miércoles, 22 de marzo de 2017

MIS APUNTES


 
SERGI AROLA EN SANTIAGO
Es un hecho que la televisión provoca en los usuarios curiosidad por conocer algo más de los personajes que aparecen en ella. Un fenómeno normal y que le ha abierto las puertas –en nuestro caso- a varios cocineros que se han convertido en figuras casi intocables para los que siguen sus programas. Uno de los últimos en tener esta popularidad en Chile es Sergi Arola, el chef catalán que logró en su momento tener dos estrellas Michelin en España y que hoy es uno de los jurados de Masterchef, que recién comenzó una nueva temporada.

Sergi Arola se había conocido con Christopher Carpentier cuando el primero estaba a cargo del restaurante que bajo su nombre se abrió en el hotel Ritz Carlton (2010). Al encontrarse nuevamente en este programa televisivo y ambos como jurado, decidieron hacer algo entretenido en conjunto y el chileno invitó al español a cocinar en El Barrio, el restaurante que posee Carpentier en Alonso de Córdova. Así, y durante los próximos tres meses, el lugar ofrecerá dos cartas diferentes, algo poco frecuente en nuestra capital.

Culto y más receptivo que la vez pasada, en esta ocasión logra un acercamiento a sus clientes con el fin de traspasar la “filosofía” Arola que va detrás de cada plato que presenta. Una selección de tapas frías y calientes, arroces, fondos y postres que logran conocer algo de su cocina. Como ejemplo digno de destacar, un tártaro de vacuno –con huevo- elaborado con cebolla frita y aliñado con soya, wasabi y jengibre (6.900), que resultó fino, fresco y delicado.

Para los inquietos vegetarianos, imperdible se transforma un carpaccio de portobello marinado con vinagreta de trufas y cubierta de parmesano rallado (7.900), o sus archicononocidas –y picantitas- Patatas bravas (6.000), dignas de comerlas con los dedos. La cocina –la física-, nueva para el chef, aún no le ha permitido demostrar sus habilidades en algunos platos calientes, detalles que suceden a menudo ya que es difícil conocer a los integrantes de la brigada de cocina, la temperatura de las cocinas, hornos y de los ambientes, ya que son diferentes en todos los restaurantes.

El lugar (El Barrio) es cómodo y agradable. Terrazas exteriores e interiores de dan un toque casual a una cocina que sigue esos mismos rumbos. Destacable el servicio (gran aporte de Carpentier) y toda la infraestructura que puso a disposición de este aclamado chef europeo. Buenos y gratos sabores que irán mejorando con los días ya que el Arroz de Mar y Montaña (15.900 para dos) con pollo, jaiba, ostiones y panceta, merece una segunda oportunidad. El dulce final, una sabrosa Crema Catalana (3.900) con toffee de galleta y helado de naranja fue todo un suceso; todo ello acompañado con Sangrías (blancas y tintas), cervezas, cócteles y una buena variedad de vinos.

El serio, gruñón y difícil Arola de Masterchef, nos demuestra que su papel es parte de un guión elaborado por los productores y libretistas del programa. Su faceta real -la de cocinero-, es absolutamente diferente a lo que se ve en la pantalla. Para los seguidores de este estelar, para quienes aún extrañan sus años en el Ritz Carlton capitalino y para quienes no lo conocen, estos tres meses serán la oportunidad de conocer una mano que lo ha llevado a triunfar en varias capitales del mundo y que obtener dos estrellas Michelin es algo serio, importante y que se necesitan agallas para no desencantar y mantenerse vigente en el tiempo.

EL BARRIO /Alonso de Córdova 4263 / 9 5468 3531