miércoles, 22 de marzo de 2017

LA NOTA DE LA SEMANA

LOS PREMIOS DEL CIRCULO DE CRONISTAS
El premio al chef del año quedó desierto
 
Con una ceremonia llena de emoción se realizó ayer martes la entrega de premios que desde el año 1994 el Círculo de Cronistas entrega a personas, empresas e instituciones destacadas en el ámbito de la gastronomía y el vino. Este año el lugar escogido fue la Plaza de la Cultura del centro gastronómico BordeRío, donde una gran asistencia aplaudió a los ganadores de los premios por su desempeño el año 2016 y luego festejaron con un gran coctel ofrecido por los empresarios gastronómicos que poseen restaurantes en este complejo gastronómico.

Diez fueron los galardonados en el área gastronómica. Como Mejor Restaurante se destacó al 99 RESTAURANTE por su gran labor realizada durante el año pasado en base a una cocina de autor a precios realmente sugerentes. Un concepto diferente, cuya gracia es la sencillez para ofrecer y preparar alta cocina sin pretensiones ni ampulosidades.

Como Mejor Restaurante de Cocina Chilena fue premiado THE GLASS, perteneciente al Hotel Cumbres de Vitacura, gracias al trabajo de su chef Claudio Úbeda y su incansable labor para rescatar recetas y sabores de antaño y darle un toque moderno, sin apartarse de la tradición. En la categoría Servicio, el reconocimiento fue para la sucursal chilena del RUBAIYAT, sin duda todo un ejemplo en lo que respecta al difícil arte de la atención al cliente y el correcto desempeño de sus sommeliers.

La relación precio /calidad es en la actualidad uno de los factores que más incide en el éxito de los restaurantes, por ello LE BISTROT mereció con ganas uno de los premios más difíciles y complicados que se entregan año a año. Aun así, los aplausos aumentaron cuando se dio a conocer que el típico bar-restaurante LAS LANZAS, una tradición de la Plaza Ñuñoa, creado en el año 1964, fuese reconocido como uno de los lugares más clásicos de la capital y merecedor del premio a la Trayectoria Gastronómica.

Poco a poco los restaurantes ubicados fuera de nuestra capital están llamando la atención de los amantes de la gastronomía. Por eso el Circulo decidió hace un tiempo premiar cada año a tres restaurantes (norte –centrosur- sur) con la finalidad de que sus cocinas se vayan fortaleciendo y masificando. En el norte de Chile, el premiado de este año fue el restaurante RAYU, especializado en cocina peruana de mantel largo, que ha logrado mantenerse dentro de los más significativos lugares de la Península de Cavancha, en Iquique. En las regiones del centro sur venció LA FLEUR DU SEL, comandado por el chef vasco-francés Michel Moutrousteguy y ubicado en las cercanías de Pucón; y en la región sur, el galardón fue para la cocina del HOTEL SINGULAR PATAGONIA, a cargo del chef Laurent Pascualetto, ampliamente conocido por todos los amantes de la gastronomía ya que también lidera las cocinas del hotel homónimo en nuestra capital.

Uno de los grandes premios, el de Chef Revelación, fue para JONATHAN MICHEL, actual chef del restaurante La Misión, quien llegó hace dos años a Chile, pero había pasado desapercibido. Es quien se hizo cargo, durante 10 meses, de la cocina del Ambrosía, mientras Carolina Bazán estaba en su pre y posnatal. Y hace ocho meses brilla con luz propia en el restorán La Misión, donde está haciendo una cocina de autor que encantó a la crítica especializada. Por otra parte –y al contrario de otros años- el Círculo no entregó reconocimiento al Chef del Año, ya que consideró que no existían merecedores a este galardón.

EL PAN EN CHILE, más conocido como “El libro del pan” de Antonio y Alberto Ferrán, fue considerado como la Publicación del Año. Este es un libro inédito de investigación y recopilación de relatos e imágenes que recupera el patrimonio emocional, industrial y nutritivo del pan en nuestro país, rindiendo un homenaje a los protagonistas que han aportado desde siempre de forma anónima a la maravillosa historia de una de nuestras industrias más tradicionales.

El vino logró cinco distinciones Como Bodega del Año, los cronistas resaltaron las bondades de la VIÑA SANTA CAROLINA y el equipo enológico de la bodega, gracias a una filosofía que tiene relación con el perfeccionamiento constante tanto de la calidad como del desarrollo y uso de nuevas técnicas productivas -en el viñedo y la bodega-, con el fin de producir vinos de excelente calidad con una orientación hacia la innovación y la sustentabilidad de largo plazo. Como Proyecto Vitivinícola Artesanal, la distinción fue para la viña CANCHA ALEGRE, un proyecto vitivinícola dirigido por Sergio Amigo, un apasionado del vino cuya familia es de la zona de Cauquenes, que tras ver amenazados muchos viñedos antiguos por empresas forestales que adquirían los predios para sacar las patrimoniales parras y plantar bosques de eucaliptus y pinos, se decidió a comprarlos y salvar las parras e iniciar la producción de vinos de calidad pero manteniendo sus características silvestres, artesanales y sin químicos.

Con más de 21 años a cargo de la enología de la Viña De Martino y un extenso curriculum que va desde la elaboración de vinos tradicionales y otros experimentales de gran éxito, el enólogo MARCELO RETAMAL fue considerado para el galardón a la Trayectoria Vitivinícola, por su excelente desempeño en el crecimiento de la identidad del vino en nuestro país y que se atrevió hace algunos años a que las viñas grandes también podían hacer “locuras”.

Hasta hace algunos años, la enología era cosa de hombres… hasta que comenzaron a aparecer las mujeres y cambiaron la sociedad vitivinícola nacional. Entre ellas está ANDREA LEÓN enóloga responsable de la línea Apalta de la viña Lapostolle que recibió el premio como Mejor Enóloga. Antes, había trabajado vendiendo barricas, lo cual le permitió conocer más del rubro y también viajó a Estados Unidos a hacer vendimias orgánicas. Todo eso le sirvió para su trabajo de hoy: es decir, para producir vinos de un desarrollo agrícola sin pesticidas ni fertilizantes artificiales, pero que en la bodega son trabajados con conservantes.

 
El ganador absoluto de la jornada fue EDUARDO CHADWICK, quien se llevó el máximo galardón que entrega el Circulo (dedicado a Rosita Robinovitch), empresario vitivinícola que consiguió que su vino Viñedo Chadwick cosecha 2014 obtuviera el máximo puntaje (100 puntos), posicionándolo como “el primer vino perfecto de Chile, según lo expresado por James Sucklin, el crítico de vino más influyente del mundo.

La ocasión también sirvió para entregar un reconocimiento a LAS ROSAS CHICAS, ganadora de la última versión del Concurso Anual de Empanadas que el Círculo de Cronistas realiza para las Fiestas Patrias.

En resuman: 16 galardones, muchas sonrisas y una señal de profesionalismo para el Circulo de Cronistas Gastronómicos que desde hace 22 años entrega estos reconocimientos que sin duda son de gran utilidad para el desarrollo de nuestra cultura eno-gastronómica. (JAE)