martes, 18 de julio de 2017

MIS APUNTES


 
CARRER NOU

No es la primera vez que escribo del Carrer Nau en estas páginas, ni será la última. Posiblemente intentando que todos conozcan un lugar que se ha ido superando año a año y que este mes celebra sus seis años de existencia, lo suficiente para saber que Amalia Pesutic y Cristóbal Pérez, sus socios,  han realizado un buen trabajo.

Labor que no siempre fue fácil ya que en un principio tardaron en definir lo que querían ser. Junto a la comida española, también vendían pastas y pizzas. Y les iba bien, pero nadie los reconocía como un restaurante español. Eso, hasta 2013, cuando sacaron la especialidad italiana de su carta. De ahí en adelante, puros éxitos, que los ha llenado de premios y satisfacciones.

Hay una especie de libertad gastronómica que les permite jugar con las materias primas más allá de encasillarse con alguna tendencia. Cuando fue considerado como el mejor del país (según la revista Wikén, 2016), se alarmaron. Bien es cierto que en seis años de operaciones habían demostrado una solidez gastronómica de proporciones, pero de allí a obtener el premio mayor, el desafío que se les venía por delante era inmenso.

Aprovecharon este verano para darle una “manito de gato” al restaurante. Aire acondicionado y nuevas sillas, pintura y barnizados, con la finalidad de corregir algunos desajustes que provoca el paso de los años. Pero lo importante –más que las instalaciones- es la mano que existe en la cocina. Amalia Pesutic aprovechó como nadie su estadía en el País Vasco y a su regreso quiso replicar un estilo de cocina donde se involucran los sabores catalanes intensos, sabrosos y reconfortantes. A pesar de que su restaurante está alejado del circuito gastronómico tradicional, de a poco y con el famoso “boca a boca”, comenzaron a hacerse conocidos por toda una legión de seguidores.

No es difícil enamorarse y convertirlo en favorito. Si bien la carta no cambia completamente, este invierno se renuevan con una Ensalada de anchoas, con láminas de palta, tomatitos cherry, ajo frito, perejil y pan rústico, de sabor excepcional. Aparte, unos Pimientos del piquillo rellenos con morcilla y las Galtas (9.900), que son mejillas de ternera estofadas con ñoquis al tomillo.

Más que nuevos platos, estamos en época de platos de “cuchara”, es decir, tiempo de guisos acompañados de un buen tinto. Acá, los Callitos a la madrileña con papas fritas (8.900) o los Garbanzos salteados con tomatitos, almendras, rúcula y mozzarella fresca (9.700) son iconos de la temporada. A ello se suman platos que no pueden salir de la carta habitual, como sus croquetas, tortillas, pimientos y jamones; además de postres generosos y una carta de vinos –sangría incluida- y cervezas de buenos orígenes.

Según Amalia y Cristóbal –los socios-, el Carrer Nou no es el mejor restaurante ni tienen la mejor presentación. Ellos se preocupan de que sus platos sean sabrosos y que den felicidad. Posiblemente es por ello que acá se ve sólo gente contenta. Y eso, a estas alturas de la vida, es mucho decir. (Juantonio Eymin)

Carrer Nou / Av. Miguel Claro 1802, Providencia / 22727 1161