BRUNCH FAMILIAR EN EL
SHERATON
Los
niños, especialmente los menores de edad, siempre han sido un problema en los
restaurantes. Son muchos los que ven con malos ojos a las familias que van con
niños, coches y/o mamaderas; y si ya están más grandecitos, estos se aburren y
encuentran que es una eternidad el tiempo que ocupan sus papás –o familiares-
en almorzar. El tema es recurrente y en pocas oportunidades se nota la
preocupación del negocio por atraer niños, ya sea por el caos que provocan o
simplemente porque no están preparados para recibirlos, más aun en nuestro
país, donde hace algunos años los niños en restaurantes eran simplemente una
molestia.
El
fenómeno no es nuevo pero las reglas del juego están cambiando. En la
actualidad los niños son participes de las decisiones que toman sus mayores y
cada día adquieren más protagonismo en la sociedad. Por ello es meritorio que
en el restaurante El Cid, del hotel Sheraton, hayan decidido comenzar esta
temporada de otoño - invierno con sus brunchs familiares dominicales, donde los
chicos –sin ser los protagonistas principales- tienen su espacio y especial
atención.
Como
se puede ver en la foto que inicia este artículo, lo que es el espacio que
ocupa el restaurante “El Jardín” que está conectado al comedor principal, se
convierte en un jardín infantil hecho y derecho, donde ayudados por monitoras,
los pequeños tienen la opción de jugar y comer a sus anchas, dejando a los
papás o familiares compartir una mesa con una enormidad de especialidades
gastronómicas –frías y calientes- para todos los paladares. Mariscos, carnes,
pescados y pastas, todas preparadas con esmero por el equipo de cocina que
encabeza el chef Gustavo Maurelli, que convierten los domingos de la temporada
fría en un ambiente cálido, tranquilo y festivo.
Desde
ostras frescas a decenas de postres, pasando por variadas delicatessen (como
unos maravillosos huevos benedictinos, quesos y cecinas importadas), espumosos
a discreción y una carta especial para menores es la propuesta. Fui testigo de
su puesta en marcha y realmente es una de las buenas formas de pasar el día en
familia. Todos bienvenidos (ojalá con reservas), el costo es de $29.000 por
persona y los menores (entre 4 y 11 años) pagan la mitad, logrando convertir
este brunch (desde las 12.30 a las 16 horas) en uno de los pocos lugares de la
capital donde los niños pueden entretenerse con sus pares o bien almorzar con
su familia.
La
opción de los brunchs dominicales se está convirtiendo en un clásico de algunos
hoteles capitalinos. Lo interesante de esta opción es que puede participar la
familia completa en un ambiente amable y entretenido. Estamos en el siglo XXI y
hay nuevas normas de convivencia. Eso lo entendieron en el Sheraton y por ello
lo destacamos esta semana en Lobby, ya que es una buena noticia para nuestros
lectores. (JAE)
El Cid, Hotel Sheraton
& Convention Center. Av. Santa María 1742, Providencia / 22233 5000