LOS MEJORES
PLATOS DEL 2019 (Regiones)
Revisando
los artículos que aparecieron en Lobby, hemos seleccionado una gran cantidad de
preparaciones que podrían ser consideradas como las mejores del año 2019.
Durante estas semanas de verano iremos publicando semanalmente siete
preparaciones, con el fin de que nuestro lector reconozca que más allá de un
restaurante, hay platos sublimes y que no se pueden dejar de lado. Esta semana,
los mejores platos de la cocina regional.
MACERADO
(Algarrobo)
Encontrar
en balnearios (sean populares o de alcurnia) restaurantes que atiendan todo el
año y funcionan como los mejores de la capital, es toda una odisea, ya que
generalmente fuera de temporada todos duermen una larga siesta. Pero desde que
se instaló el Macerado en Algarrobo, cambió completamente el concepto de cocina
y servicio que existía en los primeros años de esta centuria. Mariscos y
pescados, carnes – comunes y exóticas-, vegetales (de su huerta) y una carta
increíble de vinos, complementan este lugar, que sobresale a su competencia,
gracias a la visión de la familia Donoso y su chef ejecutivo Carlos Mardones.
De lo probado el 2019, altamente recomendable es el Atún, cocinado como un
tataki, con lentejas, ciruelas y avellanas tostadas. Un verdadero must.
¡Inolvidable!
PUERTO CLARO
(Valparaíso)
Los
cerros del puerto se han transformado –este último tiempo- en grandes
atracciones gastronómicas, donde el turismo ha contribuido al desarrollo de
hoteles, bares y restaurantes en algunos cerros cercanos al desastroso plan de
esa ciudad. Acá, en el cerro Concepción,
destaca en una remodelada casona del 1840 el Puerto Claro, donde el chef
Antonio Moreno, saca aplausos con sus Ostiones magallánicos (sin coral) con
crema de coliflor, salsa de mandarina y cereales suflados. Una gran forma de
conocer el gran sabor, la textura suave y fibrosa de los ostiones de los
glaciares magallánicos. ¡Un vicio!
TANINO (Casablanca)
Ver
un comedor repleto de turistas chilenos y extranjeros en un día de semana es
como un bálsamo. No es fácil llenar un comedor, y más aún en Casablanca, en una
viña (Casas del Bosque) que no está precisamente pegada a la carretera. En la
carta de Tanino hay codornices, tres de ellas asadas a la mantequilla de
hierbas, panceta y puré de nuez, lo que demuestra que esta cocina a cargo del
chef Álvaro Larraguibel está para grandes cosas. Ricas, bien preparadas y
jugosas, es un plato para no olvidar durante largo tiempo.
FUEGOS DE
APALTA (Santa Cruz)
Un
imperdible en el Valle de Colchagua es almorzar rodeado de viñedos bajo un
entorno maravilloso como lo es el valle de Apalta. Allí, uno de los chefs más
famosos de Argentina, ganador de importantes premios internacionales, Francis
Mallmann, originó la propuesta gastronómica de este restaurante de alto nivel
(y precios) que, –a pesar de todo (y todos), es necesario visitar al menos una
vez en la vida. Y si de platos se trata, imperdible es la milanesa de filete –a
la argentina-, con huevo frito y tomate horneado con ajo. Un éxito en todos los
restaurantes que maneja. ¡Un crack!
BALANDRA
(Puerto Varas)
En
plena costanera de Puerto Varas y en la actualidad manejado por la cadena
Radisson, en el Gran Hotel Colonos del Sur sobresale la cocina del chef Oscar
Bermúdez, que sorprende con unos increíbles Ravioles de locos, salsa de queso
maduro y tomates salteados, coronado con escamas de bonito seco, recurso muy
utilizado en la cocina japonesa, que, aparte del sabor –que armoniza a la
perfección con los locos-, el vapor que emana del plato hace que las escamas se
muevan como en un baile. Una osadía que ha convertido esta preparación como una
de las más solicitadas por sus visitantes. Lindo lugar. Estéticamente, uno de
los mejores de la localidad.
CUMBRES DEL
LAGO (Puerto Varas)
Reconocido
como uno de los grandes restaurantes de la zona sur, su comedor ofrece una
experiencia gastronómica única, en la que se funde lo mejor de los productos
locales con la delicadeza y el servicio de la cocina internacional. A cargo del
chef ejecutivo Hugo Cavieres, la carta tiene una variada oferta de carnes
exóticas, productos del mar y platos típicos de la zona. Entre sus
preparaciones destaca la Centolla en dos tiempos que consiste en un raviol de
centolla con queso crema envuelto en papel de arroz, acompañado de una emulsión
de cebollines y, por otra parte, un tártaro de centolla y palta, lo que permite
tener dos temperaturas y texturas distintas con un mismo producto, haciendo más
entretenida la propuesta al momento de degustar. ¡Genial!
THE SINGULAR
(Puerto Natales)
En
Puerto Bories, a cinco kilómetros de Puerto Natales, se ubica el hotel de lujo
The Singular, cuya propuesta gastronómica está dirigida por el chef Hernán
Basso, capaz de equilibrar en cada uno de sus platos los toques chilenos y
franceses para generar sabores únicos.
Los ingredientes base son el cordero, liebre, guanaco (uno de los más
populares), centolla, ostiones, pulpo, salmón. Los sabores son únicos y los
acompañamientos, perfectos. Como el pebre de mote y menta que se sirve como
guarnición del tártaro de guanaco. Buena forma de deleitar su paladar en el
medio del paraíso.