¿Sushi en una carta china?
Si hay una cocina que esté enquistada en el
ADN de los chilenos, es la china. No existe ciudad, pueblo o barrio que no
tenga uno o más exponentes de esta popular gastronomía que se ha adaptado al
gusto chileno desde hace ya al menos cuarenta años. No recuerdo cual fue el
primero que visite. Pudo quizá ser el Linfa, allá en Apoquindo en las cercanías
del cine Las Condes. Recuerdo sus rojos y dorados de su decoración y sus
infaltables wantanes, chapsuis, filete mongoliano y el pollo chitén. Luego
vinieron otros chinos, desde los más exclusivos hasta los Chinos Pobres, donde
Jenaro Yau, el concesionario, cocinaba al tiempo que entregaba los vueltos que
pagaban los clientes. De todo y para todos, pareciera ser en esos años la
comida china, que en general era una adaptación de la comida cantonesa, algo
que no ha variado con los años.
En las Condes y en las cercanías del Mall Alto
Las Condes, se encuentra uno de los mejores ejemplos del gran desarrollo de la
cocina china en Santiago. Se trata del Nueva China, un inmenso local con
capacidad de 360 comensales y que los fines de semana triplican la cantidad de
sus mesas. Sam es su dueño. Hijo de chinos, buen comerciante y negociador, ha
elevado el nivel de este restaurante a categoría gourmet, e incluso se ha
atrevido a incorporar el sushi y otros de la cocina japonesa a la carta de su
local.
Carta que conocí hace unos días y que me
permitió rememorar platos que antaño me eran familiares. Ricos wantanes (acá
con relleno $ 2.950), y el clásico Filete mongoliano, que con un valor de $
5.750, más un bowl de arroz Chaufán ($1.450), permite alimentar sin problemas a
dos personas. Pero había más y como banquete chino, decidí seguir conociendo
parte de sus especialidades.
Como el cebiche peruano ha traspasado tantas
fronteras como la cocina china, acá tienen un Cebiche de la Casa, incluido
dentro de la carta japonesa y de buen sabor y picor. Luego nos presentan la
novedad del local, sus sushis y rolls -entre otras delicias japonesas-, que
integran la carta de este local. ¿Un mix peligroso?
Acá se me presenta una duda: la comida china
es un clásico que disfrutan casi todos los chilenos. La cocina japonesa es
exclusiva para un target muy especial de la población. ¿Por qué Sam quiere
integrar esas dos cocinas, teniendo suficiente espacio para hacer dos
restaurantes diferentes uno al lado del otro, sin que siquiera se molesten?
Lo chino y lo japo no calza en ninguna parte.
Se ve y se siente raro, como un agregado innecesario. Es como pedir un lomo a
lo pobre en El Huerto. ¡No calza, pollo!
Es tiempo aun de corregir los errores y
separar los ambientes. Así lo chino seguirá siendo chino y continuará llenando
mesas y lo japo estará en su lugar, donde llega un público diferente y que no
es transversal como la cocina china. Es, en definitiva, cosa de sumar dos más
dos. (Juantonio Eymin)
Nueva China: Avenida Las Condes 8956, Las Condes, fono 2229
6311