martes, 17 de septiembre de 2019

LA LISTA DE LA SEMANA


CÓCTELES SON SABOR A CHILE

Si bien es cierto que un buen vino, licor o destilado es gusto de paladares exigentes, siempre es entretenido mezclar. Y como el ingenio nacional da para todo, populares híbridos forman parte de nuestras más excéntricas tradiciones etílicas. Los folclóricos "combinados" creados en nuestra patria se han convertido en placeres culpables de las fiestas de septiembre. Por ello, en esta edición dieciochera recordamos los mejores cócteles nacionales elaborados y consumidos durante todo el año.

 

1. PISCO SOUR (A LA CHILENA)
Miles han sido las recetas de pisco sour que se han creado con el transcurso de los años. Elaborado con limón amarillo, sutil o de Pica, azúcar y un pisco de marca nacional, no hay chileno bien nacido que no se haya aventurado en el arte de hacer el mejor pisco sour, la receta original, la madre del cordero, aunque no todos los resultados han sido felices. Aun así, los que preparan en el Eladio, aparte de económicos, son casi los mejores de nuestras comarcas (Av. Ossa 2234, La Reina / 2 2277 06 61)

 

2. PISCOLA
Postulada por algunos como "el trago nacional", la popular piscola (pisco + bebida cola) es la fiel compañera de tertulias, vituperios y carretes del país. Una buena piscola debe llevar hielo y limón. Y, aunque el origen del pisco puede estar en duda, la piscola es 100% chilena. (En todos los bares y restaurantes del país)

 

 
3. TERREMOTO
Surgido en "El Hoyo", bar de Estación Central, en la actualidad es el trago más consumido en "La Piojera", emblema del movimiento guachaca y desterrando la chicha para siempre. A base de vino pipeño y helado de piña, más un toque de amargo o fernet y un chorrito de granadina, su prestigio ha trascendido las fronteras, incluso forma parte de casi todas las celebraciones multitudinarias. (Aillavillú 1030, Santiago Centro / 2 2698 1682

4. PICHUNCHO
Un bar que se jacta de rescatar comidas y bebidas de nuestro recetario tradicional, no tener el pichuncho en su carta de cócteles es un pecado grave. Y afortunadamente el Liguria lo ofrece. Acá se prepara –salvo que se indique lo contrario– con vermouth bianco, pisco y una fina cáscara de limón. Elegante, refrescante y –ojo– uno de los tragos más baratos, pero no por eso menos distinguido, de este ya clásico lugar. (Av. Providencia 1353 / 2 2235 7914)

5. COLA DE MONO
Angelical trago que trae buenos recuerdos porque se consume en Navidad y Año Nuevo, esas entrañables fechas en que no hay que estudiar ni trabajar, sino que sólo darse regalos y pasarlo bien. Sin embargo, en el Bar Nacional se bebe todo el año. Lleva leche, leche condensada, cáscara de naranjas, clavos de olor, canela, vainilla, café, aguardiente o pisco. Es tan propio de estas festividades como el pan de pascua. (El Bosque Norte 40, Las Condes / 2 2335 9400)

6. BORGOÑA
Para que no digan que los tragos no se complementan con la vida sana (como una macedonia), este combinado -también llamado ponche- utiliza frutas de la estación trozada, de preferencia frutillas o duraznos además de azúcar y hielo. La versión con vino blanco (con chirimoya preferentemente), se llama Cleri y es una bebida típica del verano. En El Caramaño lo hacen mejor que en casa. (Purísima 257, Bellavista / 2 2737 7043)

 

7. VAINA
No está de moda como otros cócteles de mediados del siglo pasado y que actualmente son grito y plata en las barras santiaguinas. Sin embargo, hay un puñado de nostálgicos y tradicionales bebedores que aún la piden. Incluso algunos optimistas aseguran que viene de vuelta, que es sólo cosa de tiempo. Y aunque es difícil encontrar vainas en la ciudad y mucho más una bien preparada, en Don Peyo se puede rescatar una de las mejores. (Lo Encalada 465, Ñuñoa / 2 2274 0764)

 

8. NAVEGADO
Ideal para pasar el frío es el vino caliente con naranja. Algunos llaman así al vino tinto "chambreado" (del francés chambré... nada más patriótico). También se acostumbra echarle azúcar, canela y clavo de olor. Se entibia a baño María, aunque algunos solían calentarlo al lado del brasero, tal como lo hacen en el Restobar La Sede, en la República de Ñuñoa. (Av. Irarrázaval 2051, Local 18)

9. MALTA CON HUEVO
Es una de las bebidas con alcohol más tradicionales y populares de Chile. Se encuentra habitualmente en las cartas de las quintas de recreo, picadas y bares populares de todo el país. Su sencilla preparación hace que sea muy común consumirla en los hogares, por lo que ya es parte de la identidad chilena. Muy popular en zonas rurales y entre las generaciones más antiguas, es un clásico entre los clásicos.

10. VINO EN MELÓN
Este original trago, que no requiere vaso ya que utiliza un melón abierto en uno de sus extremos y sin pepas, por donde se le introduce vino blanco y azúcar, es ampliamente conocido por las actuales generaciones. Mientras se consume se puede ir raspando el melón por dentro con una cuchara para que quede más dulcecito. Es típico de paseos a la playa de universitarios y es uno de los pocos brebajes que celebra su propio día, normalmente en febrero de cada año.