EL TURISMO Y SU HERMANO CHICO:
LA GASTRONOMÍA
A diferencia de lo que pasa en otros países del mundo, en Chile el turismo y la gastronomía no se llevan bien. Es posible que las autoridades y los gremios tengan razón, pero creemos que el turismo en Chile no sólo debe ser paisaje y buenas camas. En tiempos en que el gobierno pretende crear la imagen de un país como potencia alimentaria, aun estamos lejos de ofrecer a los turistas una buena imagen gastronómica.
Definitivamente hay una falta de calidad. Una causa limeña se puede probar en todo el Perú y su calidad no varía. Ni hablar de su sour ni de sus pulpos ni de los tiraditos. Acá la cosa es más desordenada, más al lote. Estuvimos tan lejos del mercado turístico mundial durante tantos años que nos dio lo mismo cocinar bien o mal para los extranjeros. Total nunca volverán, se pensaba.
Pero hoy estamos insertos en otra realidad. Dos millones de turistas al año no es poca cosa para nuestras expectativas. Si queremos ser gastronómicamente reconocidos en el mundo tenemos que trabajar. Asumir que no somos ni estamos en el circuito turístico gastronómico mundial.
Los argentinos a punta de bifes se hicieron conocidos. Los peruanos con sus causas y mariscos están revolucionando al mundo. Los mexicanos y sus tamales coloridos y suma y sigue. ¿Nosotros? Una cocina con poca identidad que a veces desespera. Una cocina que generalmente seguimos tapando con salsas para no saber qué se come.
Tratemos de buscarle personalidad a la comida en Chile. Solo así podríamos tener algún día el orgullo de que nuestras visitas extranjeras lleguen al país a satisfacer sus necesidades gastronómicas. (Foto: tourmaps)