miércoles, 3 de agosto de 2011

REVISTA LOBBY

ESTA SEMANA
AÑO XXIII, 4 al 10 de agosto, 2011

LA NOTA DE LA SEMANA: Estamos de Chancho Muerto en Talca
LOBBY PLUS: Las novedades de la semana
LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR: Achiga cumple… ¿y el resto?
MIS APUNTES GASTRONÓMICOS: María del Mar
LOS CONDUMIOS DE DON EXE: Cita a ciegas
DE BEBISTRAJOS Y REFACCIONES: Un pulmay en el Aquarium
ESPECIAS: Olivo de Plata Las Doscientas
BUENOS PALADARES: Las críticas gastronómicas de la semana

LA NOTA DE LA SEMANA



ESTAMOS DE CHANCHO MUERTO EN TALCA

Este fin de semana, en la Plaza de Armas de Talca, se realizará la tercera versión de esta fiesta gastronómica que evoca uno de los ritos más tradicionales del campo, que es la matanza del cerdo, rito familiar y social que convoca a su alrededor para la elaboración de subproductos que alimentan durante el invierno a la gente del campo.

Este evento anual es organizado por la Ilustre Municipalidad de Talca, la Agrupación Chef del Maule y Campo Noble. Más de 80 expositores, entre charcuteros y artesanos, se darán cita en la fiesta costumbrista de invierno más importante de la zona centro de Chile. En el escenario se presentarán destacadas bandas y cantantes nacionales como:
Daniel Muñoz y 3x7 Veintiuna, Los Vásquez, El Clavel, Hechizo, La agrupación de Folclor del Maule y Los Viking 5.

Detrás de estas fiestas costumbristas (a la que se agrega la de los caldillos de Curicó) está la gran figura del chef Rubén Tapia Ramírez, quien no descansa para involucrar a todo el mundo en esto de la cocina chilena.

Si se anima, visite la Plaza de Armas de Talca este fin de semana, le aseguramos una fiesta costumbrista de primer nivel.

LOBBY PLUS

LAS NOVEDADES DE LA SEMANA

- Entre el 9 y 11 de diciembre se realizará en la Estación Mapocho de Santiago el encuentro “Chile a la Mesa, al rescate de lo nuestro”, una feria gastronómica de carácter nacional, enfocada en la promoción y difusión de la cultura gastronómica chilena a través de sus productos, alimentos y servicios. La idea de sus creadores es rescatar y revalorar la tradición y cultura de la gastronomía chilena a través de degustaciones de platos representativos de cada zona del país y crear un espacio de difusión de nuestra cocina tradicional.

- elBulli cerró el sábado pasado sus puertas. ¿Cómo se despiden 27 años de trabajo? "Con una fiesta" es la respuesta. Y al tratarse de un restaurante no podía faltar una buena cena. En los fogones, para el último servicio, estuvo un quinteto selecto: René Redzepi (número uno del mundo según la revista Restaurant), Joan Roca (número dos), Andoni Luis Aduriz (número tres), Massimo Bottura (número cuatro), José Andrés (recientemente reconocido como el chef más sobresaliente de EEUU) y Grant Achatz (sexto del mundo). Todos ellos también disfrutaron de la comida junto a la plantilla fija del restaurante: los jefes de cocina Oriol Castro, Eduard Xatruch y Mateu Casañas, los jefes de partida y los más de cuarenta 'stagiaires' que con su esfuerzo fueron parte fundamental del éxito de un negocio.

- Más de 40 empresas, del más alto nivel internacional, se reunirán en una importante rueda de negocios para conocer la más atractiva oferta turística nacional. El encuentro se realizará gracias al acuerdo suscrito entre VYVA, LAN Chile y Turismo Chile para potenciar los atractivos nacionales a nivel mundial. Esta importante cita, que reunirá a empresarios locales con compradores interesados en la oferta turística de Chile, se enmarca en la Feria ¡VYVA! 2011, que se realizará entre el 4 y 6 de noviembre próximo en Espacio Riesco.

- La variada cultura y gastronomía latinoamericana contará desde octubre próximo con una nueva revista editada en Nueva York y que llegará al público de forma digital con información sobre sus países de procedencia y los establecimientos en donde se pueden encontrar algunos productos en la Gran Manzana. "Latin Lover", que contará con dos ediciones en inglés y español, es una iniciativa del diseñador gráfico peruano Chris Yong-García, que se describe como un fanático "de la variada y sofisticada comida latinoamericana. Yong realizará una nueva edición digital cada tres meses y en ella aparecerán diversas historias en torno a la gastronomía y destinos turísticos de Latinoamérica y Caribe conocidos por su excelente comida.

- Como para tener en cuenta: El 96% de los peruanos se siente orgulloso de su peruanidad y menciona como principales razones de ese sentimiento la existencia de la ciudadela de Machu Picchu, los recursos naturales y la gastronomía, según una encuesta difundida por Ipsos Apoyo. Para el 56% de los entrevistados, la ciudadela de Machu Picchu -reliquia arqueológica admirada por el mundo y una de las siete nuevas maravillas- es su principal motivo de orgullo, mientras que el 45% sostiene que los recursos naturales que el país posee generan ese sentimiento. Asimismo, el boom gastronómico que vive el Perú y el reconocimiento de nuestra culinaria como una de las mejores del mundo, hace que el 41% sienta orgullo nacional, mientras que el 38% confiesa que está orgulloso de la cultura y el arte; el 37% menciona la historia como motivo de ese sentimiento y el 33% considera que su razón son los paisajes naturales.

- Más de doscientos estudiantes de América Latina y Estados Unidos reciben clases de alta cocina internacional de renombrados chefs españoles mediante una plataforma online diseñada por el Instituto Gastronómico Español (IGE). A través de esta nueva plataforma del IGE, con sede en Miami, se imparten clases tanto a profesionales del sector como a los amantes de la cocina a través internet, una metodología en su opinión "innovadora y exclusiva, dado que, por primera vez en el mercado, toda la formación se realiza vía internet". La oferta educativa varía desde cursos cortos, como la cata de vinos, de unas 250 horas que se pueden distribuir en hasta cuatro meses, hasta maestrías de un año. Los alumnos obtienen un titulo internacional avalado por la Universidad de San Jorge, en Zaragoza España.

- El estelar actor de Hollywood Robert De Niro estaría por sumarse a la última tendencia en marketing vitivinícola, los vinos con rostros de famosos. La semana pasada se supo que el protagonista de “Taxi Driver” -entre otros clásicos del cine mundial- está más que interesado en adquirir una finca de 40 hectáreas en Vista Flores, Tunuyán, para comenzar a elaborar su propio vino. Trascendió que el proyecto tendría el nombre tentativo de “Rodrigo Mendoza”, el mismo que De Niro usó en su personaje de la película “La Misión” de 1986. Además, la idea del actor sería que los vinos de su nuevo emprendimiento se vendan exclusivamente en su cadena de restaurantes Nobu, que cuenta con locales en Londres, Nueva York, Los Ángeles, Hong Kong y Honolulu, entre otros países.

LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR

ACHIGA CUMPLE… ¿Y EL RESTO?

Me cuesta esto de entender los Concursos Nacionales de Gastronomía que realiza Achiga. Me cuestiono un millón de cosas ya que este evento anual ha estado perdiendo fuerzas año a año. Trato de pensar bien y entender que los chefs de vanguardia no se presentan ya que sería terrible para ellos no ser bien evaluados y por ello el concurso se ha transformado, con el tiempo, el una catapulta para cocineros de empresas y de casinos privados.

Y no crean que no sea crítico del concurso. Años han pasado en que mis columnas van en contra de este concurso ya que poco nos deja. En la actualidad se presentan algunos (muy pocos) establecimientos (llámense hoteles y restaurantes) y la gran afluencia de participantes viene del sector institucional.

¿Es bueno eso?

Depende por donde se le mire. Si lo vemos como un “Concurso Nacional”, los concursantes institucionales (casinos de empresas en su mayoría), no deberían tener cupo ya que la idea del concurso es potenciar establecimientos y sus chefs. Ahora, si lo vemos como una suerte de competencia de competencias, los concursantes luchan por ser mejor remunerados y también convertirse en vitrina de los restaurantes y hoteles.

Atrás quedaron los tiempos en que este concurso era de chefs titulares de establecimientos gastronómicos. Allí y en esos entonces no existía la rivalidad ni la necesidad de sentirse perdedor o ganador. En esos años era un disfrute participar y hoy es algo que todos temen. Por ello vemos en un “Nacional” a chefs de partie, chefs ayudantes o maestros de cocina.

Pero es un deber resaltar a los ganadores. Ellos guardarán su triunfo en lo más profundo de sus corazones y por ello, un salón del hotel Grand Hyatt repleto de invitados aplaudió a los ganadores en las dos competencias paralelas que Achiga convocó este año: Cocina tradicional chilena y Menú completo. (JAE)

LOS GANADORES

COCINA TRADICIONAL CHILENA

Medalla de Oro
Chef: Miguel Ángel Parra; Ayudante: Constanza Acosta
Kuchen Haus (Restaurante- Banquetería y Centro de Eventos)
Entrada: Ceviche de cochayuyo
Principal: Paila marina
Postre: Quínoa con leche y zeste de naranja

Medalla de Plata
Chef: Mariano Rodríguez; Ayudante: Jorge González
Aramark Central de Restaurantes
Entrada: Pebre de huacatay tibio con queso de cabra fundido sobre masa de sango o piri
Principal: Calapurca
Postre: Humita de manjar blanco y chumbeque

Medalla de Bronce
Chef: Juan Llanquihuén; Ayudante: Samuel Conforti
Aramark Central de Restaurantes
Entrada: Ensaladilla de la machi
Principal: Cazuela del lonco con locro
Postre: Compota de membrillo con delicias de frutos del bosque

Mención Honrosa
Chef: Gioconda Carvallo; Ayudante: Pablo Muñoz Santos
Restaurante Osadía

CATEGORIA MENÚ COMPLETO

Medalla de Oro
Chef: Mauricio Núñez; Ayudante: Cristian Urbina
Hotel Radisson Petra
Entrada: Tubo de salmón relleno de palta con muselina de aceite ahumado, gelatina de almejas y espuma ácida de late harvest y limón.
Principal: Pechuga de pollo ahumada envuelta en tocino, croqueta de mollejas y mozzarella y espuma de pollo.

Medalla de Plata
Chef: Miguel Valenzuela; Ayudante: Cristian Ahumada
Aramark Central de Restaurantes
Entrada: Salmón ahumado con lemon grass, ají amarillo y palta / crema fría de almejas “de caleta” / mousse de apio y confit de pera / napoleón de mango, polenta y queso azul / salsa de huacatay y salsa de zapallo camote y jengibre.
Principal: “Arrollado” de pollo y pato con “chicharrón” y castañas / vegetales con glace de miel / raviol de mollejas y zetas perfumadas al “tartufo” / salsa de manzana verde y salsa de pato y chocolate bitter.

Medalla de Bronce
Chef: Cristian Morales; Ayudante: María Isabel Carbone
Hotel InterContinental Santiago
Entrada: Sabores de nuestro mar: Roulade de salmón y mousse de almejas
Fondo: Nombre del Plato Principal: epifanía de texturas

MEJOR PLATO PRINCIPAL Y MENCIÓN HONROSA
Chef: Daniel Cepeda; Ayudante: Gerszon Farnast
Compass Group
Entrada: Tataki de Salmón con láminas de trufa, acompañado sobre una peperonata de pimientos con dressing de trufa y Raviol de caviar de almejas servido sobre un carpaccio de papa bruja y ataditos frescos de espárragos en emulsión de ajo ahumado.
Principal: Finísimo bombón de ave relleno de mousse de wagyu con shitaki envuelto en crepinette en salsa de oporto y murta, servido con medallones de mollejas grille y acompañado de flan de cebolla morada, mini timbal de zucchini y delicado malfatti de rúcula en salsa pomodoro.

MEJOR PLATO DE ENTRADA
Chef: Sebastián Salas; Ayudante: Diego Rojas
Aramark Central Restaurantes
Entrada: Compresión de salmón y anguila acompañado de tártaro de almejas y salmón, palta rellena con quínoa y ensalada de papas y pepino. Salsa oriental de algas y mayonesa especiada.

PREMIO ESPECIAL – MEJOR AYUDANTE
Ayudante: María Isabel Carbone
Hotel InterContinental Santiago

MIS APUNTES GASTRONÓMICOS



MARÍA DEL MAR

El lugar es chiquito. A decir verdad parece enano en comparación con los otros restaurantes del Paseo El Mañío. Pero no sólo se defiende sino que se las empeñan para sacar de su diminuta cocina platos de excelente factura y de real calidad.

El lugar es María del Mar, donde Felipe Durán es socio y chef. En invierno su capacidad se reduce a pocas mesas… pero mesas donde se disfruta una cocina del mar, más algunos platos de tierra, para los exigentes carnívoros.

Impecable pisco sour (a la peruana) para comenzar y para acompañar unos erizos de alta factura y sabor (6.800). Nada que observar. La mesa comienza a llenarse de delicatessen: ostiones gratinados y queso azul (6.500); machas a la parmesana (6.700); canapés de locos (7.100) y camarones envueltos en masa de wantán… todo rico y si bien es cierto es cocina de producto, esta viene aderezada desde la cocina y no necesita arreglo alguno. Bueno, por algo el chef estudió en Culinary e hizo buenas pasantías en Europa y Estados Unidos. Además se nota la preocupación que tiene por la materia prima, donde trata de presentarla lo más sencillamente posible, algo que sólo habíamos visto con Xabier Zabala y su Infante 51.

Amayna pinot noir para los fondos. Solo pescados en la mesa. Merluza, atún, albacora, mero y su “pescado del día” presentados como debe ser, sin parafernalias, ni cremas, ni adobos. El sabor puro del pescado donde es posible degustarlo casi en su estado salvaje y con acompañamientos que no alteran la materia prima. (Platos entre 7.400 y 9.200)

Chico pero lindo lugar. Minimalista con sus mesas y decoración en un albayalde celeste que inspira como si fuese un restaurante ubicado a pasos del mar. En varano crece ya que sacan las mesas a la terraza del Paseo El Mañio, lo que los hace duplicar su tamaño. Hoy, en pleno invierno, para gozar de buenos mariscos y pescados preparados “a la mode del chef

Postres tradicionales. Realmente por ahí no va la mano aunque me contaron que su fondant de chocolate era uno de los mejores de la ciudad. Sin ser experto en repostería, habrá que creerle a quien me pasó el dato.

Larga vida a María del Mar. Ojalá no se engolosinen y traten de crecer ya que el modelo de negocio es de formato pequeño e íntimo. Acá no sobran las sillas y esa es la idea de un buen restaurante. Uno con una carta limitada pero de gran calidad. Una carta sencilla pero elaborada con gusto y pensada en el cliente. Cliente que luego de dos minutos en el lugar, se siente cómplice de una buena aventura gastronómica entre amigos.

El lugar es pequeño, íntimo y muy acogedor. Buena carta de vinos y licores y una gastronomía que se disfruta de punta a cabo. ¿Algo más?

Creo que todo está dicho. (Juantonio Eymin; fotos, http://www.800.cl/)

María del Mar: Paseo El Mañío 1665, Vitacura, fono 717 3876

LOS CONDUMIOS DE DON EXE



CITA A CIEGAS
Y no se rían

Me encerré unos días luego de mi frustrado affaire con Abril, esa peruanita de miedo que conocí en la embajada de su país. Mathy no me contestaba el teléfono y aunque no lo crean, eso me duele. Sinceramente no estaba haciendo nada malo pero a ella no le gustó para nada que un vejete como yo tratara de seducir a una jovencita.

Aun recuerdo sus palabras: “¡Es bonita la guacha esa, pero es mucho para ti!

Decidí hacer un acto de contrición para sopesar mis siguientes pasos. Estoy consciente que cada día que pasa me gustan más las chicas sub-35, pero también sé que Mathy tiene la sartén por el mango y siempre espera, tranquila, que regrese como un perro fiel a su regazo. Por eso cada cierto tiempo me corta los suministros básicos. La hembra Alfa me conoce.

Cuando sonó mi celular, un día al atardecer, discurrí que era ella. ¡GANÉ, MIERDA!, pensé, pero era una llamada equivocada…

- ¿Francisco?- pregunta
- Lo siento, chica –respondí. Si es el mismo Francisco que yo ubico, solo te equivocaste por un número.
- ¿Cierto?
- Tan cierto que estás hablando conmigo y no con Pancho
- ¿Y tú? ¿Quién eres?

Parece que la chica tenía ganas de hablar y le sobraban los minutos del celular. Yo, que no escuchaba voz alguna femenina desde hace días, le seguí el juego.

- Soy Exe.
-¿Exe qué?
- Exe, -le dije-. Ese Exe que tiene casi el mismo teléfono que tu tal Francisco.
- ¡Me da risa todo esto!
- ¿Por?
- Llamé al Pancho ya que me había invitado a cenar, ¡pero hace tres días que no sé nada de él!
- ¡Qué malo es!, - le comenté con el fin de alargar la conversación.
- ¿Dónde vives Exe?
- ¿Aun no sé tu nombre y ya quieres saber donde vivo?
- Perdona Exe. Me llamo Antonia y vivo en Ñuñoa

Como Leonardo Favio respondí
- ¡Huy!!! ¿Ñuñoa?, ¡¡¡yo también!!!
….

A falta de Francisco bueno será Exe, pensé. Hicimos una cita a ciegas en La Destilería, una taberna que está detrás de la plaza Ñuñoa y a dos cuadras de mi departamento. Quedamos de juntarnos a las nueve de la noche y la esperaría en la puerta. Ninguno de los dos sabía con qué se encontraría. Eso es lo emocionante de una cita a ciegas.

Llegó regia y despampanante. Abrigo de gamuza y debajo una minifalda de esas que uno no puede evitar mirarle las piernas. Antonia era linda. Nariz respingada, buenas pechugas y mejor trasero. Al verme me regaló un beso cuneteado que me dejó viendo estrellitas verdes. Entramos a La Destilería y nos encerramos en una mesa chiquita. Ella pidió un Baileys, el cola de mono de los ricos, y yo una cuba libre en Zacapa. Ella hace un mohín y dice:

- Gracias Exe. Por hoy olvidaré a Francisco.

Tomo sus manos, finas y grandes y seguimos conversando. Al segundo Baileys y al segundo ron, se puso más cariñosa y comenzó a tocar uno de mis muslos. ¡Exe!, me dije… ahora si que se alinearon tus planetas. Esta noche será buena y larga.

Le dio hambre. Yo, como un caballero le ofrezco algo para comer. Pidió un sánguche con hartas papas fritas de las cuales yo me hice cargo de algunas. Ella cambió de trago, esta vez un vodka tónica…y ahí comenzó el descalabro.

Osada, pero tímidamente pongo mi mano en su rodilla y un poco más arriba. Ella se deja y me mira a los ojos. ¿Vives solo Exe?

Los vapores del alcohol me tenían algo trastornado, pero razoné que no era conveniente llevarla a mi departamento. Mal que mal Mathy tiene llaves para entrar y no sería agradable otro escándalo a mediados de semana. Inventé un sobrino que estudiaba en la universidad y que vivía conmigo, mientras calculaba cuánto me saldría una aventura en algún hotelucho de la calle Marín o en el Valdivia.

Contemplo su cara y algo me llama la atención. Dulce como se ve, de labios carnosos y apetitosos, descubro en su cuello un gran desarrollo de su nuez de Adán. Y eso es sólo de hombres. Ella se percata de mi desconcierto y pregunta:

- ¿No te importa?
- ¿Qué?, pregunté temblorosamente.
- ¿Que sea una chica con sorpresa?

¡Era un hombre! ¡¡¡Y no se rían!!! Todo me dio vueltas. Pensé en Mathy, que le estaba poniendo los cuernos nada mas ni nada menos que con un travesti; en la cuenta de los Baileys y del lomito; en el beso cuneteado y en mi mano en su muslo; en su perfume caro y en el interés de ella (¿o él?) por seguir una conversación telefónica sin destino.

-No te preocupes Exe, –dijo ya con voz ronca. Puedo hacerte feliz.

Por primera vez en la vida me dio jaqueca. Me dolía la cabeza pero más la conciencia. Exe, el tipo de las mil y una aventuras había caído en desgracia y estaba comenzando a pagar sus culpas. Rápidamente saque la mano de sus piernas, pedí la cuenta y me excuse con Antonia (¿o Antonio?) no sin antes entregarle el número de celular de su amigo que yo tenía. Ella (él), me lo agradeció con un beso en la mejilla.

Como nunca, llegué a ducharme al departamento. El agua fría expía las culpas, dicen. Encendí el celular y tenía cinco llamadas perdidas de Mathy. Definitivamente quedarme encerrado en casa me hizo mal. No me gusta para nada.

Maldición. Las chicas con sorpresa tampoco son de mi agrado. Eso me pasa por lacho.

Exequiel Quintanilla

(La Destilería está detrás de la Municipalidad de Ñuñoa. La podrá descubrir fácilmente ya que un gran neón rojo atraerá su atención aunque no lo quiera)

DE BEBISTRAJOS Y REFACCIONES

UN PULMAY EN EL AQUARIUM



* Karla Berndt

“Cuando un chilote no le acierta al clima que tendrá al día siguiente y teniendo todo listo para iniciar el armado del curanto, el cielo se obscurece y desata cataratas, todo el mundo corre a refugiarse dentro de la casa, transportando el comestible para el hoyo, para prepararlo ahora en olla. La gran cocina a leña, como todas las del sur de Chile, permanece encendida todo el día; ocupa el centro de la habitación grande, donde se realiza la vida familiar alrededor de su calor acogedor: se pone a secar la ropa, se hacen las tareas, se cocina, se come y se dormita. Pues bien, la pieza se ha hecho chica para contener a tantos invitados y deben repartirse por otras dependencias. Se atiza el fuego, se abre el templador y sobre las 5 hornillas destapadas se asienta una olla gigantesca que se tiene de reserva para estas emergencias. En su interior se van depositando por capas todos los alimentos, separados según su origen por hojas de coles y al final se le vacían un par de garrafas de vino blanco. Aparte se cuecen papas y en una paila con aceite se van friendo chapaleles y milcaos, que reemplazan al pan, comiéndolos untados en pebres, mientras hierve el pulmay...”, así relata Roberto Marín Vivado en su libro “Chilenos cocinando a la chilena”.

Después de leer este párrafo, apuesto que le dio apetito. Difícil viajar hasta Chiloé para darse el gusto, pero no imposible hacerlo en la misma capital: el restaurante “Aquarium” del Hotel Kennedy ofrece durante estos meses de invierno y cada día viernes, desde las 19 horas, su “Pulmay Gourmet” ($ 12.500). “Siguiendo la tradición culinaria chilena hemos querido traer a nuestra mesa los sabores característicos de unos de los platos más tradicionales de Chiloé”, explica el chef Roberto Araya.

Acierto total: este frío viernes, en todas las mesas los comensales, chilenos y extranjeros, se dedican con euforia a disfrutar de los mariscos, trozos de ave, carne y embutidos, chapaleles, milcaos y papas, sopeando el contundente caldo del cual se sirve como adicional una taza al lado de la gran fuente de greda. Éste, estoy convencida, previene resfríos y está capaz hasta revivir muertos…

Aquarium
Hotel Kennedy
Av. Presidente Kennedy 4570, Vitacura, Santiago
Teléfono: 290 8100

*Karla Berndt es cronista gastronómica e integrante del Círculo de Cronistas Gastronómicos de Chile. Nacida en Alemania, reside hace 22 años en Chile y actualmente es Gerente de Comunicaciones de la Cámara Alemana de Comercio, Camchal. Su afinidad con la gastronomía la plasmó en el primer y único libro de cocina chilena escrito en idioma alemán y editado en su país de origen “Die chilenische Küche”. Sus periódicas crónicas se pueden leer (en español) en el sitio www.camchal.cl y en su columna “De bebistrajos y refacciones” en Lobby.

ESPECIAS

OLIVO DE PLATA DE LAS DOSCIENTAS:
La evolución del aceite de oliva

Encantador, fresco, natural y de una calidad extraordinaria. Así es Olivo de Plata, nuevo aceite de oliva extra virgen que se suma al portafolio de productos de Las Doscientas. Extraído en frío y obtenido de olivas cuidadamente seleccionadas y cosechado a mano, es un blend compuesto de las variedades Arbequina y Picual.

“A través de Olivo de Plata queremos transmitir lo que es para nosotros como empresa, la evolución del aceite de oliva, entregando un producto que refleja la tierra, el olivo de donde proviene, transmitiendo calidad extra virgen”, señala José Pablo Illanes, gerente general de la compañía.

En Olivo de Plata se combinan todos los elementos para dar vida a un gran producto: calidad, tecnología de punta y diseño, “toda una experiencia que se lleva a la mesa”, agrega Illanes.

Olivo de Plata Blend es un aceite suave, fresco y natural, de agradable sensación e ideal para acompañar todo tipo de comidas y preparaciones. Olivo de Plata está disponible en supermercados y principales emporios de nuestro país en presentación de 250 y 500 y 1.000 ml (precio referencia 500 ml $2.690).

BUENOS PALADARES

LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

SOLEDAD MARTÍNEZ
(Wikén)
(29 julio) CASA MAR (Av. Padre Hurtado Norte 1480, Vitacura, fono 954 2112): “Qué mejor panorama: almorzar en "la mesa del chef" (que se reserva hasta para siete comensales), con vista a la espléndida cocina, abrigados e iluminados con una llama de etanol oscilante y bella. La carta de Tomás Olivera que dio un giro completo a este lugar es muy corta, pero un variado menú de degustación ($50.000 con vinos) amplía la visión de su propuesta "de autor", deliberadamente enraizada en los valores y productos del mestizaje chileno, equivalente y distinto a los demás americanos.” “Tomás se identifica con nuestra auténtica cocina (sea en la humilde pantruca o la centolla imperial) y sigue la tarea de reinventarla que inició la generación de Guillermo Rodríguez con el estímulo de René Acklin.”

ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(29 julio) CADAQUÉS (Cirujano Guzmán 194, Providencia, fono 236 2846): “La carta no es muy extensa, pero no deja de ser atractiva por eso. Lo mismo la primera impresión, con una panera humeante y la advertencia justa de que los platos principales llegarían a los 30 minutos. Una sinceridad que se cumplió y que se agradece.” “Para picotear, una tabla compuesta por tres tapas escogidas de un listado más extenso ($9.600). Primero, unas albóndigas de carne en una salsa de tomate muy gansa, las que venían algo crudas en su interior. Luego, unas patatas bravas que parecían domesticadas por lo poco picantes. Y para completar el trío, trozos de pan con un marcado paso de tomate, jamón serrano y una aceituna en cada uno.” “…a pesar de una atención diligente (lo que es muy difícil en una casa llena de habitaciones), las falencias de Cadaqués están en su cocina. Y en su banda sonora también, porque poner la 103.3 a toda pastilla no califica como agradable: escuchar avisos cuando se come es realmente indigesto.”

RODOLFO GAMBETTI (Las Últimas Noticias)
(29 julio) MIGUEL TORRES (Isidora Goyenechea 2874, Las Condes, fono 245 7332): “Se renovó de arriba abajo el restaurante Torres, donde empieza Isidora Goyenechea. Un catalán y un vasco, Miguel Torres, hijo, con Iñaki Viñaspre, del grupo gastronómico Sagardi -familias que comparten varios restaurantes-, le pusieron una identidad categórica, de sabores nobles, simples, contundentes. Que pueden llegar a la gloria de la hispanidad en una bandeja de jamón de cerdo ibérico Los Pedroches, alimentado con bellota, al corte, con pan con tomate ($29.000). O al idioma universal de los adoradores de guisos, con guatitas con lengua de ternera, muy a fuego lento, como las de antes ($9.800). O a la austeridad escolar de un pan con aceite de oliva, con sal y un buen bocado de chocolate de intenso cacao ($5.100). Tremenda carta”

YIN Y YANG (La Segunda Internet)
(29 julio) EMILIO (Av. Mons. Escrivá de Balaguer 5970, Vitacura, fono 218 3773): “La lista comienza con ocho tapas o porciones que parecen indicadas para compartir ($ 6.200 a $ 9.900), en su mayoría de mariscos o pescados (pero también un chicharrón de cochinillo crujiente) y que llevan diversos y a veces sorprendentes agregados y salsas, como arroz inflado, espuma de soya, leche de tigre de tumbo, crema de camote, chutney de mango con curry rojo, alioli, mantequilla de alcaparras o aceite de cilantro, para citar algunos. Si en las entradas ($ 8.500 a $ 11.900) se anuncian tiraditos. ceviches o causas, todos tienen su toque diferente de lo habitual e incluyen pulpo a la parrilla, anticuchos de lomo y un original carpaccio de vegetales. Hay ensaladas y sopas, más tradicionales ($ 7.400 a $ 9.900), y pastas y un risotto que es un “chupe seco”, a diferencia del clásico de camarones ($ 11.900 y $ 12.500), en que la referencia italiana resulta fuertemente peruanizada. De los pescados (atún, congrio, corvina y merluza austral) tres llevan ají y uno, a lo nikkei, mantequilla de miso, pero además aromas y sabores de hierbas, vongoles y hongos, mientras las carnes se pasean entre vacuno, cordero, cochinillo y pato, siempre con mezclas de gustos intensos y un par de veces al estilo norteño del chef Omar. ($ 12.500 a $ 14.900). Entre los postres llaman la atención las variaciones de la crème brûlée y el suspiro.”

BEGOÑA URANGA (El Sábado)
(30 julio) SOL DE MANCORA (Padre Hurtado 1460, Vitacura, fono 212 8275): “El día de la visita había una larga mesa de 15 personas y otra con dos comensales. Todo se inició con un pan calentito con buena mantequilla y salsa de cilantro. Para compartir se pidió un trío de causas. La base de papa era de tres colores, amarilla, de betarraga y de cilantro. Estaba fría, como recién salida del congelador, desagradable. Los rellenos no lo hacían mejor.” “Luego, un chupe peruano, esa sopa generosa, con crema, camarones y huevo escalfado, que aquí se limitó a una porción sorprendentemente pequeña. Inevitable de comparar con el chupe de La Mar. Una desilusión. Además, un congrio apanado en panko, rico y crujiente, sobre un caldo de mariscos que no lo acompañaba. Para olvidar.”

DANIEL GREVE (Qué Pasa)
(30 julio) MATSURI (Grand Hyatt Santiago. fono 950 3051): “Hay nueva carta en Matsuri, nueva chef -Miriam Moriyama- y un enfoque más definido hacia la cocina nipona. A esta nueva etapa le dicen, de hecho, japonesa-japonesa -con más sopas, pescados y teppanyaki o plancha-, como despercudiéndose luego de tanta propuesta paralela con ínfulas de fusión nikkei. Esta vuelta a las raíces viene bien. Si toman la carta se encontrarán con delicias como el Tori Dango Shiru ($ 4.000), un caldo fino y sabroso, con cebollines, delicado repollo y albóndigas de pollo; si suben al teppanyaki serán parte de un espectáculo, en el que el Filete de wagyu con salsa de steak onion ($ 14.000) los asaltará con sabores profundos de ajos y pimentones encurtidos. Y si llegan hasta el final, serán parte de un experimento cojonudo: los atrevidos postres. La sutil y pastosa torta de chocolate con alga nori y helado de vainilla, un vicio; el cremoso mousse de chocolate blanco y wasabi, que sólo conserva el sabor de la raíz, no su picor; y la crème brûlée de té verde tipo matcha, tofu y lychees, bien integrada, sabrosa y sorprendente. ¿Querían Japón-Japón? Acá lo tienen.

PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(31 julio) CASA MAR (Av. Padre Hurtado 1480, Vitacura, fono 954 2112): “Bien atendidos, partimos con copas de vino y Coca-Cola para el niño, acompañados de pan, sopaipillas y pebre. De entrada, Lucas pidió un cebiche de corvina que le encantó, aunque a mí me pareció con demasiado pimiento. Cuchareamos unas pantrucas aliñaditas con comino, ideales para el frío, aunque quizás al caldo le faltaba enjundia, y un tártaro de salmón con esferizaciones de limón y ricas tostaditas. De fondo, el lenguado con lentejas y foie gras estuvo increíble; muy rico. Y la merluza austral con puré de apio y salsa de ostiones, mundial, me gustó mucho.” “La carta es cortita, lo que hace fácil elegir. Me pareció bien pensada, con cosas para todos los gustos y la sofisticada sencillez que Olivera le imprime a lo que cocina.”

CÉSAR FREDES (Lanacion.cl)
(31 julio) ELADIO (Avenida Ossa 2234, fono 277 0661). “Los garzones son veloces y amables, la carne es tan buena como antes y con $12.000 de promedio se puede comer con pisco sour, buena carne, acompañamiento, vino, postre y café express.” “Llegamos dispuestos a aprovechar en Eladio lo que no se puede hacer a menudo en casa: despacharse un bistec a lo pobre que hace necesario un sartén para la cebolla frita, otro para las papas, otro para la carne y un cuarto para el par de huevos.” “Pero como a la mesa fuimos finalmente seis, se pudo disfrutar, compartiendo fraternalmente, eso sí, del “Pobre” y además de arrollado de cerdo delicioso y de pernil con chucrut y gigantescas papas doradas cortadas en mitades. La entrada fue el compartir lengua cocida con salsa de vitel toné (mayonesa con atún y alcaparras) y dos porciones para los seis de entraña asada, importada de Estados Unidos e una calidad fuera de serie.” “Casi da pena decir que el Eladio sin Eladio (al menos el de Avenida Ossa) está mejor que nunca y que las nuevas incorporaciones de platos lo transforman en un restaurante notable y no ya solamente en una muy buena parrilla.”