BUENA COCINA, PERO…
De
la noche a la mañana la cocina hizo un boom que nunca se había visto en nuestro
país. Los diarios, radio, televisión, revistas, internet, farándula y redes
sociales se vieron atrapados en este fenómeno que en nuestro caso es muy
particular. Si hace algunos años se decía que en Chile existían 17 millones de
entrenadores de futbol, hoy podemos decir lo mismo con la cocina, algo que no
estaba en ningún libreto pero que hoy es casi una religión.
El
fenómeno es interesante y entretenido. Para los que llevamos tiempo en esto de
la gastronomía lo vemos como un signo positivo y ojala contribuya reamente al
desarrollo de nuestra cocina. Hace años que estamos contándole a nuestros
lectores que tenemos buenos restaurantes (no necesariamente de cocina chilena)
y los que hemos tenido la posibilidad de conocer otras realidades, podemos
afirmar la veracidad de este concepto. La variedad de cocinas que tenemos en la
capital (a la cual se van sumando de a poco las regiones) es mejor que muchas
ciudades del mundo, y creo no equivocarme.
Claro
está que una cosa es la cocina y otra el servicio. Allí pecamos y es
notoriamente uno de los puntos flacos de los restaurantes nacionales. No hay
servicio y ello es notorio. Y servicio no es solamente materia prima -o
personal adecuado- ya que es necesario entender que este concepto involucra
bastantes más acepciones que lo meramente funcional. Un país que hace años está
intentando atraer turistas necesita personal bilingüe en las áreas de servicio,
aunque este detalle es la punta del iceberg del concepto, debido a que el mundo
del siglo XXI se está manejando con otros códigos, será necesario tener el
servicio muy en cuenta para el desarrollo integral de nuestra oferta
gastronómica.
Tenemos
materias primas (gran punto), buenos cocineros (otro gran aporte), pero nos
falta mucho para convertirnos en referentes. El nuevo siglo, aparte del ser
globalizado, trae consigo todo un cambio y como en todas las revoluciones o
eras, el futuro será de los que logren adaptarse y estar vigentes cuando se
presenten las oportunidades. En LOBBY estamos conscientes que se avecinan años
de mucho aprendizaje e intentaremos estar al día para tener actualizados a
todos nuestros lectores. (JAE)