EL NEGRONI
Cada
bebida es especial y más aún cuando tiene una sorprendente historia. Esta trata
de un conde italiano que decidió hacerle una variación a la receta tradicional
y creó uno de los cócteles más disfrutado a nivel mundial y que celebra sus 100
años acompañando veladas: el Negroni.
Un
día, Camillo Negroni le pidió al barman Fosco Scarselli ponerle gin (bebida que
había conocido en su paso por Inglaterra) en lugar de soda a su Americano y fue
ahí donde nació uno de los emblemas de la historia. Elegante por donde se le
mire y con un particular sabor, ha conquistado paladares a lo largo de los
años.
Su
presencia en la historia no solo se centra en mesas o bares. El reconocido
escritor Ernest Hemingway bautizó a uno de sus nueve perros en Cuba inspirado
en el Negroni. Mientras que el famoso director Orson Welles lo calificó en su
momento, como un perfecto ejemplo de equilibrio de sabores.
Si
bien tiene 100 años de tradición, prepararlo no es para nada complicado. Para
disfrutarlo solo se necesita de tres ingredientes en partes iguales: gin,
vermouth rojo y Campari, acompañados de hielo y una rodaja de naranja. Sin
embargo, medir las proporciones de manera incorrecta, o no mezclar bien los
insumos, puede acabar por arruinar a este clásico. Una onza de cada uno es lo
más recomendable.