martes, 10 de junio de 2014

BUENOS PALADARES

CRÓNICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA    

MUJER
PILAR HURTADO
(JUNIO) AGOSTINA PIZZA (Av. Las Condes 6734.  Teléfono delivery: 2793 9303): “Para el cumpleaños de mi sobrino, justo después del feriado del 21 de mayo, nadie quería cocinar. Recordé estas pizzas que hace un tiempo quería probar y propuse que las pidiéramos a casa de mi hermana, idea que fue muy bien recibida. Por lo tanto, esta crónica tiene un coro de opiniones de amantes de las pizzas. Las pedimos para las 8.30 p.m. y a esa hora exacta sonó el timbre. De inmediato nos sentamos para explorar el contenido de las seis cajas tamaño familiar (éramos ocho adultos y cuatro niños). Lo primero que mi hermana notó es que ninguna pizza venía cortada ni con líneas de corte marcadas. La masa de Agostina es delgadísima, nos recordó al nan, el pan indio. Partimos primero la Jacinta, de salsa de tomate, mozzarella (todas tienen estos dos ingredientes), salame, pimentón y champiñón, junto con la Alessia, con jamón pierna, aceitunas y tomate. Ambas volaron gracias a los más chicos. Luego fue el turno de nuestra favorita, Julieta, la que ganó más votos: pimientos asados, zapallitos italianos en minibastones, berenjenas y trocitos de queso Roquefort, superentretenida y equilibrada, una excelente vegetariana. Rossa es una pizza con crema, fondos de alcachofa, palmitos y pesto de albahaca que también gustó mucho a los adultos. La Fabiola, con palmitos, choclo y aceitunas, ni la vi, desapareció altiro. Constanza también voló rápido, debido a las aceitunas, jamón pierna, champiñones y salame, del cual mis hijos son chacales. Según mi cuñado, las ideas de relleno en esta pizzería son mejores que la masa.

QUÉ PASA
DANIEL GREVE
(JUNIO) COQUINARIA (Isidora Goyenechea 3000/ Alonso de Córdova 2437): “La mezcla es prodigiosa: un generoso trozo de atún encostrado en coco y semillas de sésamo negro, hecho en su punto -apenas sellado, tierno-, sobre un perfecto puré de habas. Dentro del puré y, a modo de sorpresa, cabezas de espárragos salteados al dente. En la corona, para agregar turgencia y jugosidad, frescas ovas de salmón. Y como contrapunto, jugosas murtillas, ligeramente dulces, que revolotean en el borde del plato y se incorporan en cada bocado. Es el más destacado plato de la nueva carta de Coquinaria, que su chef, Pamela Fidalgo, presenta consciente de sus múltiples capas y ángulos, que llegan de manera simultánea.”

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(JUNIO) CHINA VILLAGE (Salvador Izquierdo 1757, La Reina): “Los hados han querido que envejeciéramos en un mundo donde el plato bello a la vista no es siempre comestible, y donde el comestible, suele no ser bello. Si Usía Iltma. quiere evitar ambos inconvenientes, haga como nosotros: vaya al China Village (La Reina), restorán de cocina auténticamente cantonesa de Santiago.” “La suprema belleza, ajena a todo chorreo y goteo de salsas y espolvoreo de semillas y otras cosas, es el "pescado al vapor con hongos" ($8.500): con este discretísimo nombre llega un plato precioso y simplísimo: mero al vapor cortado en forma de rosas de color marfil, puesta cada una sobre un gran hongo marrón, y rodeada de salsa oscura. Creemos que este plato representa la cumbre de la excelencia culinaria: sencillez, perfección en la cocción, armonía de sabores simples, maravillosa presentación, ajena a toda afectación. Una obra de arte.” “Por cierto, el pato laqueado ($11.900 por medio pato, el plato más caro de la carta) fue perfecto también, con sus panquequitos de harina de arroz y demás aditamentos. Y sin reproche ni pérdida el sabroso "filete con salsa de ostras Hauyou" ($8.500), y los fideos "chau min" ($4.500) que pedimos para acompañarlo y ayudar a "asentar el estómago", como es la costumbre china: allá las pastas se comen hacia el final de la comida para producir este benéfico efecto.”

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(JUNIO) 100 MONTADITOS (Patio Bellavista 051. Local 88): “Los montaditos con pequeños sánguches hispanos en los que, en el caso de este local, son fuertes en pan (muy fresco) y no tan débiles en contenido. Por lo mismo, son estupendos acompañantes para una abundante sesión de cervezas y/o sangrías, lo que más se bebe en esta cadena española que ya aterrizó en Chile. Aparte de un local en La Florida, ya están disponibles en el Patio Bellavista y se augura otra apertura en la comuna de Ñuñoa. ¿Es una invasión como para alegrarse? Para los amigos del juntarse, por supuesto que sí.” “La extensa carta ofrece un centenar de opciones (obvio), entre las que hay unas pocas dulces (con panes al chocolate). Y esto va desde alternativas más toscas, como tortilla de patatas, hasta quesos de calidad, camarones y otras delicadezas. Los precios por unidad fluctúan entre los $600 y los $1.200. Y, a la luz de lo probado, se puede partir con un par, antes de rematar con el trío si queda algún huequito en el estómago.” “Pero no todo es pan: también tienen ensaladas y algunas tablas, pero la recomendación es partir con sus sanguchitos de menos a más. Guardando siempre, eso sí, algunos billetes para el taxi de vuelta.”

EL SÁBADO
BEGOÑA URANGA
(JUNIO) LE FLAUBERT (Orrego Luco 125, Providencia, fono 2231 9424): “Le Flaubert, ese rincón francés de Providencia, en calle Orrego Luco, dio inicio a su esperada temporada de sopas. Este año, ¿será el influjo del nacionalismo futbolero?, la muestra se inclina por lo chileno. Como por ejemplo, la Gratiné de Cochayuyo, versión nacional de la sopa de cebolla, con el alga que se diluye en caldo de pescado, cebolla, un poco de crema y un orondo ostión. También pinta para pasar el invierno la sopa de mote y verduritas con su pesto de perejil, acompañado de ají.” “No faltan el caldillo de congrio, un emblema de la cocina chilena, y la de queso cheddar y cerveza Lager. Finalmente, la de crema de nuez y bacon, sabrosa, acompañada de tostaditas de queso roquefort, uvas frescas y trozos de pera. ¡Así no hay frío que valga!”

EL MOSTRADOR
CARLOS REYES
(JUNIO) SHOO GUN (Enrique Foster Norte 172, Las Condes, fono 2231 1604): “Es uno de los primeros restaurantes japoneses-japoneses en instalarse en Santiago, con una ambientación de esas que sacan a cualquiera de la lógica urbana -en realidad, en su interior parece Santiago de 1995- que atrae a un público oriental y extranjero en general, que en buena medida avala, en parte, su reputación de comedor lleno de tradición.” “Pero algo hubo esa noche que no cuajó, al menos en lo que concierne a un arroz frío en demasía, figurando dentro de rolls y niguiris, y con una consistencia más pegoteada de lo necesario; con un pescado del día, sí, pero demasiado reposado y en una desprolijidad en los cortes bien lejos del canon japonés, que mira al minimalismo y aspira a la perfección. Quizá sea porque el itamae no era nativo, o sencillamente porque los productos no dieron el ancho. Lo que quedó en el aire, luego de un servicio cálido y sencillo de parte de mujeres uniformadas y discretas, pero sin demasiada información respecto de qué se trata cada plato, o selección de platos, es la sensación de que Shoo Gun es un sitio que necesita un nuevo aire, más vital al menos desde su cocina, que le sirva para que cambie y todo siga igual en lo que a calidad de su propuesta respecta.”