martes, 26 de mayo de 2015

REVISTA LOBBY


REVISTA LOBBY
Año XXVII 28 de mayo al 3 de junio, 2015
ACTUALIDAD: Sello italiano en el Caffe Armani
MIS APUNTES: La Hacienda Gaucha
NOVEDADES: Alimentos peligrosos… pero aún se consumen
LOS CONDUMIOS DE DON EXE: My name is Acklin…René Acklin
BUENOS PALADARES: Crónicas y críticas de la prensa gastronómica
 

ACTUALIDAD


SELLO ITALIANO EN EL CAFFE ARMANI

Compartir un buen rato con los amigos, disfrutando un trago bien preparado y con antipastos de alta gastronomía es la nueva apuesta de Caffe Armani, con DJ en vivo todos los jueves en su terraza desde las 19:30 hrs. Ideal para olvidarse del estrés del trabajo y empezar a celebrar que ya llega el fin de semana, con el mejor ambiente en pleno Distrito de Lujo del Parque Arauco.

Su carta de after office ofrece cócteles, espumante y vino por copas –de viñas nacionales y extranjeras– a precios promocionales, todos los días. Brilla su ya clásico Emporio Spritz ($3.400), así como el pisco sour con destilado peruano ($3.800), gin Bombay ($3.800), gin Mare ($5.400) y vodka Grey Goose ($4.800), entre otros.

Para maridar, Caffe Armani cuenta con una serie de bocados que resumen lo mejor de su cocina. Como sus bruchetas de tártaro de res a la trufa ($5.400), selección de quesos y salames italianos ($9.800), carpaccio de pulpo o de res ($5.800) o  Frito a la italiana ($6.400), con calamar, camarón, zuccini y berenjena con tempura y salsa tártara, entre otras delicias. Además, ofrece una serie de pizzas perfectas para compartir ($5.900), como la Diavola, Cipolla, Gamberi y Margherita, por mencionar algunas. ¡Imperdible!

Parque Arauco,  Distrito del Lujo, Local Nº 480 - 3º Piso

MIS APUNTES


LA HACIENDA GAUCHA

Pese que la carta incluye una serie de pescados y mariscos, La Hacienda Gaucha es el templo de las carnes en nuestra capital. Y con orgullo, ya que un día cualquiera de semana cuesta encontrar mesa ya que todas están ocupadas por una enorme cantidad de clientela que no se equivoca a la hora de decidir almorzar o cenar.

Ideal para carnívoros que tengan tiempo, ya que la carne que ofrecen debe ser bien conversada y acompañada. Un lugar gigantesco con capacidad para albergar a cerca de doscientos comensales que parten la jornada con algún aperitivo y una empanadita de buen tamaño (carne o pollo según el día), como obsequio de la casa. 

Cierto es que muchos aun la desconocen, como los que se fijan en las críticas y comentarios de la prensa o  el boca a boca que los lleva a lugares que tienen más onda o refinamiento. Acá es distinto. Todavía los aperitivos se sirven en las copas “tulipa” que alguna vez estuvieron de moda y los vinos que tienen en la carta respectiva son de viñas tradicionales. No hay vinos de garaje, ni te tinaja, ni de nuevos emprendedores. Acá el Casillero del Diablo es un festín… y si es cabernet sauvignon, mucho mejor.

Carne a la parrilla y algunas “especialidades” que provienen de Asturias, ya que su propietario es Lucio Torre, un empresario español que poco a poco ha ido cambiándole la cara al sector de la plaza Italia, adquiriendo y construyendo hoteles y restaurantes. Él no dirige la cocina, pero su fabada es monumental y sus callos a la madrileña deben ser los mejores de la ciudad. Y a no ser que su hambre sea monumental, los lebrillos que sirven son tan grandes y profundos que dudo que algún cliente se haya comido el plato completo. Los trozos de carne, wagyu y angus incluidos, si bien son de gran tamaño, las poderosas mandíbulas de los carnívoros hacen desaparecer “hasta los huesitos”, bien acompañada de fresco pan de cada día para “limpiar” (sin que nadie diga nada) los jugos sobrantes de los platos.

No hay exclusividad: mesas donde almuerza una persona; en otras, dos; cuatro en su mayoría y no falta el almuerzo de oficina con 20 o más fanáticos de la carne. Nosotros éramos tres y nos dejamos tentar por las sugerencias de uno de sus ágiles mozos. Lomo (5.490), entraña de Angus (7.990) y callos a la madrileña (4.490) llegaron a la mesa junto a un merlot Viu Manent sugerido por la sommelier.

¿Qué más puede pedirse? La fraternidad (uno invitó y no dejó contribuir a nadie), dos buenas botellas de vino y una conversación inteligente y reposada hicieron el almuerzo más feliz que se ha tenido en varios meses.

Claro, ayudó mucho la calidad del almuerzo, superior a la que esperábamos.

Si “las penas con pan son menos”, el bienestar de tres hombres sensatos y moderadamente felices, puede exacerbarse con un almuerzo variado y suculento que nos hace salir sonriendo y agradeciendo a la gente seria como el empresario Lucio Torre, que hace marchar tan buenos restaurantes.

Además, es comparativamente económico. Por $14.000 por persona se puede comer muy bien, con vino. Por eso La Hacienda Gaucha queda altísimamente recomendada.

La Hacienda Gaucha, Vicuña Mackenna 35. Plaza Italia / 2 2665 6038

NOVEDADES


ALIMENTOS PELIGROSOS…
PERO AÚN SE CONSUMEN

Hay alimentos que matan. Y no, no nos referimos a las hamburguesas que sirven en los establecimientos de comida rápida, a las papas fritas o a cualquier alimento alto en grasas saturadas que, efectivamente, pueden acabar con la vida del más pintado poco a poco. Existe una serie de comidas que son capaces de cercenar el hilo que nos une a este mundo en apenas horas o minutos, y generalmente, de forma dolorosa y desagradable.

La peculiaridad que comparten muchos de ellos es que, a pesar de que su potencial mortal se ha demostrado por pasiva y por activa y en algunos casos han sido prohibidos por las autoridades competentes, siguen formando parte de las cocinas tradicionales de las que provienen. A veces, la preparación por parte de un experto elimina todas las toxinas que contienen; otras veces, los gourmets abisales prefieren correr el riesgo. En Lobby hemos seleccionado diez de estos alimentos que, a lo largo y ancho de todo el mundo, han puesto en peligro miles de vidas de turistas incautos.


Casu marzu
A simple vista, un apetitoso aunque algo extraño queso que suele consumirse en la isla italiana de Cerdeña y al que se atribuyen cualidades afrodisiacas. En realidad, un queso podrido (tal es el significado de las palabras “casu marzu”) que contiene en su interior larvas de moscas que contribuyen a fermentar el queso. El problema es que dichas larvas sobreviven en el estómago del que las ingiere, lo que puede tener gravísimas consecuencias intestinales. La buena noticia es que raramente ello acaba con la vida de nadie. La mala, para los sardos aficionados a este queso, es que ha sido prohibido por la Unión Europea, aunque aún pueda ser adquirido en el mercado negro.


 

Pez globo

El popular fugu, como se conoce en Japón al pez globo, puede ahogar al que lo consume si no es preparado debidamente por un experto. Sus órganos internos –especialmente, el hígado, los ovarios y los intestinos– retienen altos niveles de un tóxico conocido como tetrodotoxina (TTX), que causa parálisis sin que el que ha sido contaminado se percate de ello hasta que sea demasiado tarde y muera ahogado mientras mastica. Los chefs japoneses añaden al plato una pequeña parte de este componente, 1.200 veces más venenoso que el cianuro, para darle un toque picante a sus preparados. El alimento se ha consumido desde hace al menos 2.300 años, pero fue prohibido durante los siglos XVII al XIX para toda la población. Durante mucho tiempo, el emperador de Japón no pudo saborear dicho manjar por su propia seguridad.

 

Bayas de saúco
Probablemente usted conozca los famosos beneficios para la salud del saúco, entre los que se encuentran sus propiedades antoxidantes, antiinflamatorias, depurativas y como refuerzo del sistema inmunológico. Menos célebre es lo fatal que puede resultar el consumo de sus hojas, semillas o frutos crudos o no maduros, puesto que contienen un componente químico conocido como glucósido cianogenético, que puede producir cianuro o ácido cianhídrico. Su consumo puede ocasionar náuseas e incluso ataques al corazón.
 

Anacardo crudo
Tranquilos: los anacardos (castañas de cajú en estos lares) que se compran en los supermercados y otros establecimientos de alimentación no son crudos, aunque así rece su envase. De lo contrario, es probable que miles de aficionados a los frutos secos hubiesen fallecido víctimas del urushiol, un aceite que se encuentra en estos alimentos y que da lugar a la conocida como dermatitis por contacto de urushiol. Los síntomas asociados con la enfermedad son edema, inflamación y supuración, y aunque se trata de un brote alérgico bastante común, especialmente en EEUU, puede resultar mortal en grandes cantidades. Los anacardos que adquirimos normalmente han sido cocidos para eliminar el urushiol.
 

Tapioca
La tapioca se puede encontrar en América del Sur, África y Asia, y suele ser empleada para rellenar tartas u otros dulces. Es importante en dicho caso cocinarla a conciencia, puesto que de lo contrario, la linamarina que contiene se convertirá en glucósidos cianogenéticos como los que aparecían en las bayas de saúco. Se debe pelar por completo y hervirla antes de ser consumida.

 

Almejas con sangre
Un alimento considerado por muchos como una exquisitez pero que, en determinadas variantes, puede resultar mortífero. China, donde apenas se hierve este molusco durante más de 20 segundos, ha visto cómo en 1998 llegó a producir 30 muertes y 300.000 infecciones causadas por una epidemia de hepatitis A. Debido a que viven en entornos con niveles bajos de oxígeno, filtran altas cantidades de agua con toxinas que dan lugar a otras enfermedades graves como la disentería o el tifus. Actualmente, dicho plato está prohibido en el país oriental, y la multa por comercializarlo es de diez veces el precio por el que ha sido vendido en el mercado.

 

Rana toro africana
Este simpático ser utilizado en algunas zonas como mascota y que puede llegar a pesar más de 2 kilos resulta letal si lo introducimos en nuestra dieta, algo habitual en países de África del Sur como Namibia. Aunque los locales aseguran que una vez que el animal se ha apareado, deja de ser peligroso, conviene tener mucho cuidado con su piel y órganos, puesto que contienen diversas toxinas. La sabia tradición señala que nunca debe consumirse antes de “la tercera lluvia”.
 

Hákarl
Uno de los platos tradicionales de la comida islandesa y que consiste en la carne curada del tiburón de Groenlandia. El problema asociado a este escualo es que carece de riñón y tracto urinario, por lo que toda la basura, ácido úrico y sustancias tóxicas consumidas se almacenan en la piel del ser que goza del dudoso honor de ser conocido como “el animal con peor sabor del mundo”. Hace falta que la carne atraviese un proceso de curado de al menos seis meses para que sea apto para el consumo humano.  Eso sí, lejos de las zonas habitadas por el hombre, debido al desagradable olor que desprende.
 

Ackee
Si usted sufre el conocido como síndrome vomitivo jamaicano, probablemente habrá consumido ackee, uno de los frutos más populares del país caribeño, al que llegó desde el África Occidental. La hipoglicina que contiene puede conducir al que la consume al coma profundo o la muerte, si la planta se ingiere antes de encontrarse completamente madura. Jamás hay que probar suerte con sus semillas negras, aunque en teoría, si la fruta se ha abierto de manera espontánea, ya es apta para el consumo.
 

Sannakji
¿El alimento más tétrico y desagradable del mundo? Probablemente. Un plato procedente de la gastronomía tradicional coreana que se prepara a partir de los trozos recién cortados de un pequeño pulpo conocido como “nakji” y aliñado con sésamo. El pescado está tan crudo que los tentáculos seguirán moviéndose en el plato. Además, las ventosas se pueden adherir a la boca o al esófago del que las ingiere, lo que puede causar su ahogamiento. Sus admiradores gustan de explicar lo agradable que le resulta sentir el movimiento de los trozos del pulpo en su garganta a medida que lo tragan. Desde luego, una comida no apta para personas sensibles.

LOS CONDUMIOS DE DON EXE


MY NAME IS ACKLIN…RENÉ ACKLIN
Un homenaje al mejor cocinero de nuestros tiempos.

Tengo un par de diferencias con Bond. Lógico. A él le gusta el Martini “shaken, not stirred” -batido, no revuelto-, y yo prefiero el vodka tónica. Él tiene licencia para matar, algo no muy bien visto este último tiempo en épocas de barbaries surtidas, y yo tengo licencia para ir donde se me plazca ya que vivo solo. Aparte de ello, creo que Bond y yo podríamos llegar a ser muy buenos compinches. Él tiene buenas amigas y yo buenos contactos, así que podríamos formar una dupla de miedo.

Año 2008…

En eso pensaba cuando Mathy me preguntó si en las Termas de Cauquenes hacía frío a finales de noviembre. Gracias a que el jefe sufrió una repentina indigestión debido a un exceso de mero piña que había comido dos días antes, me traspasó su invitación para degustar la cena de Año Nuevo que cada año organiza René & Sabine Acklin en sus termas ubicadas en la precordillera de Rancagua. Lógicamente invité a Mathy y ella, feliz, estuvo un día completo organizando un viaje que sería de antología.

La idea era ir, almorzar, ocupar las instalaciones, dormir, desayunar al día siguiente y regresar a la capital. Una muestra dedicada a James Bond era el enganche de ese domingo. El mismo tema que se repetirá a fin de año, en la cena de Año Nuevo que ya es tradicional en este hotel-tinelo que manejan los Acklin padre e hija.

Viajamos con otra pareja de invitados y “enllegando” como dicen en el campo, nos entregaron las llaves de la bonita y nueva habitación que nos correspondería. Como era pasado el mediodía, sólo una refrescadita por aquí y otra por allá ya que nos esperaban en el bar del hotel. ¿Habrá solamente martini?, preguntaba mi dulce Mathy pensando que Bond sólo tomaba este brebaje.

- No, preciosa. Acuérdate que Bond también alucina con el champagne
- ¿Y tendrán pisco sour?
- No creo –respondí-. Pero tendremos que averiguarlo rápidamente
- Vamos Exe, comentó cuando se ponía un par de gotitas de un suave perfume en su cuello. Estoy lista.

Alguien nos endilgó hasta un salón de conferencias donde estaba preparada la “mise en place”. Un salón de aperitivos con varias “estaciones” ambientadas en las películas de Bond. Por ahí, una mesa repleta de ostras de borde negro y Brut de Torres; otra de caviar de salmón con blinis, huevo, crema ácida y vodka Stolichnaya; una tercera con centolla a granel; otras con camarones salteados, huevos benedictinos y tártaro de tacas patagónicas. Más que de Bond parecía parte de una bacanal romana. Una séptima estación abastecía de licores y preparaciones variadas a los invitados donde no faltaba el buen vino, los mejores vodkas, gin y piscos dispuestos para la ocasión.

- No doy más Exe, me comentó Mathy
- Cuídate perrita –repliqué- ahora viene el almuerzo…
- ¿Almuerzo? ¿Estás loco?
- Sí. Almuerzo, y largo…
- Vamos a tener que dormir sentados Exe. ¿Te das cuenta?
- Preciosa, lo mejor que puedes hacer es dejar de lado ese huevo benedictino que tienes en la mano lista para engullirlo y nos vamos a fumar un puchito para después pasar a almorzar.

Dicho y hecho. Tras un cigarrillo la mesa ya estaba dispuesta. Un almuerzo de nueve tiempos nos esperaba. Será, junto al aperitivo, la cena de fin de año que ofrecerá el hotel a sus comensales. Mathy pensó que no sobreviviría ante tanta comida. -Ándate con calma, alcancé a aconsejarle cuando llegaban a la mesa “grosas” lonjas de salmón ahumado con espuma de raíz picante. Parsimoniosamente comencé a degustar mi plato y ella lo terminó antes que yo. “Qué maravilla” comentaba mientras bebía un chardonnay muy adecuado para la ocasión. Una sopa de abalones peruanos con trufas negras frescas llegó a continuación. Mathy, que nunca las había comido me preguntó por el delicioso aroma que desprendía esa pequeña lámina de trufa. ¡Esto es un orgasmo gastronómico! me comentó al oído con esa mirada lujuriosa que pone de vez en cuando. No le respondí ya que pensaba que comer sería el único placer de este viaje ya que lo demás… estaría de más…

Y seguirían las sorpresas: un gran trozo de foie gras fresco con morillas y champiñones pondría a prueba a los paladares más exigentes del país (nótese que ese día estaban presente gran parte de los especialistas gastronómicos). Notable y único. No sólo el foie gras. Las morillas, las más grandes que he visto en años y de un sabor irremplazable.

Tras un adecuado sorbete de mojito, útil para refrescar las achuras y hacer un alto en este aquelarre gastronómico, el cordero se hizo presente en un perfecto “koeftede”, un pastel de cordero elaborado con pan pita y yogurt. Al lado (y por si acaso alguien aún continuaba con hambre), varios trozos de suprema de pato al anís estrella.

Un queso de nuez francés, de rica consistencia y sabor comenzó a despedir este largo acontecimiento. De ahí, un postre que encantó a todos: frutillas a la albahaca con galleta de mantequilla con almendras y helado de chocolate para finalizar con café-café y trufas de chocolate blanco. No podíamos pararnos de la mesa. El evento había comenzado a mediodía y poniéndose el sol aun estábamos comiendo. Un cognac en la terraza sería nuestro próximo destino mientras el personal de servicio aprovechaba de limpiar las mesas para recibir nuevamente a los viajeros que dormirían en el hotel.

De hecho, parece que este veterano con un tenedor y un cuchillo es tan peligroso como Bond y su Walther PPK. Mathy tampoco lo hace mal ya que rato después estábamos cenando en los comedores de este complejo hotelero y gastronómico.

Dormimos prácticamente sentados en la cama. Tras caer en un profundo letargo, soñé con Bond. Miraba mi barriga y se reía. Me cae bien el tipo ese, aunque ande matando a medio mundo cada vez que se le ocurre. Pero hay cosas que él aún no puede hacer. Él tiene licencia para matar. Yo para comer. ¡Buen equipo podríamos armar!

Exequiel Quintanilla / Diciembre 2008

BUENOS PALADARES

CRONICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(MAYO) OSAKA (Isidora Goyenechea 3000, Las Condes / 2 2770 0081): “El restorán de estilo nikkei Osaka está entre los mejores de Santiago en su género. La imaginación culinaria, sensata y comedida, alcanza aquí, sin fatuos despliegues tecnológicos ni "productos" estrambóticos, altísimas cotas en este estilo que, dicho sencillamente, es otra forma de cocina, quizá la más atractiva, interesante, entretenida, libre, fresca y chispeante de las muchas que posee el Perú.” “Si Ud. tiene de las gyozas la imagen de una bolsa de masa rellena y pesada, pruebe las "inca gyozas" ($17.900 las ocho), de masa liviana, rellenas con pato confitado, cebolla caramelizada -no excesiva-, hongos shitake al wok, bañadas en suave salsa Huancayo. Una delicia. El maki "carretillero" ($7.900) es una obra de arte: el arroz encierra tempura de cebolla (que le da crocancia), trocitos de nabo encurtido (frescos y también crujientes) y camarón fursi, y va el bocado, no inmenso, como en otros casos, encerrado él mismo en magret de pato "anticuchado", bañado todo con delicada salsa Huancayo y acompañado de ají carretillero (pica, pero moderadamente). Catamos también otra entrada, el cau cau de hongos y ostiones ($8.500), plato fino, de sabores en sordina, de inusual elegancia, con su salsa de ají amarillo, hierbabuena y (osadamente) curry.”

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(MAYO) FORMENTERA (Las Urbinas 132, Providencia / 2 2502 2632): “Este es un flamante restaurante español muy español, con su gente atendiendo, cocinando y también como clientes (en especial cuando hay partidos castizos). Es una casa que está poseída por la hispanidad, y eso se respira de entrada. O sea, es innegablemente una experiencia.” “La atención es simpática, pero algo dispersa. La opción del almuerzo es más que recomendable y, en materia de tapas, por lo menos en este caso quedó pendiente. De todas formas, hay un extra a considerar para quienes gustan de la juerga, con sus cañitas y demás: este sitio amenaza con cierres muy tardíos -como jueves y viernes hasta las 4:00-, algo que los noctámbulos tendrán que verificar con la propia fuente, para no encontrarse con la puerta cerrada y la fiesta ya muerta.”

MUJER
PILAR HURTADO
(MAYO) LA TASCA DE ALTAMAR (Noruega 6347, Las Condes / 2 2211 1041): “De entrada, me tenté con un perol de machas, que venía con cebollita y perejil picado, como para que uno lo aliñara. Es una entrada, por lo que no eran tantas las machas.” “Luego llegaron los panqueques, eran dos, delgados y bien hechos, con harto relleno y gratinados. El plato cumplía, pero no me pareció tan sabroso como lo anterior. Como supondrán, quedamos repletos así que no pedimos postre. La Tasca sigue teniendo su estilo en el servicio y una onda que propicia el relajo y las conversaciones sinceras, no sé bien por qué. Y eso, aunque las machas no sean muchas, es algo que se agradece, ¿o no?

 

miércoles, 20 de mayo de 2015

REVISTA LOBBY


REVISTA LOBBY
Año XXVII 21 al 27 de mayo, 2015
NOVEDADES: La ruta del arrollado
MIS APUNTES: El Huerto
LOS CONDUMIOS DE DON EXE: El día de la suegra
BUENOS PALADARES: Crónicas y críticas de la prensa gastronómica

 

NOVEDADES

LA RUTA DEL ARROLLADO

Cuenta la historia que este típico plato campesino país tuvo su origen en la época de la Colonia, cuando la burguesía adaptó embutidos clásicos de la cocina francesa y española con el fin de sacarle mayor provecho al chancho, una de las carnes más consumidas en esos años. Esta incipiente pero sabrosa fusión de productos traídos de Europa y los propios de nuestro país, lograron convertir al arrollado huaso en uno de los principales platos de nuestra tradición gastronómica. El arrollado es tal vez la más sabrosa, blanda y enjundiosa forma de cocinar un chancho. Carne suave, sabor intenso, una blandura sin precedentes... un verdadero vicio. Se cocina con grasa de cobertura y se presenta envuelto en la tripa, la que se desenrolla y deja toda la pieza a la vista. Seis de los mejores que hemos probado en Santiago forman parte de esta pequeña ruta dedicada a uno de los baluartes gastronómicos de Chile central.

SAN REMO
Honorado, idolatrado y objeto de peregrinación es el nuevo hogar del ya célebre San Remo, cuyo nombre es en Santiago sinónimo del mejor arrollado de la ciudad. Sus clientes lo veneran y prácticamente hacen romería para degustar su gigantesco arrollado caliente, con su piel tan perfecta que se deshace con el tenedor y donde su carne expresa los aromas más inconfundibles de nuestra tierra como el orégano, comino y cilantro, bien aderezado con una suave pasta de ají y acompañado de un buen puré picante. Un plato que por $ 6.200 lo dejará sonriente y con ganas de regresar una y mil veces a este santuario del arrollado huaso que nació como la carnicería La Vaca Gorda para luego transformarse en lo que es en la actualidad (Miguel Claro 2220, Ñuñoa. Teléfono: 2555 0541)

DON PEYO
Joel Aguirre es todo un personaje en las cocinas de Don Peyo. Más aún, hace 28 años que tiene la misión de elaborar cada día los arrollados que se consumirán en este gigantesco comedor. Nadie como él conoce los vericuetos para lograr que la pulpa, el cuero y la justa distribución de las especias, lo conviertan en uno de los platos favoritos de este lugar. Acompañado con puré, por $ 5.980 sólo dejará la pitilla en el plato. (Lo Encalada 465, Ñuñoa, Teléfono 2 2274 0764)




LIGURIA
A pesar de que su nombre es originario del país de la bota, acá brilla –y con énfasis- la cocina chilena criolla, esa que se manifestó en los comienzos de nuestra República. Una cocina que es alabada por moros y cristianos y donde el arrollado elaborado en casa y servido frío con puré de palta, es uno de los platos insignia de esta cadena de restaurantes capitalinos que capitanea desde hace 15 años el cocinero autodidacta Alfredo Gutiérrez, quien aprendió el oficio junto a su abuela, en aquellos entonces propietaria de una fuente de soda. (Av. Providencia 1373, Providencia, Teléfono 2 2235 7914)

LOS BUENOS MUCHACHOS
En el año 1939, José Ignacio Vivanco (padre) con 17 años de edad, junto a su madre, dieron inicio a una artesanal picada en la calle Cumming, donde en un patio trasero de una verdulería que a la vez servía de hogar, atendían a algunos parroquianos que gustaban de los cocimientos de chancho y la chicha de Villa Alegre para acompañar tertulias de naipes y conversación. En los años 60 Los Buenos Muchachos era una picada propiamente tal, donde sus principales platos eran la pichanga y el arrollado preparados por don Nacho. La fama de su arrollado acompañado con papas hervidas fue heredada generación tras generación y en la actualidad no hay festejo que no incluya el arrollado como uno de los más fieles representantes de nuestra cocina. (Av. Ricardo Cumming 1031, Santiago poniente. Teléfono 2 2566 4660) 

RAUL CORREA Y FAM.
Uno de los escasos oasis que quedan en el Barrio Alto es la inmensa instalación del criollo Raúl Correa y Familia, un restaurante que tomó como baluarte de lucha la cocina chilena de los inicios del siglo XX y ha mantenido con los años una calidad a toda prueba. En sus cocinas elaboran el arrollado todos los días ya que forma parte fundamental de las cartas que ofrece a su clientela. Frio ($ 4.200) o caliente ($ 6.000) –con puré de palta o papas cocidas, respectivamente y con ají en pasta o pebre a gusto del consumidor, se ha convertido en uno de los must de este lugar. (Av. Las Condes 10.480, Vitacura, Teléfono 2 2432 4747)






LA CASA VIEJA
Con años de historia en la Av. Chile España, este tradicional y chilenísimo restaurante dejó su antigua casona para trasladarse a tres nuevas direcciones en la capital. El 28 de diciembre de 1982, día de los inocentes, abrió sus puertas como una aventura gastronómica de tres jóvenes amigos gozadores de la buena mesa y de lo chileno. Así fue como, entre hornos de barro, piso de tierra, braseros para calentar los días de invierno, tonadas de fondo y comedores de adobe, comenzaron a desfilar las patitas de chancho, cazuelas, empanadas, plateadas, los arrollados, congrios fritos, y muchos otros, acompañados siempre de un irresistible pan amasado y los más ricos pebres. El arrollado acá es de antología, donde es servido por piezas y su precio es de $ 6.990. Sabroso y atrayente, su mayor atractivo es sacar la pitilla lentamente, cosa que el aroma del arrollado se potencie al máximo. Para muchos, uno de los más destacados de la capital. (Av. Manuel Montt 1631, Providencia, Teléfono 2 2204 7624)

martes, 19 de mayo de 2015

MIS APUNTES

EL HUERTO
Vegetariano y vegano

A veces, lo vegetariano o lo vegano tiene algo de intransigencia o de fundamentalismo, como si los que adoptan estos conceptos sean algo no terrenal. Sin embargo con el correr de los años estas tendencias han ido en aumento a nivel mundial, fenómeno que va de la mano con la globalización y la transgenia de los productos alimenticios.

Y si de comida se trata, hace 35 años se abrió El Huerto, iniciativa de José Fliman y su socia, Nicole Mintz. Inicialmente dedicado a la cocina vegetariana (la que incluye huevos, queso y leche) y luego, en los albores de este siglo, una cocina derivada del vegetarianismo, hoy en día catalogada como cocina “vegana”.

Si nos remontamos a los años 80, lo vegetariano era más que nada una indicación médica. Pocos seguían esta cultura que años después se convertiría en casi una religión. Cuando José y Nicole abrieron el local, más de una penuria vivieron y tuvieron que realizar diferentes actividades para mantener su negocio abierto. De allí nace una especie de “centro cultural” donde las actividades ligadas a esta forma de vivir se conjugaban y convivían en un mundo aún poco comunicado, como lo fue antes de la masificación de Internet.

El tiempo pasó y se fueron consolidando. Tanto que hace un tiempo, The Daily Meal, el gran portal gastronómico de los Estados Unidos, incluyo El Huerto como uno de los mejores restaurantes vegetarianos del mundo. Ubicado en la posición número 11, es un logro tremendo, ya que nuestro país no se caracteriza por tener restaurantes vegetarianos y son pocos sus representantes.

Cocinar vegetariano no es fácil y es un gran desafío ya que se debe respetar la estacionalidad de los productos y lograr hacer con ellos un sinfín de recetas. Si el lector  no se imagina un carnívoro comiendo cordero todos los días del año, con las hortalizas y granos pasa lo mismo. Por ello recorren el mundo e incorporan recetas de remotos lugares con el fin de agradar a los ya cerca de dos millones de comensales que han sido atendidos en este lugar a través de los años. Tres generaciones de clientes que llenan diariamente los comedores y su gran terraza ubicada en una de las calles más bonitas de Providencia.

Una gran carta los espera. Desde Porotos granados (en temporada) hasta Gratín de berenjenas asadas, pasando por pastas, arroces y especialidades de la cocina india y mexicana. Son sabores del mundo que se agradecen y convencen de que en esto de la comida no todo es un trozo de carne. (Juantonio Eymin)

LOS CONDUMIOS DE DON EXE


EL DÍA DE LA SUEGRA

-¡No más! Por favor Exe.
- ¡Pero recién llevamos dos, guachi!
- No me agotes, plis. ¡Me vas a matar!
- Vamos Mathy ¡tú puedes! ¿Vamos por el último?
- No puedo más, Exe. Si quieres te doy una manito, pero no soy capaz de otro.

Si piensan que esta conversación es parte de un cuento erótico, están errados. Lo que pasa es que el sábado pasado nos fuimos a Isidora Goyenechea y nos entusiasmamos en el Dominó, ese local pelolai que vende hot dogs. Allí nos zampamos cinco diferentes y otras tantas cervezas entre los dos. Teníamos hambre y quedamos K.O. tras la experiencia. Me acompañó ya que el domingo no la vería. Alguien por ahí inventó el Día de la Suegra y uno de sus yernos la invitó a almorzar.

- ¿Dónde te llevarán?
- Ni idea. Pero con lo desprendido que es mi yerno capaz que me lleve a comer wantanes y un chapsui de pollo. Pero no me quejo. ¡Es buen padre el marido de mi hija!

Golpeé tres veces la mesa de madera con los nudillos de la mano ya que no tenía suegra. Una suerte de los diablos, pensé, aunque creo que el diablo no debe estar tan feliz con la mía allá en los siete infiernos. Un día pasó por mi cabeza que me encontraría con mi suegra cuando me fuese de este mundo y la idea no me gustó para nada. La vida eterna no es fácil ¿no?

- Exe, tú que conoces todo. ¿Me podrías dar algunas alternativas para el almuerzo de mañana? Siempre y cuando mi yerno me pregunte dónde me gustaría almorzar.

 Cuando se trata de yernos soy peor que Hannibal, el doctor Lecter. Mi idea era que él sufriera cuando mi Mathy pidiera platos y fuese sumando el valor de ellos. Le sugerí el Europeo, Astrid y Gastón, El Cid, el Bristol, el da Carla y otros. Mathy no entendió la broma y se anduvo enojando. –Ellos no son millonarios ni van gratis a los restaurantes como tú- recriminó. Dame alternativas decentes por favor.

- ¡Vayan a Las Lanzas!, ahí por tres lucas te comerás un chupe de guatitas de miedo.
- No seas ordinario Exe. Esa no es la idea.
- ¿Cajita feliz en McDonalds?

Parece que no le gustó mi aporte ya que se amurró. Volvimos en silencio a su departamento y se encerró en su cuarto. Yo prendí la tele del living y dormí una tremenda siesta. No hay nada que me haga dormir mejor que los programas de los sábados. Y ya ni siquiera hay mineros. Por ultimo con ellos me entretenía más que con Yingo.

Cuando salió de su habitación estaba más amena. Se le había quitado el enojo y pareciera que comprendió que lo mío eran solamente celos. –Qué pasaría si mañana no voy a ninguna parte y me quedo contigo- preguntó.

- De ninguna manera –contesté-, es TU familia y te debes a ella aunque no te guste. Además nosotros tenemos toda una vida por delante, siempre y cuando no se les ocurra a los publicistas hacer días de la tía, del sobrino, de los nietos, del abuelo, de la nana y de la gran puta.
- Suerte la tuya que no tienes suegra
- La tuve, cariño. La tuve.


Mi domingo fue tranquilo. Partí a Las Lanzas y le enseñé al barman a hacer Bloody Mary, un trago que me encanta pero que pocas veces lo bebo ya que no saben hacerlo. Como allá tienen de todo y me permiten hacer lo que quiera, fue cosa de ir uniendo materias primas en su justa proporción: jugo de tomate en lata, salsa inglesa, tabasco, sal, pimienta, una ramita de apio y vodka. A decir verdad me quedó de lo más bueno (y barato ya que no me lo cobraron). Pedí para almorzar unos tallarines con aceite de oliva, mantequilla y salvia que no tenían en la carta pero que me encantan. Demás decirles que cinco contertulios pidieron mi pócima y otros tantos mi pasta. Y estaban felices. Con razón Manuel Vidal, el amo del lugar sólo me permite dejar propina. Como van las cosas, capaz que en el verano arriende mi cupo en ese boliche.

Dormía siesta en mi departamento cuando llegó Mathy. Furiosa y con los ojos rojos como si hubiese fumado esos cigarrillos que se lían.

- Ha sido el día más desagradable de mi vida, comentó. Fuimos a un restaurante italiano y mis nietos comenzaron a tirarse los ñoquis y el pan por la cabeza. Hicieron tanto desorden los malcriados que los mozos nos pidieron que abandonáramos el local.
- ¿Y la mamá y el papá de los críos donde estaban?
- Eso fue lo peor. Se reían con las gracias de los pendex. Lo siento Exe, vengo emputecida y empelotada. No fue buena idea aceptar este almuerzo.

 No soy pitoniso ni nada que se le parezca. Me hice el desentendido y no la recriminé.

- ¿Quieres un té o un café?
- Lo que quiero es un Martini a la vena, contestó lloriqueando.

No tenía vodka así que se lo hice con gin. Se tomó dos. Quedó viendo estrellitas tornasoles. Se sacó la ropa y se acostó calata en mi cama. Despertó a la mañana siguiente con un hachazo de proporciones. ¿Qué me diste?, fue lo único que dijo esa mañana. Le preparé desayuno con jugo de naranjas (de caja, obvio), té, un par de tostadas con mantequilla, dos paracetamoles y una sal de fruta.

Cuando escribo esta crónica aún está tratando de equilibrar su pulso. Definitivamente Mathy no nació para suegra. Es posible que hasta el rol de abuela le quede grande. Pero se ve tan linda durmiendo con una camisa listada que le presté ya que no traía nada cuando llegó, que es imposible no quererla.

La podría invitar a comer ñoquis esta noche. ¿Qué opinan?

Exequiel Quintanilla

BUENOS PALADARES


CRONICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(MAYO) SENSO (Av. Kennedy 4601, Las Condes. 2 2950 3179): “Los antipasti y ensaladas resultaron variados y de buena calidad (buen jamón serrano, lomo de chancho -secón-, roast-beef -malogrado por una salsa dulzona-, buen salmón ahumado, atún sellado como debe ser, grandes camarones, carpaccio amoldado de pulpo -fino-, deliciosas berenjenas grilladas y otras hortalizas al mismo estilo -ricos los zucchini-, varios arroces, buen cous cous, ensaladas diversas de buena calidad -espárragos, brócoli al dente con aceitunas y aliños, lechugas, tomates, papas, etc.-, y varios quesos (edam, brie no de calidad superior pero brie, cabra, azul).” “Los fondos, por su parte, son para negociadores avezados, a los que, como antiguamente a los diplomáticos, una mesa copiosa no les hace mella. Al contrario. Ese día había tres alternativas: un risotto con alcachofas y queso azul realmente excelente, que nos permitió calibrar la mano del cocinero y calificarla bien; una pasta a la crema con salmón, y unas carnes a la parrilla (lomo, filete, pollo, reineta) con aditamentos (deliciosa polenta cremosa).

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(MAYO) MADAM TUSÁN (Mall Costanera Center, local 5160 / 2 2618 9754): “Es singular el hecho de que la fusión entre japonés y peruano -nikkei- sea más popular en Santiago que la mezcla entre chino y peruano, chifa. ¿Será porque los rolls mejorados de lo nikkei se pliegan al consumo generalizado del sushi? ¿Será que una cuota de chifa, como los arroces salteados, ya es suficiente en las cartas regulares de la cocina peruana? ¿O es que la tradición popular de la cocina china no ayuda a subir los precios? Aunque, si esto último fuera cierto, no existiría Madam Tusán,” “En fin. Un exquisito pato agridulce en trozos arrebozados ($12.200), con mucho pimentón crujiente, lychees y naranjitas. Abundante, aunque los pedazos debieran haber sido más pequeños, porque ni cuchillo trajeron a la mesa.”

MUJER
PILAR HURTADO
(MAYO) RISHTEDAR (Vitacura 5461 / 2 2231 3257): “Partimos con un rico lassi de piña mirando la extensa carta, con muchas opciones vegetarianas. Pedimos goa chili bengan, berenjenas con especias, cebolla y pimentón, que venían sobre una plancha caliente, muy sabrosas pero poca berenjena y más cebolla y pimentón. Paneer nilgiri korma es queso paneer (parecido a un queso fresco) con coco -que se sentía poco-, menta, cilantro y picante. Como plato con carne, el elegido fue gosht adraki, cordero tierno con salsa de cebolla y jengibre rallado, que nos gustó harto pues el jengibre le daba un toque especial. Acompañamos con dal takda, lentejas rojas con crema al curry y especias indias, ricas pero pocas lentejas (recuerdo que la vez anterior probé otras lentejas alucinantes), y kashmiri pulao, arroz basmati con frutas. En el local a esa hora solo estábamos nosotras y una mesa adentro, si bien es muy espacioso; ojalá que se llene a otra hora porque da pena tanta inversión y poco público.” “La comida nos pareció muy sabrosa y la atención muy amable, pero extrañamos las berenjenas y las lentejas…”

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS
RODOLFO GAMBETTI
(MAYO) EL HUERTO (Orrego Luco 054, Providencia / 2 2233 2690): “Creado y dirigido por Nicole Mintz y José Fliman,  El Huerto, imperdible, lleva tres generaciones probando que la cocina vegetariana no sólo es saludable, sino muy rica. Y como festejo, celebración y clase práctica nos invitó a probar los mejores platos del “menú hortelano” de su historia. Riquísimos, sorprendentes, para repetirse. Por cierto, las sopas de berros y topinambur son como para dejarlas encargadas. Y plato estrella,  una croqueta engañosa, súper sabrosa, con crocante y tentador trozo de tocino frito (ambos, en realidad, de cochayuyo), con hongos gargales silvestres, salsa tártara con crema de tofu y un apetitoso ceviche, también de algas.” “Consumo promedio $ 10.000. Menú hortelano, $7.450, de ensalada, sopa y fondo en un plato, más un postre”.

 

martes, 12 de mayo de 2015

REVISTA LOBBY


REVISTA LOBBY
Año XXVII 14 al 20 de mayo, 2015  

ACTUALIDAD: Un vistazo al mundo vegetal
MIS APUNTES: Ópera
NOVEDADES: Tipos de cocina
LOS CONDUMIOS DE DON EXE: El día que conocí a la paquita
BUENOS PALADARES: Crónicas y críticas de la prensa gastronómica

 

ACTUALIDAD


UN VISTAZO AL MUNDO VEGETAL
Todo partió con una semilla

Cuando hace miles de años a alguien se le ocurrió sembrar una semilla, inició la creación de condiciones artificiales para la vida vegetal. El hombre recolector dio paso al hombre agricultor creando condiciones artificiales para las plantas. Nunca en la naturaleza algún otro ser vivo había limpiado un campo de cultivo de otros vegetales para que sólo uno creciera. Las plantas siempre estuvieron a merced de las lluvias hasta que el hombre llevó el agua a las plantas para no depender del clima. Nunca una planta había evolucionado tan rápidamente como cuando el hombre empezó a seleccionar los ejemplares de los vegetales reproduciendo los que mejor le servían. Así fue que el hombre creo el maíz, el trigo, el arroz y otros cereales, que no existen de manera silvestre. Las primeras modificaciones genéticas a los organismos comenzaron hace más de 10 mil años cuando el hombre se hizo sedentario, agricultor y ganadero.

La tecnología para reproducir en condiciones artificiales los vegetales de los que dependemos ha ido variando a lo largo de la historia. Seguramente al principio sólo se arrojaban semillas donde se deseaba que crecieran los cereales. Miles de años después, se limpiaban los campos de otras plantas, se araban, se sembraban, se regaban y se fertilizaban. La agricultura no ha dejado de ir buscando y encontrando tecnologías que le permiten obtener más con menos. Con la llegada de la ciencia a la cultura humana, la tecnología para aumentar la productividad de los cultivos se potenció de manera impresionante. Las teorías sobre la vida, en particular la vegetal y los descubrimientos de la química sobre qué están hechas las cosas, cambiaron radicalmente las ideas sobre la vida vegetal dejando las explicaciones aristotélicas y entrando al conocimiento objetivo, despojado de explicaciones místicas y teorías falsas.

El siglo XXI ha estado plagado de opiniones respecto a lo orgánico sin conocer en profundidad el tema. La genética permitió crear nuevos vegetales en pocos años a diferencia de los miles que había tomado antes seleccionar variedades. El vigor y la productividad de los híbridos sorprendieron a una humanidad que no dejaba de crecer y de demandar cantidades en aumento de alimento. Cuando hablamos de “Chile: potencia alimentaria” debemos saber que la esperanza no está vinculada a lo orgánico. El concepto de “natural” no es real. La alimentación orgánica es hoy por hoy un placer costoso y así lo será en el futuro. Las técnicas de cultivo han avanzado rápidamente y el mundo natural no sólo se quedó atrás, sino que fue pulverizado por el desarrollo. La “huerta”, esa que proveía de alimentos a la familia y vecinos de las comunidades, ya es sólo un buen recuerdo campesino.  Como decía El Padrino: “No es personal, son sólo negocios”. (JAE)

 

NOVEDADES


DOCE TIPOS DE COCINA

Cocina: Arte o manera especial de guisar de cada país y de cada cocinero. La única diferencia debería de ser entre buena y mala cocina, pero hay otras. Por lo menos eso dicen. Veamos:

 
Alta cocina

Para su elaboración se requiere un gran oficio y un dominio de las técnicas, en la que se usan siempre productos de gran calidad, en ocasiones de elevado precio. La alta cocina se originó en las clases nobles anteriores a la Revolución Francesa y posteriormente encontró cobijo en los restaurantes. ¡Ah! No hay que olvidar que es la más difícil a nivel técnico, por lo que lo mejor es que la coman en restaurantes. Como en todas las otras, también la hay buenas y malas.

 
Cocina clásica
Estilo correspondiente al periodo de la alta cocina que va desde finales del siglo XVIII hasta la década de 1960. Bueno, ésta es mi definición, no la definición.

 
Cocina contemporánea, moderna, nueva
Propia del momento actual; es decir, de ahora, como es lógico. Ha existido siempre en todas las épocas.


Cocina creativa
Cocina caracterizada por la capacidad continua de innovación e investigación. Bueno, eso dicen. Es como si todo el mundo que pinta es artista, o como el que toca piano, es pianista.


Cocina de autor

Caracterizada por la interpretación personal de la tradición culinaria. No tiene que confundirse con la cocina tradicional, ya que ésta se caracteriza por el estilo propio de un cocinero.

 
Cocina de investigación
Estilo basado en el estudio de los fenómenos científicos, de los hechos culturales relacionados con la gastronomía, en la aplicación de conocimientos de otros campos y en una metodología de trabajo objetiva.


Cocina de mercado
Estilo de cocina basado en productos autóctonos y de temporada; es decir, los que se pueden encontrar en el mercado en su mejor momento. Es un adjetivo ambiguo y confuso, puesto que toda buena cocina debería exigir la compra de productos del día.


Cocina de producto
Estilo de cocina basado en la utilización de los productos al natural o ligeramente pasados por el fuego. Es decir, la naturaleza acariciada por el hombre. Se basa en la calidad de dichos productos y no en la sofisticación de su elaboración.


Cocina de vanguardia

Nombre que se aplica al estilo más innovador del momento, aquel que abre caminos nuevos. Su autor es aquel que todos dicen que está loco.


Cocina popular

Cocina que elabora la mayor parte de la gente en cada momento en el ámbito doméstico. La actual cocina popular raramente coincide con lo que llamamos cocina tradicional; basta con ir a ver qué compra la gente en el súper. Ya adelanto que no son productos para hacer un guiso o una cazuela.


Cocina técnico-conceptual

Tipo de cocina creativa en la que el cocinero no intenta sólo elaborar una nueva receta, sino crear un nuevo concepto o idear una nueva técnica que permitan abrir nuevas vías para su propio estilo y para la cocina en general.


 
Cocina tradicional

Cocina nacida en los hogares que fue la cocina popular hasta hace poco (ahora resulta difícil delimitar qué es la cocina popular). Ésta existe en todos los sitios del mundo, aunque cada una con su propia personalidad. Está basada en productos que son de la zona o que han sido traídos de otros lugares (la mayoría) para elaborar recetas típicas de cada región, ahora mejor dicho autonomías, y que se suele transmitir de generación en generación. Bueno, por lo menos era así hasta ahora.