miércoles, 29 de febrero de 2012

MIS APUNTES GASTRONÓMICOS



DANUBIO AZUL



Estaba curioso por saber la verdadera razón por la cual el Danubio Azul, un restaurante con un nombre tan europeo, fuese uno de los mejores exponentes de la comida china cantonesa de Santiago. Me intrigaba su nombre y su historia, una que comienza cuando Matías Chia llega a mediados del siglo pasado a Chile procedente de Lima. Su nieto, Giovanni Vanni, actual encargado del negocio familiar, me cuenta: Mi abuelo, que al final le cambiaron el apellido por el de Chiamil, llegó en sus inicios a Iquique, pero luego se trasladó a Santiago. En aquellos entonces conoce al dueño de un restaurante austriaco y éste, que estaba casi quebrado, le ofreció el negocio al abuelo. Lo compra y decide mantener el nombre y lo convirtió en un restaurante de comida china.



De eso, más de cincuenta años.
Hoy el Palacio Danubio Azul es un gigante que se emplaza detrás de la Municipalidad de Las Condes y a metros del hotel Ritz Carlton. Mientras conversaba con Giovanni, aparecían algunos platos de su nueva carta. Hay cambios evidentes ya que ha realizado extensas giras al exterior para probar lo mejor de la comida china cantonesa. Él es el responsable de este lugar, y como tal, quiere mantenerlo en la cima de las preferencias gastronómicas de los chilenos. Como deben saber, la china es una de las cocinas mas difundidas en el país. No existe barrio que no tenga uno o más restaurantes chinos y hoy en día un chapsui o un filete mongoliano no son palabras desconocidas para nadie. Todos, queramos reconocerlo o no, hemos comido chino más de alguna vez en la vida.



La comida china cantonesa atrae y es de gusto popular. Las diferencias están en la calidad del producto escogido y la materia prima que se ocupa para destacar. ¿Cuántos hemos comido wantan rellenos con nada? Muchos. Pero acá los rellenan con centolla y claro que marca diferencias. Si están rellenos de pollo o cerdo, 10 de estos sólo cuestan $ 3.200, y si quiere deleitarse con un sabor más picante, unos ajíes rellenos con pasta de corvina y apanados en panco, tan sólo a $ 5.600 las seis unidades.



Primera recomendación: no se tiente demasiado con los appetizers, ya que la carta es gigante.



Se respira un aire especial en este lugar. Quizá sea razón de ello una cierta americanización de los ambientes, de los uniformes del personal y de todos los detalles que rodean al Danubio. 300 personas es su limite y los fines de semana le dan dos vueltas al almuerzo y a la cena. Como me gustan las cifras, me cuentan que atienden un promedio de trece mil personas mensualmente. ¿El sueño del pibe?



Segunda recomendación: trate de ir con las ideas claras.





Si quiere pato, cómalo; si quiere filete, pídalo; si quiere pescados o mariscos, vaya por ellos. La carta es tan grande que marea… y eso no es bueno un día de trabajo…
La gracia de Danubio es que hay de todo y para todos. De todo en materia prima y para todos de acuerdo al bolsillo. Giovanni me cuenta que su boleta promedio ronda los veinte mil pesos por persona y yo estimo que es muy fácil llegar a esa suma. Sin embargo, probar unos deliciosos ravioles de centolla acompañados de una salsa de cebollín y jengibre, vale la pena su precio (10.200). O deleitarse con un pato asado deshuesado con ajo y ají molido cubierto en salsa a la naranja (igual valor), acompañado de un pinot noir TH de Undurraga, bien vale la aventura gastronómica. –Es cierto que existen restaurantes chinos que por menos de diez mil pesos tu puedes salir con el ombligo para afuera, comenta Giovanni, -pero lo nuestro es calidad, producto, servicio, higiene y una carta de vinos para todos los gustos y presupuestos. –Y en eso no transamos.



Última recomendación: deje espacio para el postre



Cerdo, pollo, filete y pato; mero, congrio, corvina, camarones y creaciones especiales para niños (todos a $5.800) en este gran menú. Largo sería enumerar los 141 platos de su extensa carta pero le sugiero que deje un espacio libre en su estómago para el postre que les dedico: un arrollado primavera relleno con frambuesas y queso Philadelphia: demasiado bueno (3.800).
58 años han pasado desde que Matías Chia llegó a Chile. Hoy, el Danubio Azul es una institución en lo referente a la comida china en la capital. Y realmente es un Palacio.



Palacio Danubio Azul, Reyes Lavalle 3240, Las Condes, fono 234 4688