LOS CÓCTELES MÁS FAMOSOS
DEL CINE
(Publicado
en revista Placeres, junio 2017)
DAIQUIRI DE PLÁTANO: “EL
PADRINO II”
En
la película de “El Padrino II”, Fredo le pregunta a Michael Corleone mientras
están sentados en una terraza de La Habana, “¿Cómo se dice Banana Daiquiri en
español?”, y su respuesta es “Banana Daiquiri”. El daiquiri fue creado a
finales del siglo XIX por Jenning Cox, un ingeniero estadounidense al que no le
quedaba ginebra para servir a sus invitados y que decidió mezclar el ron con
jugo de limón, rodajas de plátano y azúcar. Su éxito fue instantáneo.
COSMOPOLITAN: “SEX AND
THE CITY”
Se
cree que este cóctel fue inventado en la década de los 70, pero su creación no
está reconocida hasta 1987. Atribuyéndose tanto a John Caine como a Toby
Cecchini. En cualquier caso, lo cierto es que nadie ha hecho tanto por el
Cosmopolitan como las protagonistas de “Sexo en la ciudad”, que se reunían a
disfrutar de él mientras hablaban sin ningún tipo de complejos de sexo y
relaciones.
VODKA TONIC: “PERDIDOS EN
TOKIO”
Una
de las pócimas favoritas en el mundo es el Vodka Tonic, que aparece en
“Perdidos en Tokio”. En la película, una melancólica Scarlett Johansson tomaba
esta bebida mientras intentaba encontrar consuelo en la gran ciudad de Tokio y
tropieza con Bill Murray. Una mezcla que contiene vodka, jugo de limón,
Angostura y tónica y que sin duda recomendamos probar.
VODKA MARTINI: “BOND…
JAMES BOND”:
El
Martini es uno de los cócteles más consumidos en el mundo y data de finales del
siglo XIX. Una de sus variantes es el Vodkatini, donde se sustituye la ginebra
por el vodka. “Un Vodka Martini agitado, pero no revuelto” fue la bebida del
agente James Bond 007. Desde el primero, encarnado por Sean Connery, hasta el
último, que ya se ha pasado a la cerveza.
CÓCTEL DE CHAMPAGNE:
“CASABLANCA”
A
pesar de que Rick Blaine (Humphrey Bogart) nunca bebía con clientes, Isa Lund
(Ingrid Bergman) se salió con la suya. Ambos compartieron el momento en el que
bebieron un Champagne cóctel en la famosa película Casablanca (1942).
Champagne, un cubo de azúcar y amargo de Angostura es la base de este clásico
mundial, creado por el barman John Dougherty en un concurso realizado en Nueva
York en 1889.
MANHATTAN: “UNA EVA Y DOS
ADANES”
Una
de las escenas más famosas de toda la historia del cine es cuando Marilyn
Monroe traspasa en secreto –en tiempos de la prohibición-, litros de Manhattan
a un guatero, en las literas de un tren rumbo a Florida, bajo la atenta mirada
de Tony Curtis vestido de mujer. El cóctel perfecto para infringir las normas y
ser un poco traviesa, como la rubia más deseada de todos los tiempos.
MOLOKO PLUS: “LA NARANJA
MECÁNICA”
Una
de las películas más transgresoras de la historia del cine es sin duda, “La
naranja mecánica”, con la que Kubrick consiguió dejar a medio mundo con la boca
abierta. El famoso cóctel que bebían sus personajes contiene leche, opiáceos,
mescalina o adrenocromo. Una mezcla que no resulta nada fácil de preparar. No
obstante, muchos bares han elaborado deliciosas reinterpretaciones del mismo
con licor de vainilla, brandy, Pastis, clara de huevo y leche.
RUSO BLANCO: “EL GRAN
LEBOWSKY”
Todos
recordamos aquellos famosos paseos de Jeff Bridges con su harapienta bata de
levantar y sus chancletas baratas. Solamente comparables con uno de esos
cócteles que se volvió a poner de moda gracias a la esta película de culto. El
Ruso Blanco es perfecto para un día especial y es muy sencillo de preparar,
pues solamente necesita vodka, Kalhúa, azúcar y leche.
WHISKY: “NUNCA ES TARDE
PARA ENAMORARSE”
Harvey
(Dustin Hoffman), al borde del colapso, llega a un bar y pide un Johnnie
Walker. Kate, (Emma Thompson), que bebe vino blanco y lee una novela en una
mesa cercana le dice: “Eso ayudará”. Irónico, él replica: “Tanto como esa
novela barata y la copa de chardonnay”. Ya se habían cruzado antes, pero en
esta escena se conectan por primera vez. Después vendrá el cruce de miradas y
las palabras que darán comienzo a la relación.
OLD FASHIONED: “IT’S A
MAD MAD MAD WORLD”
A
pesar de que su traducción sea “pasado de moda”, este cóctel nunca lo estará.
Esta bebida ha sido un ingrediente en varias películas, como en “It's a Mad Mad Mad Mad World” (1963) donde
Tyler Fitzgerald (Jim Backus) se toma tres Old Fashioned mientras pilotea su
avión. Cuando se prepara el cuarto, pide ayuda en el pilotaje a Benjy (Buddy
Hackett), que le pregunta “¿y si algo pasa?”. Fitzgerald responde “¿qué puede
un pasarle a un Old Fashioned?”