3673, Vitacura, fono 206 0892): “En nuestra última visita, nos llamó la atención --además de los productos importados de Italia, como la mozzarella di bufala, el prosciutto San Daniele, el queso parmigiano reggiano, el prosecco di Valdobbiadene, el riesling de Umbría o el vinagre balsámico de Modena--, la diversidad de zonas geográficas italianas allí representadas: crudo de Gubbio (Umbría), pulpo a la palermitana (Sicilia), melanzane alla parmigiana (Parma), ensaladas Riomaggiore y del Golfo di Cetara, minestrone genovese, sorrentini de los Alpes, gnocchi a la sarda (Cerdeña), caserecci napolitanos, peperonata de Siracusa.” “Se confirma así el rasgo dominante de esta cocina: su carácter regional, hasta el punto que suele decirse que la comida "italiana" como tal no existe. Vale la pena probar la actual carta del chef César Palomeque para empaparse de esta riqueza de productos y sabores.”