martes, 12 de enero de 2016

BUENOS PALADARES

CRÓNICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONOMICA

MUJER
PILAR HURTADO
(ENERO) PUESTA DE SOL (Av. La Playa 852, Las Cruces /  35 431 679): “Nos sentamos afuera, donde estaba la mayoría de los comensales: parejas, turistas y nosotros. De inmediato vino el garzón y nos pasó la carta, cuya especialidad obviamente son los productos del mar, aunque también había carnes y pollo. Llegaron hallullas calientes con mantequilla y salsa de ají bien picosita. Pedimos un par de empanadas de mariscos para compartir, las que eran de buen tamaño y llegaron recién fritas; estaban buenas, rica masa y abundante relleno en el que destacaban almejas y choros. Para el fondo, todos nos inclinamos por los pescados: reineta a la plancha con ensalada, merluza frita con papas y congrio frito con ensalada chilena. Las porciones eran gigantes; de congrio, por ejemplo, venían tres trozos, con fritura correcta y buen punto de cocción en el interior. La reineta a la plancha estaba recocida; la merluza estaba bien. La cebolla de la ensalada chilena estaba cortada un poco tosca, si bien los tomates de la zona son muy sabrosos. Las papas fritas también estaban ok.

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(ENERO) VEGAN BUNKER (Fresia 529, Barrio Italia/ 8-5846257): “El lugar es informal; la atención, también. La cocina no es rápida, pero bueno. De lo probado, un par de sándwiches y algo de pastelería, hay que decirlo: más que bien. Aparte de que el mejor condimento en este caso es otro: hay más convicción política en una de sus hamburguesas de soya que en cualquier promesa de campaña.” “Fuera de carta, como oferta del día, la Oliver: sabrosísima hamburguesa de soya frita, pepinillos, mayo casera y cebolla caramelizada en pan frica ($3.000). Para acompañar: veganrevolution, vitamina de naranja, zanahoria y betarraga con semillas de chía ($2.000). También tienen smoothies con leche de soya. Y también resultó cero desabrido (el prejuicio, así es) el sándwich Maily ($2.500), con tofu a la salsa barbecue, cebolla morada (gran complemento), lechuga y mayo al ajo.” “La carta es atractiva, tanto por sus combinaciones de sabores como por los bajos precios. Se nota un público asiduo a este ambiente intenso, como un brownie de chocolate para terminar -obviamente que vegano- con un café de rigor.”

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(ENERO) DULCERÍA FRUTILLAR (Av. Cristóbal Colón 5300, Las Condes / 2 2212 6932): “Conocimos la pastelería Frutillar por sus tortas, que le han dado fama. La mejor de todas es la "Frutillar", que congrega casi todos los elementos que hacen de una torta la cosa rica que es (hojaldre, merengue, crema, mermelada y más). Casi como la famosa "torta San Guillermo", del Club de la Unión, que sí reúne todo. El resultado, aunque extravagante, es buenísimo.” “En cambio los pasteles... Hemos probado una vasta selección, todos a $1.900, que incluyó un strudel de manzanas (pocas manzanas, demasiadas pasas Corinto, masa no todo lo sutil que pide un strudel). Pero no eran propiamente pasteles, sino trozos de tortas, lo cual no es lo mismo: el pastel-pastel exige un diseño más delicado que una torta, y una confección que debe ser primorosa, o la cuestión no es pastel. Los milhojas, la verdad es que eran trozos de torta que tenían hojaldre: si la torta es buena, lo es también el pastel. Como esas tortas son buenas, los mejores pasteles ya sabe, Madame, cuáles son.”

LAS ÚLTIMAS NOTICIAS
RODOLFO GAMBETTI
(ENERO) DANÉS (Av. Vitacura 4607/ 2 2954 3140): “En un sector santiaguino más bien caro, quienes lo frecuentan obligadamente descubrieron que aunque sus precios no son de fuente de soda, el local ofrece platos contundentes para aguantar el día, a los que es fácil acostumbrarse. No se le ocurra ir a tomar allí una copa de espumante o a buscar un plato complejo: los camareros lo mirarán como bicho raro y no es el propósito del Danés ni le interesa.” “en la carta hay un arsenal bien provisto de sánguches, a los que han agregado -a diferencias de los locales clásicos-, unas cuantas entradas más y unos cuantos postres tipo casero. Cervezas y vino por copas. Con barra en el primer piso y comedor en el segundo. Y basta mirar en las mesas cercanas –bastante próximas-, para constatar que los comensales se toman con mucha alegría esa atmósfera variopinta. Frente a prietas con papas, empanadas, un rico arrollado casero (alrededor de $8.000), una “pichanga Danés (sic)” chilenísima, con tres tipos de queso mantecoso. Y por cierto, muchas variantes de churrascos, hamburguesas y mechada entre los fondos.”