PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(7 noviembre) LA CEVICHERÍA (Pedro de Valdivia Norte 065, Providencia, fono 231 4677): “Pedimos un pulpo al chimichurri que estaba mundial, exquisito, aunque lo encontramos un tanto aceitoso. También un tiradito nikkei de atún con una salsa que me pareció muy cargada al glutamato (a pesar de que lo amo); el atún fresquísimo y carnoso, la salsa mejorable. El tercer plato fue un ceviche mixto que en términos de frescura estaba perfecto y de técnica peruvian style, también: bien cortado el pescado, la cebolla y también el tiempo en que se sometió al jugo de limón. Levemente picante y más picante hacia el final. Pero le faltaba ese no sé qué que vuelve enviciantes a los ceviches peruanos, tanto que uno no puede parar hasta terminarlos.”
PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(14 noviembre) JUAN Y MEDIO (Huérfanos 2076, Santiago, frente a Plaza Brasil, fono 696 6337): “…de la extensa carta y sus enormes platos, pedimos una cazuela de vacuno que estaba sabrosísima pero un pelín salada. También unas empanadas gigantes bastante buenas, que partimos en trozos y compartimos. Yo ataqué un plato de lengua, que me pareció ¡casi una lengua entera en tres pedazos! Tuve que llevarme un doggy bag, por supuesto. La pedí con ensalada chilena, porotos verdes y palta, y ambas cosas estaban bien ricas. Mi amigo pidió lomito de cerdo nogado con papas fritas, que le gustó bastante. A los niños, que picotearon de todo, les pedimos un plato vegetariano para compartir que les juro que era una montaña de verduras, debe haber traído unas 15 aceitunas! No pudimos resistirnos a una caña de borgoña, vino tinto con frutillas, heladito y ad hoc para ese caluroso día. Todo llegó a tiempo a la mesa y la experiencia resultó muy grata”
SOLEDAD MARTÍNEZ (Wikén)
(19 noviembre) KUUKAI (Molina 328, Valparaíso, fono 32 – 221 9000): “Valparaíso no se distingue por poseer muchos restaurantes de estilo oriental, pero éste, situado en pleno centro, frente a la plaza Victoria, se ve muy limpio dentro de su sencillez y es atendido con amabilidad por las dos o tres personas que allí trabajan.” “Sus recetas son todas frías (salvo la sopa miso y el té verde) y como complemento de la carta ofrece un abundante "plato promoción" en que se aprecia, entre otras cosas, un conjunto de sushi y sashimi ($ 4.400). También hay más combinaciones, como la "Geta 2" ($7.200), que pedimos e incluye ocho greenrolls de salmón, palta y arroz con ciboulette; ocho hosomaki chicos "del chef", de cuatro clases diferentes; dos niguiri de salmón y dos de camarones, cada uno con tres de éstos de tamaño regular sobre la correspondiente porción de arroz. Asimismo, en la lista de los niguiri encontré lo que me pareció mejor del Kuukai: unos que ese día traían pejerrey a la vinagreta, porque el pescado va variando según el mercado ($ 1.800), y otros con anguila de río y la típica y agradable salsa de sabor dulzón que suele acompañarla ($2.400).”
ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(19 noviembre) BOULEVARD CHILENAZO (Libertad 37, Santiago) “… desde el comienzo hasta el café, atención increíblemente atenta, rápida y bien dispuesta. El local no estaba lleno, eso sí, y es aaaaamplio. Con la panerita llegaron unas machas a la parmesana con una lengüitas de infanticidio, pero ricas igual. Y unas gloriosas mollejas full ajo, crocantes e inolvidables.” “De fondos, demasiado rápido, llegaron un asado de tira jugoso ($5.499) y unas costillas al palo ligeramente ahumadas ($6.399), acompañadas de dos cínicas (por uno) ensaladas de palta y de berros.” “ De postre, un pedazo de torta, dos cafés, una cuenta que se sentía justa y la convicción de encontrar un nuevo sitio para una junta más masiva.”
RODOLFO GAMBETTI (Las Últimas Noticias)
(19 noviembre) SANTO REMEDIO (Román Díaz 152, Providencia, fono 235 0984) “…desde hace poco, para salvar su alma, el local decidió abrirse de lunes a viernes a comida sana y a buen precio. Su almuerzo es un menú con tazón de sopa a elegir, plato de fondo con ensalada verde y postre, más té frío, por $5.990; sin ensalada, y con sopa o postre, $4.990. El fondo y el té frío, $3.990. Y la pura sopa, el bowl grande, $1.800. Para el que ande un poco corto de fondos, un santo remedio.” “Un poco de acá, algo de allá, con gracia. Detallitos árabes o tanos, tailandeses o vegetarianos. Las sopas son, por ejemplo, crema de zapallo y zanahoria, con las especias del garam masala y untuosa leche de coco. Como fondos, calzone, esa masa que envuelve verduras salteadas y queso mozzarella; tarta de alcachofas o una lasagna de capas de berenjenas, zapallitos italianos y tomates; pescado del día a la plancha con puré de garbanzos y pesto. O curry rojo, thai, de camarones. Postres: flan, brownie con helado de vainilla o crema de maracuyá. Con jugos naturales, infusión de té, hierbas y café expresso. Y, naturalmente, todos los tragos que imagine.”
BEGOÑA URANGA (El Sábado)
(20 noviembre) MARACUYÁ (Avenida Comandante San Martín 032, Arica, fono 58 -227 600): “No se encontró la reserva que se había hecho, pero aún quedaban mesas en la terraza. Para comenzar, una ensalada de quínoa con verduritas picadas, arverjitas frescas, aceite de oliva y jugo de limón. Muy rica. Luego, unas alcachofas rellenas de camarones y carne de jaiba, con champiñones al jerez y gratinado al horno. Delicioso. Quizás lo mejor resultó el tiradito de pulpo y palta, sobre mayonesa al ajo y jugo de limón. El pulpo sencillamente espectacular, aunque le faltó presentación al plato. Muchos pescados en preparaciones medio recargadas, pastas y carne muy elaboradas. Los postres, más o menos. Pero hay que destacar el bavarois de maracuyá, como homenaje a la casa.” “¡Arica se merece una mejor oferta gastronómica! Sin duda.”
CÉSAR FREDES (La Nación Domingo)
(21 noviembre) LOS CHINOS RICOS (Avenida Brasil 373, frente a la Plaza, fono 696 3778): “un lugar amplio y bien montado sobre la acera oriente de la Plaza Brasil y la cocina es digna, los platos muy abundantes y los precios sensatos. El servicio, ejecutado por garzones veteranos, es eficiente y amable sin refinamientos.” “Teníamos en mente desde un par de días antes un plato ambiguo que es, desde siempre, uno de nuestros dos favoritos de la cocina china: el arrollado de mariscos, que dicho sea de paso no tiene pizca de mariscos, sino un relleno de pasta de pescado. Fueron dos gigantescas crépes con abundante relleno y magnífico y típico sabor, terminadas al vapor, con salsa de soya y fina lluvia de cebollinos.” “El otro plato debía ser un pato y de nuevo, como desde hace más de cuarenta años, el llamado Pekín, que es con soya y nada de agridulce, que es la versión Shanghái, con piña. Y queda demostrado aquí que no hay que confundir la cantidad con la calidad. El plato era muy generoso, con mucha carne oscura de la pechuga del pato, sin piel por ningún lado. Pero era un pato soso y hasta algo firme, con aquella falta de gracia que tienen las carnes hervidas y no asadas. Una de las mayores gracias del pato Pekín es su piel doradita, delgada y crujiente, con la que incluso se rellenan algunas crépes en restaurantes más sofisticados.” “…el promedio no pasa de $6.000 por persona y es barato.”