TOMÁS OLIVERA
Tomás, moreno, sonriente y muy criollo, es de alguna manera un cocinero natural y autodidacta, aunque con una poderosa tendencia familiar vinculada a Valparaíso. Atento y discreto, ningún desafío le queda grande. Hace un par de años heredó el cargo de chef del restaurante Adra del hotel Ritz Carlton y ha instalado allí una cocina de alta calidad y refinamiento donde no faltan sus creaciones donde recrea la cocina chilena con platos de alto nivel gastronómico. Un exitazo.