martes, 31 de octubre de 2017

BUENOS PALADARES


CRÓNICAS Y CRÍTICAS
DE LA PRENSA GASTRONÓMICA
LAS ÚLTIMAS NOTICIAS
RODOLFO GAMBETTI
(OCTUBRE) LA MAR (Nueva Costanera 4076 / 22206 7839): “El local limeño que trajo Gastón Acurio a Santiago se organiza para lucir los productos de mar locales, entre las vedas que protegen la biomasa marina y los altibajos que experimenta la pesca estacional. Su vocación nos adentra en los alimentos marinos, tan cercanos en la producción como lejanos en el consumo. Y vengan la alba corvina, el rayado bilagay, el sabroso rollizo, las soberbias ostras, el supremo lenguado, y tantos picorocos, jaibas, centollas y pulpos, por nombrar a algunos. Que es cosa de ordenarlos en La Mar, a lo macho, nikkei, al ajo o al rocoto, o como le venga en ganas.” “Sólo así es posible asegurar una oferta sustentable y en La Mar sobran las opciones para disfrutarlos al gusto de cada uno. “Biodiversidad de productos nobles, frescos, espléndida excusa para compartir unos bocados, unos tragos, la vida”, filosofa el chef Labrín.”

MUJER, LA TERCERA
PILAR HURTADO
(OCTUBRE) GRACIA TAPAS Y BAR (Isidora Goyenechea 3000, local 106 / 23245 0879): “Probamos dos tipos de sangría, ‘Un golpe de gracia’, que es sangría blanca con maracuyá, vino blanco y gin, que nos zumbamos muy rápido y nos pareció suave. También la ‘Graciosa’, inspirada en la sangría clásica con vino tinto y jugo de naranja, que estaba más fomecita, he tomado mejores. De las tapas, probamos varias: boquerones en aceite de ajo y perejil, ricos pero con gusto a poco (parece que venían 6); las llenadoras patatas bravas, en cubos y muy ricas, con una salsa un tanto cargada a la mayo y muy poco picante, que debiera ser la característica de esta salsa (hasta en Wikipedia dice que, si no, las papas se debieran llamar flojas o mansas), pero las papas estaban buenas. También compartimos la tapa del día, almejas fritas, originales pero un tanto gruesa la fritura y tapaba la delicadeza del bivalvo.” “El garzón que nos atendió partió diligente y luego, cuando se comenzó a llenar el local, se resintió la atención pues estaba muy solicitado. En suma, el lugar increíble: lindo, animado, todo pasando. La comida y las sangrías que probamos ese día, perfectibles.”

WIKÉN
ESTEBAN CABEZAS
(OCTUBRE) SWAD (Avenida Italia 1307 / 22699 9631): “Primero, samosas ($2.900), esas empanaditas rellenas de papas y arvejas, más horneadas que fritas en este caso. Igual muy sabrosas. Luego, unos trozos de verduras rebozados con harina de garbanzo (pakora, $3.500), otro golpe de sabor extranjero, al igual que unas bolitas de espinaca con queso (palak cheese ball, $3.990).” “De entre los platos principales, estos vienen sin picante, pero, si se quiere, se les puede incorporar en grados de uno a cinco. El único que se pidió con un preciso grado dos fueron unos camarones en una salsa atomatada (jhinga masala, $6.500), hechos a punto y no en grado textura plumavit. Para acompañar, un arroz con comino (jeera rice, $2.000) y un kashmir pulau, con frutas ($2.900). Además se sumaron tres variedades de pan, entre las que destacó un planito nan con MUCHO ajo, maravilloso y matapasiones ($2.000).” “¿Que se puede decir de una comida que se termina sopeando con el pan? Que es una fiesta no más. Y con la cantidad de platos ofertados en Swad, dan ganas de ir llenando una cartilla para ir probándolos todos.”

WIKÉN
RUPERTO DE NOLA
(OCTUBRE) DOÑA TINA (Los Refugios 15125, Lo Barnechea / 22321 6546): “Partimos con una empanada ($3.400) excelente: es difícil encontrar tan atinadamente equilibrada la sazón chilena de comino, orégano, color, picor y ajo como en este caso. Masa perfecta; pino de buena consistencia (ni seco ni aguachento), textura correcta (carne molida, aceituna, huevo duro y, cosa muy laudable porque así es la tradición, pasa). El plato de "picadillo" que vino a continuación ($7.800), suficiente para dos, traía muy buen arrollado de chancho, tajadas carnudas de pernil y un estupendo arrollado de malaya, como no comíamos hacía mucho.” “Un plato de fondo fue "el plato de Doña Tina", que combina arrollado caliente de chancho y costillar de chancho asado ($10.700). Ambas cosas en el colmo, que es decir "en el culmen", de la calidad y en una cantidad adecuada al apetito que despierta (porque, como se sabe, "el hambre se despierta comiendo"). Ah, qué bueno estaba aquello. Un puré de papas escoltó correctamente este "platillo", como dicen los finos.”