miércoles, 24 de noviembre de 2010

REVISTA LOBBY

ESTA SEMANA
AÑO XXII, 25 de noviembre al 1 de diciembre, 2010

LA NOTA DE LA SEMANA: ¡Blackout!
LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR: ¿Y si fuese verdad?
LOS APUNTES GASTRONÓMICOS DE LOBBY: Savinya, el regreso de Gionata
NOVEDADES: Meses de terrazas en Sukalde.
LOS CONDUMIOS DE DON EXE: Mi sobrina Lastenia
CURIOSIDADES: Más mala que comida de astronauta…
TURISMO: Sernatur lanza campaña “Chile es Tuyo”
BUENOS PALADARES: Las críticas gastronómicas de la semana

LA NOTA DE LA SEMANA

¡BLACKOUT!

¡Entraste a las grandes ligas de la Web!, me comentó un amigo cuando supo que Lobby había sido intervenido por un hacker. Una amiga me dio la mala nueva el martes en la mañana. ¿Por qué a Lobby? Es cierto que a veces no somos tan benevolentes en nuestras crónicas, pero la mayoría de las veces somos un medio que aleja un poco de la rutina a nuestros quince mil lectores. ¿Alguna musa despechada de Don Exe? ¿Algún escritor desquiciado que no quiere vernos en la web? ¿Algún cocinero pasado a llevar?

Creemos sinceramente que ninguna de esas es la respuesta correcta. Sólo nos tocó y el único problema a la vista es que nuestros lectores no puedan leer Lobby en el momento adecuado. Sin embargo estamos trabajando para solucionar los problemas que provocaron esta inédita situación y esperamos tener pronto todo bajo control.

Si se ha demorado en entrar a estas paginas, es lisa y llanamente una situación externa que estaba lejos de nuestro proceder. A lo más, nos tomaremos dos paracetamoles y esperaremos que nuestro hosting resuelva los problemas que provocan las fallas de seguridad en sus servidores.

De pronto, y para que no se pierdan las exclusividades, entren a http://www.lobbychile.blogspot.com/. Es lo mismo, pero más largo de tipear.

Gracias por la comprensión.

LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR

¿Y SI FUESE VERDAD?

Durante años hemos sido detractores de la Guía Culinary. Nuestras razones son conocidas por todos y en general van tras la metodología de la encuesta. Nadie, ni siquiera un experto en esto de la gastronomía puede responder un cuestionario de esta naturaleza, a sabiendas de que en nuestro país sus ciudadanos no son, por así decirlo, buenos para recorrer establecimientos. A decir verdad y de lo bastante que sabemos, el grupo objetivo que se encuestó (ABC 1, que salen al menos tres veces al mes a cenar fuera de casa), generalmente repiten sus opciones gastronómicas. A decir verdad, nuestros clientes son estables y no buscan nuevas experiencias, a no ser que el poder de la prensa les diga lo contrario.

Es un tema largo de exponer. Pero hace unos días cenamos con una experta en marketing y le preguntamos sobre la guía -Si la encuesta fuese real, cosa que creo- comentó, quiere decir que la opinión de los expertos está divorciada del gusto o la imagen gastronómica de los clientes.

“Los cronistas se están transformando en seres similares a los críticos de cine”, prosiguió: “buscan detalles que al común de la gente no les interesa y al final ganan las películas hechas para la masa”. “No me extrañaría que algún día los cronistas de la gastronomía y del vino desaparezcan”.

Duras apreciaciones pero viniendo de una experta, es un “uppercut” a nuestros anhelos. La gastronomía, según ella, se basa en imágenes y en emociones. En figuras mediáticas que para bien o mal han entrado en el ideario colectivo de la población. –Pónganse en el caso de Starbucks, nos preguntó. ¿No es eso un producto del marketing?

Nuestra amiga confesó que ella también duda de que todos los entrevistados conozcan todos los restaurantes que escogieron. Es casi imposible, nos dijo. Sin embargo el fenómeno es real. Aspiracional, posiblemente, nos cuenta. “A todos nos pasa, no queremos parecer menos”. “Es posible que Astrid y Gastón sea el mejor restaurante de Chile y méritos tiene de sobra, pero ¿Quién lo puso ahí? ¿La popularidad de Gastón Acurio, la calidad indiscutida del restaurante o fue una respuesta aspiracional?

Definitivamente las encuestas no nos gustan. En Lobby, en sus inicios, las hacíamos. Eso hace más de veinte años. Hoy es distinto. Lo que antes se contaba con los dedos de las manos, hoy la oferta se ha multiplicado por cien. Creemos que la metodología de la encuesta del Culinary no es la mejor, pero también pensamos que los aportes hacia nuestros lectores no están a la altura de las circunstancias. A decir verdad, todos tenemos que mejorar. (Juantonio Eymin)

LOS APUNTES GASTRONÓMICOS DE LOBBY


SAVINYA
El regreso de Gionata

Gionata Nardone
, el chef italiano que inició la era del Savinya, está de regreso. Durante un tiempo asumió la tarea de chef ejecutivo de Enjoy y se traslado a Pucón, desde donde peregrinaba a todos los restaurantes que esta empresa tiene en Chile. Hoy está de regreso en Viña del Mar y fijo en su antiguo puesto. El de chef del principal comedor que tiene Enjoy en Chile.

No está solo. Lo acompaña Carlos Mardones, un joven cocinero de talento que fue reclutado hace unos meses por Enjoy. La nueva propuesta es asertiva. Y la conocí la semana pasada. Nada cambia en el Savinya. El servicio, eficiente y muy gentil; el ambiente, refinado y la puesta en escena, de lujo.

Pero nos interesa la comida y la bebida. Andrew Wallace, gerente de A&B del complejo incita a sus bartenders a crear tragos diferentes que no siempre son equilibrados. Con exóticos nombres desfilan cócteles de diversos orígenes y combinaciones extrañas que son bienvenidos por los que se atreven. Un buen detalle ya que la experimentación de los hombres del bar siempre es necesaria.

Con una copa de espumoso llegamos a la mesa. Una propuesta interesante que parte con unas “tapas” de lujo. Calidad y simpleza que sorprende a todos. Pulpo con alcaparras, orégano, ají de color y papas chips (4.200) contrastan con la sencillez de unos callos al “estilo Savinya” (3.200), suaves, delicados y de gran gusto. Mejores aun, las variedades de champiñones salteados con queso roquefort (6.300) que contrasta con una tremenda versión de una ensalada de mar, con finos mariscos y con un fuerte sabor a ajo. Es posible decir que las tapas eran lo mejor de la cena… pero habría sorpresas.

Buenos vinos pasearon por la mesa. Mal que mal el Savinya es uno de los grandes comedores de Viña del Mar. De entrada, pedí un loco tibio y grillado con una terrina de verduras y un camarón ecuatoriano envuelto en un spaghetti bicolor y crocante (8.500). Increíblemente el loco y el camarón quedaron atrás de una terrina de verduras maravillosa. Definitivamente acá hay oficio. De ese que es tan necesario en la gastronomía actual. De fondo, un risotto al azafrán con salmón ahumado, mariscos y pesto de rúcula (9.500) que pasó a segundo plano ya que mi vecino de mesa había solicitado una paloma asada (9.700) sencillamente notable.

Gran carta, gran servicio y buenos postres. Pareciera, eso si, que los platos salados son el fuerte del Savinya. Gionata se divierte describiendo la carta del Savinya que de repente no se entiende (mero de centolla, olivo de otoño, etc.), pero ya no es tan estrambótica como antaño. Me gustó el Savinya en esta oportunidad y creo que ya están lo suficientemente maduros para ser el referente gastronómico de la ciudad. Definitivamente no es un comedor barato pero vale su precio. Y eso es tremendamente bueno, ya que salvo excepciones, la comida refinada en regiones es un lujo.

Buen regreso de Gionata Nardone y buena incorporación de Carlos Mardones. Gran dúo que poco a poco se afiata para placer de los comensales. A pesar de la invasión de buenos hoteles y restaurantes en la zona, creo que el Savinya tiene un liderazgo difícil de alcanzar. He estado varios días en la Región y este comedor merece sobresalir entre los demás. Es posible que se hayan tomado en serio esto de ser líderes ya que las propuestas de sus iguales no se comparan con otras cocinas de gran nivel. Ojalá, y por el bien de nuestro turismo y gastronomía, podamos tener en Viña y Valparaíso mas ofertas tan consistentes como la del Savinya.

Algún día. (Juantonio Eymin)

Savinya: Hotel del Mar, Av Perú esq. Av. Los Héroes, Viña del Mar, fono 32-250 0800

NOVEDADES


MESES DE TERRAZAS EN SUKALDE

Luego de un inicio de primavera inquieto, con días de sol y otros de lluvia, Esta semana se abren las terrazas del Sukalde. El restaurante de Matías Palomo -ahora en Nueva Costanera- tiene dos grandes terrazas, una interior y otra exterior, donde ofrecerán una oferta distinta a su habitual gastronomía. Platillos y una diversidad de cócteles y vinos para disfrutar la temporada primavera - verano.

Esa es la novedad. Una carta diferente y de temporada. Una oferta donde destacan las ostras con champagne francés pero también hamburguesas, platos fríos y calientes. Aparte, algunas variedades de quesos y algo de comida mexicana, cuna del chef Palomo.

¿Un café con croissants a mediodía?, también. Tanto como la hora del té. La idea es generar un espacio múltiple donde la hora no exista. Jardines que reciben a sus huéspedes con una oferta permanente. Acá no hay horarios para disfrutar el día. Y eso es bueno en un país que está lleno de reglamentos y errores.

¿Desayunar a mediodía con una copa de champagne o de espumoso? ¿Gozar la hora del té con una ceremonia casi mística? ¿Beber una de las 130 etiquetas que mantienen en la cava para conversar de la vida? ¿O conocer algo más de la comida azteca, recién nombrada Patrimonio de a Humanidad?

A partir de esta semana hay dos Sukalde. El tradicional, de esas comidas que invitan a involucrarse con la sorpresa y la admiración, y la de las terrazas, más simple y terrenal.

Ni más ni menos. Las terrazas de Sukalde era una idea largamente esperada por sus creadores. Un nuevo concepto que revolucionará las estructuras de los restaurantes tradicionales. Hay un algo no común en esta nueva propuesta, una mezcla de sensaciones y colores.

Vaya por la nueva oferta. Desde esta semana abierto de lunes a sábado desde mediodía. Atrévase a jugar con los vericuetos de una casona que tiene de todo. ¿Quiere tomarse una copa debajo de un centenario palto que ha sido testigo de la historia de Nueva Costanera? ¿Quiere conversar con parsimonia una botella de vino sin que nada ni nadie altere su panorama?

Sólo atrévase. Hay espacios para todos los gustos y ahora una gastronomía para todas las sensaciones. Las Terrazas de Sukalde deberían ser comentario obligado de todos y ya están abiertas para el disfrute de la comunidad.

Enhorabuena. (JAE)

Sukalde: Nueva Costanera 3451, Vitacura, fono 228 5516

LOS CONDUMIOS DE DON EXE


MI SOBRINA LASTENIA

- ¡Tienes que recibirla!, gritó Mathy. Es parte de TU Familia.

¿Se acuerdan de mi primo Axe, ese que vino un par de días a mi departamento y trastocó mi vida? Bueno. El huaso bruto me anunció que su hija - nieta venía a Santiago por tres días y que como toda buena provinciana, necesitaba apoyo en la capital. Sé que a estas alturas de la vida es poco creíble una historia similar, pero eso de nacer y vivir en Renaico tiene sus ventajas y desventajas.

- No sólo debes recibirla. También la llevarás a mi departamento un día para conocer a esta pobre guachita, fue la decisión final de Mathy.

De lo que sabía, la pobre Lastenia es hija única de una sobrina política de mi primo Axe, que se fue a buena vida junto a su marido en una situación media confusa donde no faltaron las cuchilladas y los balazos. La pobrecita cayó en un hogar de Carabineros hasta que Axe la acogió y adoptó. Se crió con padres postizos y fue creciendo. Sus buenas notas le permitieron entrar a la Universidad de Concepción a estudiar Enfermería… y tras titularse, debió viajar a la capital a un corto seminario de prácticas clínicas.

Axe, mi primo, no se anda con chicas. A sabiendas que ella podría ser un estorbo para mi bolsillo, me mandó un giro de cinco ceros. – Primo, me dijo por teléfono, yo no quiero que mi guachita ande deambulado por ahí. Usté ocupe la platita que le mando pa’ que la invite a comer a alguna parte. Pero me la cuida pu’ iñor ¿ya?

Fui a Pudahuel a buscarla (perdón, a Arturo Merino Benítez, un aeropuerto con más nombre que comodidades). Obvio, ella es de otra generación y toma un avión para los viajes largos. Como no la conocía, hice lo mismo que las decenas de taxistas que reciben vuelos. Un cartelito con su nombre. Ella no es Quintanilla. Es Soto. Así que escribí con letras rojas y grandes “LASTENIA SOTO”. A los pocos minutos alguien se aparece por un costado y me dice ¡Tío Exe…, que rico conocerte!

Ese alguien era una preciosura de lolita. Bajita como toda mujer chilena pero con un poto y unas pechugas hechas en Pomaire. Me abrazó y besó como si yo fuera su prometido. Los taxistas que aun esperaban a sus clientes me decían “éjale macho”. Yo, avergonzado, pesqué su maleta y raudos tomamos un taxi pirata que nos llevaría a Ñuñork.

- ¿Tienes hambre, Lastenia?
- ¡Siii tío!
- ¿Qué tienes ganas de comer?
- Sushi, tío.
- ¿Sushi? ¿Comida de náufragos?
- Si tío. No como carne.
- Eres vegetariana
- Sip tío. Y también quiero conocer El Huerto. Me han contado que es topísimo.

Mathy no lo creería. Primero, que la guachita era un portento de chiquilla y segundo, imaginándose qué podría hacer yo en un restaurante vegetariano. Con maleta y todo le pedimos al taxista que nos dejara en Orrego Luco. Dejamos encargada la maleta en la caja de El Huerto y nos sentamos en uno de los salones interiores ya que la terraza estaba repleta de flacuchas comiendo ensaladas.

Mejoró mi semblante cuando supe que tenían pisco sour. Le ofrecí uno a Lastenia y me dijo que no bebía. ¡Oh Dios!, al parecer serán tres días muy sacrificados.

Jugo de frutillas naturales para ella. Pisco sour (doble) para mi ánimo: ensalada de arroz para ella y cebiche de algas para mí. Otro jugo para ella y una copa de sauvignon blanc para mí. (Eso me gustó de la comida vegetariana, por lo menos no reniega del alcohol.)

La dejé en la Universidad y partí a mi departamento con su maleta. La pasaría a buscar a las siete de la tarde para que la guachita no se perdiera (y para espantar a los moscardones que creo ya estarán revoloteando a su alrededor). Llegando a casa me preparé un sándwich de arrollado bien picante que empujé con una cerveza fría. Lo necesitaba. Llamé a Mathy para contarle las buenas nuevas. Poco le gustó la guachita después que se la describí.

- Es tu culpa, Mathy. Me obligaste a recibirla.
- Ándate con cuidado Exe. Te juro que si le haces algo te dejo orinando sentado.
- Es MI sobrina, Mathy. Me extraña…
- Tú no respetas a nadie, querido Exe. Para ti una buena nalga es más valiosa que un diamante.
- Poco me conoces, querida
- Lo siento, pero no me voy a quedar sentada acá. Nos vemos a las ocho y media en tu departamento. Y colgó.

No soportó que la guachita estuviera en mi departamento. De punta en blanco, depilada y todo, apareció a la hora prevista. Saludó fraternalmente a Lastenia y después de mirarme con cara de odio me besa apasionadamente, como marcando terreno. Me extrañó que llegara con una pequeña maleta con ruedas. ¡Mathy se quedaría en mi casa!

Adiós juventud, divino tesoro, reflexioné.

No se separó en los tres días que estuvo Lastenia en la capital. Comimos sushi, cuscus, quínoa, betarragas y miles de verduritas que no había visto en mi puta vida. Mis fluidos corporales ahora son verdes. Hicieron tan buenas migas (si no puedes, únete al enemigo), que quedaron de salir juntas el último día a un mall para comprarse cosas “de mujeres”.

- Qué encantadora es la tía Mathy.
- No sabes cuanto, respondí.
- ¿Y porqué no viven juntos?
- Mija, ni tanto que queme al santo ni tan poco que no lo alumbre.
- Te entiendo, tío.

El último día salieron juntas. Quedaron de llamarme para cenar ya que al día siguiente Lastenia emprendería su viaje de regreso. Almorcé en Las Lanzas unos riñones al jerez con arroz blanco y una botella de syrah 2008 de Veranda, un vino que está para chuparse los bigotes. Después de tanta ensalada y tofu, mi almuerzo fue una bendición y un renacimiento. Dormía siesta cuando el parcito de chicas me llama para juntarnos nuevamente en El Huerto a las 9 de la noche. Ya habían hecho la reserva y esta vez sería en la terraza. Yo feliz habría ido al Ox o al Tierra Noble a comerme un buen lomo a la parrilla…, pero era su último día. Y ella quería una despedida vegana.

Parecían madre e hija cuando las divisé. Ambas bebían jugos naturales, cosa que me impactó un poco ya que Mathy es poco proclive a beber algo sin alcohol. A ver mi cara comentó que el jugo de ella estaba con Absolut… ahí me volvió el alma al cuerpo.
Me impresionó lo que pidió Lastenia, mi karma vegetariano. Un menú vegano que les transcribo a continuación: un tazón de sopa de apio con humus y sésamo tostado. Después, quínoa verde, ragú de hongos salteados al vino tinto y puré de espinacas y acelgas con tomillo fresco, acompañado de una ensalada de espárragos grillados, alcachofas y habas con mayonesa de tofu y almendras tostadas. De postre, queque de miel con salsa de yogurt y frutillas frescas. ¿Qué tal?
Mathy, algo perdida en esto de la comida vegetariana, pidió unos Manicotti al horno de hongos portobello, rúcula, espinacas y ricota de tofu, todo ello cubierto con una salsa de tomates secos con orégano y albahaca.

Yo, más perdido, aunque aun satisfecho por mis riñones al jerez del almuerzo, pedí (para picotear, dije) un antipasto de espárragos, alcachofas, habas, berenjenas, zucchinis, aceitunas, garbanzos y pimientos asados con una vinagreta de hierbas frescas.

Mientras Lastenia comía con la voracidad de su juventud, Mathy picoteaba su plato y robaba las habas del mío (que estaban espectaculares). Nuestras miradas iban y venían. Juro haber visto en uno de sus ojitos una hamburguesa de Mr. Jack… y en el otro unas papas fritas del mismo origen.

….

Me sacaron de la cama a las 6 de la mañana del día siguiente. Había que estar en el aeropuerto antes de las ocho para que nuestra Lastenia tomara su avión de regreso. Me tomé un café a la vena mientras nuestro taxi, contratado con el alto auspicio de mi primo Axe, ya esperaba por nosotros. Nos despedimos cariñosamente en el aeropuerto. Lastenia botaba una que otra lágrima. “Lo espero en Renaico, tío”, y al abrazarme me susurra: “¡Pero solo eh!”

En el taxi de regreso a casa, pocas palabras
- ¿Vamos a desayunar al Huerto?, le pregunté a una Mathy más callada que nunca.
- ¡No quiero saber en años de tu linda familia!, sentenció.

El chofer del taxi me miró a través del espejo retrovisor y dio vuelta los ojos. Pasamos a dejar a Mathy a su departamento y luego me trasladó a Ñuñork. Pagué sus honorarios por los tres días que nos anduvo paseando y al despedirse me dice – “No lo envidio, jefe. Muchas mujeres juntas son perjudiciales para la salud.”

Eran las diez de la mañana y ya estaba desocupado. Entré al departamento y me senté en un sillón con una taza de té. Luego, me fui a escribir estas notas al computador que está en el dormitorio donde durmió Lastenia. Entré al pequeño baño y colgado en la challa de la ducha encuentro una pequeña tanga de color rojo furioso. ¿Se le habrá olvidado o la dejó ahí como un mensaje subliminal?

No lo sé, pero desde hoy en adelante formará parte de mis archivos secretos X

Exequiel Quintanilla

El Huerto: Orrego Luco 54, Providencia, fono 231 4443

CURIOSIDADES

MÁS MALA QUE COMIDA DE ASTRONAUTA…

http://www.neoteo.com/

La frase del título podría convertirse en un dicho popular, al menos si las exhaustivas pruebas que ha realizado el crítico gastronómico Bill Daley sobre la comida de los astronautas resultan ser verdaderas. Daley, que trabaja en el Chicago Tribune, probó lo que comen los astronautas. Y no le gustó.

En este último tiempo muchas noticias se refieren a astronautas y, más precisamente, a algunas cuestiones que hasta no hace mucho tiempo eran consideradas como banales. Bill Daley es el crítico gastronómico del prestigioso diario norteamericano "Chicago Tribune", por lo que acostumbra a diferenciar (y criticar) cada uno de los manjares que se ve obligado a degustar como parte de su sacrificado trabajo. Esta vez, en lugar de dirigirse corriendo a probar la cocina de un lujoso restaurante, tuvo que dedicarse a degustar los paquetes de comida deshidratada que le enviaron desde la NASA. Sí, la misma comida que sus astronautas comen, todos los días (y todos los meses), que duran sus misiones.

Por lo general, las personas desconocen por completo la forma en que se preparan las comidas a bordo de un vehículo espacial. Es decir, imaginan cocinas a gas y ollas llenas de agua hirviendo, lo que está completamente descartado. Algunos imaginan tubos similares a los de la pasta dental, llenos de puré o algo así. Sin embargo, la realidad es bastante distinta. La mayoría de los paquetes que recibió Bill están llenos de alimentos disecados que se cocinan mediante una inyección de agua caliente. Ese dato ya nos da una idea de lo sabroso que puede ser algo cocinado de esa manera.

Hill asegura que podría haber comido un par de porciones del "coctel de camarones", una de las comidas favoritas de los astronautas, que se prepara en sólo 10 minutos. Fue de lo mejor que le tocó probar y su sabor no era peor del que tienen los que pueden comprarse en un mercado. La NASA los condimenta con un abundante toque de rábano picante y sal. Para beber, al menos oficialmente, los astronautas disponen de un jugo que en polvo es de color naranja. Su sabor, una mezcla de mango y naranja, le resultó satisfactorio. Por supuesto, luego de tomarlo durante dos meses quizás ya no sea tan encantador.

Luego de una ¿noche? de sueño reparador, en gravedad cero, nada mejor que un reconfortante desayuno. Los científicos de la NASA incluyeron en los paquetes que Daley debía analizar, dos productos destinados a ser consumidos como desayuno. Se trataba de una especie de huevos liofilizados (¿no suena apetitoso?) a la "mexicana" y algo con la apariencia de un chorizo o salchicha. Los huevos, de un brillante color amarillo, se deshicieron en pequeños trozos al manipularlos, como si de una cuajada seca se tratara. En cuanto pudo superar la impresión que causaba su aspecto, Bill comprobó que su sabor era vagamente dulce y que quizás alguna salsa podría haber mejorado en algo su gusto. Sin embargo, nada pudo salvar la salchicha.


Por supuesto, el examen de un experto crítico de alimentos quizás sea bastante más duro que el que podríamos hacer cualquiera de nosotros. Es más, conozco a más de cuatro amigos dispuestos a comer cóctel de camarones con sabor a supermercado y salchichas durante meses con tal de ir al espacio. Sin embargo, el presupuesto de la NASA debería bastar para hacer algo mejor por el estomago de sus astronautas. No pocas rebeliones a bordo de los barcos a vela del pasado comenzaron por culpa de la mala comida.

TURISMO

SERNATUR LANZA CAMPAÑA “CHILE ES TUYO”

Chile es Tuyo”, es el nombre de la nueva campaña liderada por el Servicio Nacional de Turismo, junto a la Asociación Chilena de Empresas de Turismo y LAN, la cual busca incentivar a los chilenos a conocer, recorrer y disfrutar Chile, y de esta manera potenciar los destinos de nuestro país.

La Directora Nacional de Sernatur (S), Jacqueline Plass señaló que “nuestra campaña Chile es Tuyo es una invitación para que los chilenos viajen por el país y prefieran los destinos locales a la hora de planificar las vacaciones o una escapada de fin de semana, por lo que estamos lanzando al mercado una gran variedad de paquetes promocionales para disfrutar este verano y todo el año”.

Plass, agregó que “este concepto de campaña quiere transmitir las experiencias únicas que ofrece Chile en materia geográfica, cultural, gastronómica, de relajo, entre otros, con ofertas y programas para todos los segmentos”.

La campaña cuenta además con el portal web http://www.chileestuyo.cl/ que reúne diferentes opciones de paquetes turísticos que incorporan opciones aéreas, terrestres, y alojamientos en diversos destinos y para todos los bolsillos.

El Vicepresidente de la Asociación Chilena de Empresas de Turismo, Rudi Roth señala que “como ACHET trabajamos en conjunto a los tour operadores de todo el país en la elaboración de una amplia oferta. Se pueden encontrar paquetes desde $103 mil a Coquimbo-La Serena, con alojamiento por 3 días y 2 noches con entrada a los parques nacionales, como también paquetes de productos de lujo a la Patagonia por 6 días y 5 noches, incluyendo el ticket aéreo, alojamiento, entrada a los parques, y excursiones con guías turísticos”.

En tanto, Bruno Ardito, Director de Relaciones Institucionales de LAN, destacó que “para LAN es fundamental apoyar el desarrollo del turismo nacional e incentivar en conjunto con el sector público que más chilenos recorran su país. Esta campaña es un gran paso para el impulso de la industria turística en Chile y nos permitirá ir fortaleciendo nuestra oferta con el fin de consolidar diversos atractivos turísticos, convirtiéndolo en un destino cada vez más recurrente tanto para chilenos como para distintos visitantes del mundo”.

“Chile es Tuyo” se lanza en momentos previos a comenzar el verano, sin embargo, esta campaña tendrá continuidad durante todo el año, buscando quebrar la estacionalidad y motivar a que los chilenos disfruten de la oferta turística nacional.

BUENOS PALADARES

LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

PILAR HURTADO
(Mujer, La Tercera)
(7 noviembre) LA CEVICHERÍA (Pedro de Valdivia Norte 065, Providencia, fono 231 4677): “Pedimos un pulpo al chimichurri que estaba mundial, exquisito, aunque lo encontramos un tanto aceitoso. También un tiradito nikkei de atún con una salsa que me pareció muy cargada al glutamato (a pesar de que lo amo); el atún fresquísimo y carnoso, la salsa mejorable. El tercer plato fue un ceviche mixto que en términos de frescura estaba perfecto y de técnica peruvian style, también: bien cortado el pescado, la cebolla y también el tiempo en que se sometió al jugo de limón. Levemente picante y más picante hacia el final. Pero le faltaba ese no sé qué que vuelve enviciantes a los ceviches peruanos, tanto que uno no puede parar hasta terminarlos.”

PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(14 noviembre) JUAN Y MEDIO (Huérfanos 2076, Santiago, frente a Plaza Brasil, fono 696 6337): “…de la extensa carta y sus enormes platos, pedimos una cazuela de vacuno que estaba sabrosísima pero un pelín salada. También unas empanadas gigantes bastante buenas, que partimos en trozos y compartimos. Yo ataqué un plato de lengua, que me pareció ¡casi una lengua entera en tres pedazos! Tuve que llevarme un doggy bag, por supuesto. La pedí con ensalada chilena, porotos verdes y palta, y ambas cosas estaban bien ricas. Mi amigo pidió lomito de cerdo nogado con papas fritas, que le gustó bastante. A los niños, que picotearon de todo, les pedimos un plato vegetariano para compartir que les juro que era una montaña de verduras, debe haber traído unas 15 aceitunas! No pudimos resistirnos a una caña de borgoña, vino tinto con frutillas, heladito y ad hoc para ese caluroso día. Todo llegó a tiempo a la mesa y la experiencia resultó muy grata”

SOLEDAD MARTÍNEZ (Wikén)
(19 noviembre) KUUKAI (Molina 328, Valparaíso, fono 32 – 221 9000): “Valparaíso no se distingue por poseer muchos restaurantes de estilo oriental, pero éste, situado en pleno centro, frente a la plaza Victoria, se ve muy limpio dentro de su sencillez y es atendido con amabilidad por las dos o tres personas que allí trabajan.” “Sus recetas son todas frías (salvo la sopa miso y el té verde) y como complemento de la carta ofrece un abundante "plato promoción" en que se aprecia, entre otras cosas, un conjunto de sushi y sashimi ($ 4.400). También hay más combinaciones, como la "Geta 2" ($7.200), que pedimos e incluye ocho greenrolls de salmón, palta y arroz con ciboulette; ocho hosomaki chicos "del chef", de cuatro clases diferentes; dos niguiri de salmón y dos de camarones, cada uno con tres de éstos de tamaño regular sobre la correspondiente porción de arroz. Asimismo, en la lista de los niguiri encontré lo que me pareció mejor del Kuukai: unos que ese día traían pejerrey a la vinagreta, porque el pescado va variando según el mercado ($ 1.800), y otros con anguila de río y la típica y agradable salsa de sabor dulzón que suele acompañarla ($2.400).”

ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(19 noviembre) BOULEVARD CHILENAZO (Libertad 37, Santiago) “… desde el comienzo hasta el café, atención increíblemente atenta, rápida y bien dispuesta. El local no estaba lleno, eso sí, y es aaaaamplio. Con la panerita llegaron unas machas a la parmesana con una lengüitas de infanticidio, pero ricas igual. Y unas gloriosas mollejas full ajo, crocantes e inolvidables.” “De fondos, demasiado rápido, llegaron un asado de tira jugoso ($5.499) y unas costillas al palo ligeramente ahumadas ($6.399), acompañadas de dos cínicas (por uno) ensaladas de palta y de berros.” “ De postre, un pedazo de torta, dos cafés, una cuenta que se sentía justa y la convicción de encontrar un nuevo sitio para una junta más masiva.”

RODOLFO GAMBETTI (Las Últimas Noticias)
(19 noviembre) SANTO REMEDIO (Román Díaz 152, Providencia, fono 235 0984) “…desde hace poco, para salvar su alma, el local decidió abrirse de lunes a viernes a comida sana y a buen precio. Su almuerzo es un menú con tazón de sopa a elegir, plato de fondo con ensalada verde y postre, más té frío, por $5.990; sin ensalada, y con sopa o postre, $4.990. El fondo y el té frío, $3.990. Y la pura sopa, el bowl grande, $1.800. Para el que ande un poco corto de fondos, un santo remedio.” “Un poco de acá, algo de allá, con gracia. Detallitos árabes o tanos, tailandeses o vegetarianos. Las sopas son, por ejemplo, crema de zapallo y zanahoria, con las especias del garam masala y untuosa leche de coco. Como fondos, calzone, esa masa que envuelve verduras salteadas y queso mozzarella; tarta de alcachofas o una lasagna de capas de berenjenas, zapallitos italianos y tomates; pescado del día a la plancha con puré de garbanzos y pesto. O curry rojo, thai, de camarones. Postres: flan, brownie con helado de vainilla o crema de maracuyá. Con jugos naturales, infusión de té, hierbas y café expresso. Y, naturalmente, todos los tragos que imagine.”

BEGOÑA URANGA (El Sábado)
(20 noviembre) MARACUYÁ (Avenida Comandante San Martín 032, Arica, fono 58 -227 600): “No se encontró la reserva que se había hecho, pero aún quedaban mesas en la terraza. Para comenzar, una ensalada de quínoa con verduritas picadas, arverjitas frescas, aceite de oliva y jugo de limón. Muy rica. Luego, unas alcachofas rellenas de camarones y carne de jaiba, con champiñones al jerez y gratinado al horno. Delicioso. Quizás lo mejor resultó el tiradito de pulpo y palta, sobre mayonesa al ajo y jugo de limón. El pulpo sencillamente espectacular, aunque le faltó presentación al plato. Muchos pescados en preparaciones medio recargadas, pastas y carne muy elaboradas. Los postres, más o menos. Pero hay que destacar el bavarois de maracuyá, como homenaje a la casa.” “¡Arica se merece una mejor oferta gastronómica! Sin duda.”

CÉSAR FREDES (La Nación Domingo)
(21 noviembre) LOS CHINOS RICOS (Avenida Brasil 373, frente a la Plaza, fono 696 3778): “un lugar amplio y bien montado sobre la acera oriente de la Plaza Brasil y la cocina es digna, los platos muy abundantes y los precios sensatos. El servicio, ejecutado por garzones veteranos, es eficiente y amable sin refinamientos.” “Teníamos en mente desde un par de días antes un plato ambiguo que es, desde siempre, uno de nuestros dos favoritos de la cocina china: el arrollado de mariscos, que dicho sea de paso no tiene pizca de mariscos, sino un relleno de pasta de pescado. Fueron dos gigantescas crépes con abundante relleno y magnífico y típico sabor, terminadas al vapor, con salsa de soya y fina lluvia de cebollinos.” “El otro plato debía ser un pato y de nuevo, como desde hace más de cuarenta años, el llamado Pekín, que es con soya y nada de agridulce, que es la versión Shanghái, con piña. Y queda demostrado aquí que no hay que confundir la cantidad con la calidad. El plato era muy generoso, con mucha carne oscura de la pechuga del pato, sin piel por ningún lado. Pero era un pato soso y hasta algo firme, con aquella falta de gracia que tienen las carnes hervidas y no asadas. Una de las mayores gracias del pato Pekín es su piel doradita, delgada y crujiente, con la que incluso se rellenan algunas crépes en restaurantes más sofisticados.” “…el promedio no pasa de $6.000 por persona y es barato.”