EUROPEO
De
Europeo solo va quedando el nombre. Fama siempre ha tenido. Su historia, si
bien no ha sido larga, es intensa. Su propietario inicial, Carlos Meyer, le dio
un renovado impulso a la gastronomía capitalina, convirtiéndolo en uno de los
mejores restaurantes del país durante muchos años. Con el tiempo Meyer se cansó
de las intensas horas de trabajo y decidió traspasar en noviembre del 2011 su
restaurante (no así la propiedad) a nuevos empresarios, quienes con menos
suerte resolvieron salirse del negocio e impulsar el regreso del chef Francisco
Mandiola, quien, en compañía de varios socios y familiares, están logrando
nuevos éxitos, esta vez en base a la búsqueda de un target y cocina diferente,
dejando de lado la seriedad y el nivel de exclusividad de sus propietarios
anteriores.
Tres
ambientes para disfrutar: un salón con cocina a la vista, de sobria decoración
donde los grises y blancos contrasta con los coloridos platos que llegan a las
mesas. Afuera, una linda terraza llena de verde y una carta más informal, y al
fondo, un bar –el Jardín Secreto- que, con cocina y barra independiente, abre
sus puertas los días miércoles para conocer nuevos cócteles creados por
Michelle Lacoste y una variedad de bocadillos que van variando semanalmente.
Sin
duda el producto es nacional y eso lo hace atractivo. Partir con una intensa
ensalada de Piures –el marisco más odiado o amado del país- sobre un suave
milcao chilote y coronado con brotes de cilantro, es sencillamente un poema
para el paladar. Es la prueba de que todo tiene un
significado y está milimétricamente estudiado. Es la partida de un menú degustación de nueve tiempos inspirado en nuestra tierra. Lo mejor es dejarse llevar ya que si bien este menú tiene pocos cambios, el día a día hace la diferencia. Como unos maravillosos Erizos (en veda hasta el próximo 15 de enero) con espárragos, tan perfecto que da pena probar el plato destruyendo su decoración; o simplemente unos grandiosos Porotos granados con camarones de orilla (de roca le llaman también), o un perfecto cebiche de corvina en caldo de coral… ¡Sublime!
significado y está milimétricamente estudiado. Es la partida de un menú degustación de nueve tiempos inspirado en nuestra tierra. Lo mejor es dejarse llevar ya que si bien este menú tiene pocos cambios, el día a día hace la diferencia. Como unos maravillosos Erizos (en veda hasta el próximo 15 de enero) con espárragos, tan perfecto que da pena probar el plato destruyendo su decoración; o simplemente unos grandiosos Porotos granados con camarones de orilla (de roca le llaman también), o un perfecto cebiche de corvina en caldo de coral… ¡Sublime!
¿Cuánto
cuesta tanta maravilla?
Increíblemente,
menos de lo que el lector estima. Como la idea original de sus nuevos
propietarios fue cambiar el target de sus clientes, sus valores están bastante
más accesibles para los que acostumbrar visitar buenos restaurantes. En este
caso, el menú de nueve tiempos, tiene un valor de $39.000, y si se desea
agregar un maridaje con vinos nacionales, son $18.000 adicionales. Si bien no
es una ganga, muchos restaurantes superan con creces estos valores.
Hay
que dejar de tenerle miedo al Europeo. Posiblemente lo único del viejo mundo
que le quede es la apuesta por la calidad y la sobriedad a toda prueba.
Personalmente, lo mejor de este año. (JAE)
Restaurante Europeo / Alonso
de Córdova 2417, Vitacura / 22208 3603