miércoles, 2 de septiembre de 2009

LOS APUNTES GASTRONÓMICOS DE LOBBY


HOLA!
Todo el año las 24 horas del día

Bueno, eso es un decir pero la idea es que cuando funciona el Gran Casino Monticello ubicado en las cercanías de San Francisco de Mostazal y a sólo 50 minutos de Santiago, las cocinas de este restaurante están abiertas y se puede beber y comer sea la hora que sea. En invierno cierran a algunas horas, pero desde hace unos días, es como una farmacia de turno: abierto las 24 horas del día.

Interesante ya que los jugadores, que ya son bastantes y que los fines de semana repletan el gran domo que acoge este casino de juegos, deben descansar y reponer energías. Para ello, y a un costado de los cientos de máquinas tragamonedas y mesas de juego se planificó este luminoso y colorido restaurante, con una decoración muy ad hoc la que se puede ver en toda la instalación, donde predominan los colores fuertes, extravagantes y modernos. Para algunos, algo kitsch; para otros, el concepto alegre de un casino de juegos, donde todo es ilusión.

Alfredo Mora (ex Lamu Lounge; Zanzibar y Marriott) y con sus inicios en los hoteles Park Plaza y Radisson, es el chef encargado de encantar a los visitantes. La barra, amplia y generosa ofrece una importante cantidad de vinos y alcoholes y cervezas. Hay para elegir y de todo: 14 marcas diferentes de pisco; 16 de ron; 25 de whisky y así sucesivamente. Mesas en un ambiente lounge para beber un trago confortablemente o para degustar una carta novedosa entre picoteos, sándwiches y platos. Empanaditas, tártaros, calamares a la romana y machas gratinadas para los picoteos que acompañan generalmente los aperitivos. En los fondos, cuatro carnes, dos pescados, una pasta y un pollo. ¿Suficiente? Entendemos que sí ya que este comedor es principalmente para los jugadores y ellos no van precisamente al casino a comer. Sin embargo la propuesta entretiene tanto al jugador como al que no le gusta apostar pero que sí le entretiene el ambiente que se forma en un casino de juegos. Postres, cafetería y pastelería complementan la oferta de este nuevo Hola! que completa por el momento la oferta de este casino de capitales sudafricanos.

En terminaciones está el hotel. Este, ubicado en un edificio anexo al domo que alberga el juego, está pensado para recibir jugadores y publico en general. A pesar que Monticello aun no cumple un año en operaciones, el producto que entregan es entretenido y novedoso. Pronto, la familia completa podrá asistir a este complejo que por el momento sólo acepta a mayores de 18, ya que se abrirá un patio de comida con destacados restaurantes de la capital y tendrán entretenciones para “los bajitos”.

Y para estos días primaverales que se avecinan, la terraza del Hola! es de lo más aconsejable. El servicio es atento (hasta con sommelier incluido) y mozas y mozos en un aprendizaje constante. Vale la pena darse una vuelta.

Entretiene. Y esa es la idea (Juantonio Eymin)