martes, 17 de abril de 2018

LOBBY MAG

LOBBY MAG.
Año XXX, 19 al 25 de abril, 2018
LA NOTA DE LA SEMANA: Pasteleros chilenos sacan la cara por la gastronomía
MIS APUNTES: The Raj
LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR: ¿Turista o viajero?
BUENOS PALADARES: Crónicas y críticas de la prensa gastronómica

LA NOTA DE LA SEMANA



 
 

PASTELEROS CHILENOS SACAN LA CARA POR LA GASTRONOMÍA

Después de intensas jornadas, el equipo chileno compuesto por Hans Ovando y Gustavo Sáez, capitaneados por  Franck Dieudonné, ganaron la Copa Maya 2018, obteniendo así su pasaporte para disputar la final de la Coupe du Monde de la Pâtisserie el 28 de enero de 2018, en Lyon, Francia.

Nuestros pasteleros recibieron el trofeo de la mano de Gabriel Paillasson, creador de la Coupe du Monde de la Pâtisserie, el 11 de abril pasado en Ciudad de México. Según la organización del certamen, “después de 6 horas de arduas batallas, estos jóvenes chefs han presentado sus creaciones de repostería ante el jurado. Gracias a su desempeño con gran pasión y creatividad, Hans Ovando y Gustavo Sáez han impulsado a Chile a la etapa de pastelería internacional y han ganado su derecho para ir a la final que se celebrará en enero en Lyon”.

Tras Chile, las duplas de Argentina y México terminaron en el 2do y 3er lugar respectivamente, obteniendo sus pasajes a la competencia mundial. Así, Chile, Argentina y México se unen a los 5 países que ya están calificados para la gran final en Lyon (Francia): Italia, Japón, Corea del Sur, Reino Unido y EE.UU. La próxima  final tendrá lugar los días 27 y 28 de enero de 2019.

MIS APUNTES


 
THE RAJ

Nada hace pensar que una casona esquina de la calle Manuel Montt, de paredes blancas y algo fría, esconde uno de los buenos restaurantes indios de la capital. Allí se  instaló hace un buen tiempo el indio Harish Kasu, en esos entonces exportador de frutos secos y propietario de un par de restaurantes de cocina india en Canadá y Dubai, esperando, sin hacer alardes, que su negocio fuera floreciendo. Un par de murales podrían indicar que en este lugar lo indio es su tema, pero más de algún despistado podría entrar pensando que acá tienen cocina peruana, a pesar de que su música es india y gran parte de ella en vivo, con destacados instrumentistas.

Famoso dentro de la colectividad india, el día de mi visita el embajador de la India en Chile recibía algunos invitados en los salones del segundo piso de esta casona. Normal para ellos, los clientes del primer piso ni se enteraron de tal visita y un poco más agitados, los garzones (también de esa nacionalidad y con un español precario pero entendible), cumplían los pedidos de los clientes, que van rotando desde mediodía a medianoche sin tregua.

La especialidad son las Dosas: finos –e inmensos- panqueques de harina de arroz y lentejas que no se ven en otros similares capitalinos. Desde la dosa simple (con salsas para untar, $ 5.900) hasta rellenas con papas y especias (6.900), queso (7.500), pollo (9.900) y otras variedades, se llevan las palmas de todos los que han visitado este lugar. La carta recorre la cocina del norte y del sur de la India en sus versiones carnívoras o vegetarianas, donde ningún plato, por excelente que sea, supera los 11 mil pesos, logrando así un público conocedor y bastante transversal.

El cordero, el pollo y las lentejas son otras de las grandes especialidades del lugar. Con una oferta de cerca de 100 diferentes platos, es difícil dar una opinión de toda esta batería de preparaciones. Sin embargo, saciado el apetito y la sed que provocan los diferentes currys y picores de los platos, es interesante comentar que por muy artesanal que se vea el lugar, la experiencia gastronómica supera largamente las expectativas de los foodlovers, conozcan o no de esta tradicional cocina que viene del oriente. Ellos se autocalifican como “cocina hindú”, cosa que aún no me convence ya que el hinduismo es una religión. Sin embargo y a pesar del logotipo del restaurante, que más parece ser jamaicano, The Raj merece un tremendo reconocimiento.

Un dato calado.

The Raj / Av. Manuel Montt 1855, Providencia / 22716

LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR


 
¿TURISTA O VIAJERO?

Ahora que por fin llega la baja temporada, es bueno pensar dónde pasar unos días de descanso, aunque - la verdad-, uno que nunca se ha caracterizado por realizar grandes viajes o “epopeyas”, nunca tiene demasiado que contar. ¿Descanso?... creo que no. Uno regresa reventado de los viajes.

Los motivos por los que cada cual se plantea viajar pueden ser muy diversos, casi siempre movidos por la curiosidad del saber, la gastronomía, la oferta cultural, la diversión o un compendio de todo ello y, también ¿por qué no?,  pertenecer a la “Champions League” de los viajeros. Me explico, hay una corriente humana cuyo mayor placer en el viajar no consiste en el viaje en sí mismo, sino en la “previa” (la preparación del viaje, la supuesta ilusión por viajar) y el “regreso”, es decir, el placer de contar con todo lujo de detalles el “inventario” de las “maravillosas” jornadas vividas en el Congo Belga, por poner un ejemplo.

Llegados a este punto, me asalta la duda, ¿somos turistas o viajeros? Identifico al turista como aquel que va cámara en ristre, con sus mapas y sus guías en plan Marathon Man con el objetivo de ver la mayor cantidad posible de sitios en el menor espacio de tiempo. Dudo mucho que lo lleguen a apreciar en su verdadera valía, es quizás mejor darle el sentido de placer al viaje, al dejarse llevar, ir a ver algo en concreto, pero detenidamente, ahí se ve la diferencia con el viajero.

El turista acumula la mayor cantidad posible de experiencias distintas en un corto espacio de tiempo, mientras que el viajero se deleita en algo muy determinado, como el buen gourmet puede apreciar una buena comida.

Es la mentalidad del cómo viajar lo que importa, se puede sacar más valor personal a un pequeño gesto que a una gran historia. Quizás haya que plantearse que el viaje que más valoraremos es aquél que menos planificamos, aquél que hacemos a un sitio cercano, en este país que a tantos y tantos sitios se puede ir sin el acelerador pisado a fondo. (JAE)

BUENOS PALADARES


CRÓNICAS Y CRÍTICAS                                           
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(ABRIL) CAFETERÍA LA MEXICANA (Placer 657, locales 109, 110, 111 / 97572 1147): “De lo probado, en dos visitas porque estaba muy rico: primero, unos chilaquiles, ese montón de totopos que se va poniendo lacio gracias a una salsa roja en este caso, con queso y crema y pollo en tiritas. Para reír y llorar, y sudar. De lo no picante, unos tacos al pastor, con su chancho y piña y cebollita picada y cilantro. También unos tacos dorados de pollo, crujientes y con unas tiritas de tomate y palta, servidas sobre una cama de lechuga. Y lo que podría ser no tan habitual, aunque el sabor de las real tortillas ya lo es, son los sopes: son más pequeños y gorditos, como una cruza entre tortilla y arepa, con puré de porotos, lechuga y pollo. Y para el que no guste del sabor a maíz, ahí están unas "gringas", en tortilla de trigo, en este caso con queso derretido y el chanchito agridulce al pastor.” “Y para llegar, que igual cuesta tantito, van las señas: está en el galpón Cordillera, el que está en la esquina de Víctor Manuel con Placer, pero la cafetería está justo en la entrada por Víctor Manuel. Donde ponen un pequeño cartel que dice "aguas".”

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(ABRIL) LANACIONAL (Av. José Alcalde Délano 10.492, Lo Barnechea): “Las dos entradas, un tiradito de atún nikkei ($7.900) y un tártaro de salmón aromatizado con naranja (relamidamente llamado "tartar"; $8.900) fueron un muy buen introito a una comida para la que nos habíamos preparado: ambos platos bien presentados, con su ají, su crocancia y otras picardías, buenos exponentes del talento nikkei del Perú.” “Pero las desilusiones no se dejaron esperar. El lomo saltado Lanacional ($11.900) es una mescolanza que carece del indispensable toque chinesco, que es gran parte de la gracia del plato: en este caso, el lomo viene acompañado de choclo a la crema que desvirtúa por completo la idea original.” “El sudado de pescado ($8.900) hecho con reineta estuvo pesadamente lastrado por ese solo hecho: por muy "pesca del día" que sea, la reineta no es el mejor pescado. Sobre todo porque, en este caso, más que un sudado, que es, por si Usía no está familiarizada, como un estofado soposo, se trató, lisa y llanamente, de un caldo de pescado y mariscos (camarones, pulpo, calamares). Si al menos el caldo hubiera estado bien sabroso y picantito y picarón... Tuvimos que agregarle mucha sal para hacerlo potable. ¿Cómo puede un plato tan simple no estar bien en un restorán peruano que viene precedido de ínfulas?

LUN
RODOLFO GAMBETTI
(ABRIL) VENDETTA (Patio Bellavista, local 100):
De los nuevos merece un vistazo el Vendetta. Muy amplio para la media de los locales (250 puestos, promedio por persona $15.000), da hacia Constitución y se adentra en el Patio. Sin italianos en el equipo, con guiños argentinos, conocen el tema. Compran la pasta seca italiana importada; la rellena la fabrican ellos mismos. Apueste por un bien equilibrado crudo con sus papas fritas ($7.200), un carpaccio ($7.700) o un ceviche mixto ($9.200): es el trío de mayor demanda. La pizza buffala ($8.800) también promete buen comienzo. Y entrando al tema, seductores resultan los fettucine carbonara, con su huevo rampante, o unos sorrentinos al pesto que lo harán ver postales de Génova. O si ama la globalización, unos spaghetti con plateada deshilachada ($8.200). Vinos a buen precio, empezando con un sauvignon blanc Lapostolle de $8.700 o un pinot noir de Leyda, no menor. Y si es para platicar, de lunes a viernes y de 16 a 20 horas se pasa la tarde con los tragos clásicos a sólo $2.500, donde vuelan  sours, piscolas y daikiris."