martes, 14 de julio de 2009

BUENOS PALADARES


LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

YIN Y YANG (La Segunda Internet)
(10 julio) EL ENCANTO CHILENO (Av. Bilbao 468, Providencia, fono 665 9554): “Está apareciendo un nuevo tipo de oferta culinaria que puede contribuir positivamente a la tan ansiada recuperación de la comida criolla.” “De las entradas, probamos cebiche de reineta ($ 4.000) con la natural influencia peruana, pero sólo en el corte del pescado; empanaditas de camarón y queso ($ 3.500), y ricas patitas de chancho rellenas con paté casero, que les agregaba un toque original, y salsa verde ($ 4.500).” “Como puede apreciarse, una comida muy chilena, con elementos complementarios ya incorporados a nuestras costumbres más, en ciertos casos, un toque distinto que se le da en este preciso lugar.”

SOLEDAD MARTÍNEZ (Wikén)
(10 julio) C (Mons. Escrivá de Balaguer 5970, Vitacura, fono 218 0876): “Su carta de invierno conserva o modifica levemente varios platos de la anterior, con precios iguales o inferiores y fuertes rebajas en los vinos, e introduce otras recetas novedosas. Además, ofrece almuerzos con pescado, pasta o carne, de fondo; entrada, sopa o postre; copa de vino, cerveza o bebida, y café ($12.000). Esta vez la mayor delicia, fuera de la carta, estuvo en un huevo con aceite de trufa y pochado al vapor.” “Entre los pescados, rica merluza austral con ñoquis de tinta de calamar, salsa atomatada y ajos confitados. Luego asado de tira de cocción lenta al vacío, con puré de papas con hierbas y queso al ajo chilote rostizado, cebollines baby y salsa tonkatsu. De postre, pie de maracuyá con berries, y suave y crema de menta y yogur.”

RODOLFO GAMBETTI (Las Últimas Noticias)
(10 julio)VINOTAURO / CARNES MORANDÉ (Vinotauro, Dublé Almeyda 2438, F. 893 6216, Ñuñoa. / Carnes Morandé, Mallinkrodt 184, F. 777 1470, Bellavista): “Abren nuevos restaurantes, sin temor a la crisis. En Ñuñoa, el Vinotauro, de Dublé Almeyda con Pedro de Valdivia.” “El nombre del local resume su experticia: se convenció de que el chileno quiere, por sobre todo, carne de vacuno y vino. Y precios moderados. Más que parrillada, carnes de parrilla tipo argentino”/ “Y en Bellavista, el clásico Sibaritas de Juan Pablo Moscoso y sus degustaciones se convirtió en otro local de Carnes de Morandé. Ampliaron su única ventana, pintaron de blanco el interior y lo dedicaron a las carnes, aunque dispone también de pescados y pastas.” “Y aunque se preocupan de entregar buena carne y en el punto de cocción pedido, deberán conseguirla más jugosa. Los precios son prudentes, y sin duda se proponen conseguir una buena relación precio calida…”

CARLOS REYES (La Tercera)
(10 julio) EL CID (Av. Santa María 1742, Providencia, fono 707 0000): “…un servicio como pocos, pulido en la escuela de la amabilidad y la precisión hotelera de alta gama.” “Los Agnolotti Rellenos de Pierna de Pato Braseado y Queso Grana Padano ($ 6.200), con vincotto -vino cocido italiano- balsámico y salsa de foie gras, que aportaron un profundo toque agridulce a una pasta por desgracia poco firme, pero que logró resaltar una de las características de su chef Josep Gander: su abundante uso de ingredientes, resaltándolos todos sin perder el foco del producto principal. Como un veterano equilibrista de sabores.” “Las variantes culinarias de Gander siguen y seguirán por la vereda del tradicionalismo gourmet, de salsas clásicas, hartos elementos en el plato, preparados con una meticulosidad que le garantiza vigencia

BEGOÑA URANGA (El Sábado)
(11 julio) OX (Nueva Costanera 3960, Vitacura, fono 799 0260): “Desde su inauguración se definió como una parrilla de lujo. Steaks & Brasserie. Un lugar para comer carne en cortes premium, en un ambiente exclusivo y más bien masculino. Muy de almuerzos y comidas de negocios. Nada de barato, eso sí.” “Para comenzar, croqueta de cangrejo. Nada excepcional y más bien desilusionante. Las mollejas, pedidas casi al carbón, resultaron, lejos, lo mejor de la comida. Crujientes, en trozos pequeños, simplemente maravillosas.” “La costeleta vetada, a punto y de excelente calidad. Nada que decir. Un corte perfecto y que resultó muy sabroso. No así el risotto de camarones que deslució totalmente. El postre fue un seductor churros con chocolate, artísticamente dispuesto, pero de un sabor nada de logrado.”

PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(12 julio) BEL PAESE (Apoquindo 7714, Las Condes, fono 212 7086): “Aparte de las especialidades tradicionales que no se pueden dejar de hacer, como los tortelli mantovani (con zapallo y mostarda, una fruta italiana), Illari ha incluido una selección de productos que compra frescos y van cambiando según la disponibilidad. A mí me tocaron erizos preciosos y exquisitos, que me sirvieron con limón, oliva, cebollín picadito y perejil.” “Pedí una degustación de pasta del día, y me tocaron los mantovani, más ricos que la última vez que los comí aquí (entonces los encontré muy cargados a la esencia de almendras). También unos gnocchi de pan teñidos con tinta de calamar; eran unas pastas pequeñas del tamaño de un poroto, que nunca había visto; luego el chef me explicó que era un plato típico de épocas de escasez.” “Toda la pasta buenísima.” “Me gustó la experiencia, pero creo que aún faltan algunos ajustes que se solucionarán con el tiempo.”

DANIEL GREVE (Qué Pasa)
(11 julio) MISAKY (Av. Vitacura 5461, Vitacura, fono 219 0222): “En una rutina cualquiera, casi al azar, pedimos varios rollos que resultaron ser un desastre: el Teri Roll ($ 6.530) envuelto en palta, con pollo teriyaki, queso crema y cebollín en su interior, es uno. La palta estaba verde, y el pollo no tenía rastro de la salsa teriyaki -salsa de soya reducida, espesada y endulzada con azúcar y vino de arroz-. Tanto, que hubo que llamar para preguntar si había un error, si acaso la salsa se mandaba aparte y la habían olvidado. No. Era así. Una especie de pollo cocido rodeado de palta verde y arroz. El Tako Crispy Roll ($ 6.420), con pulpo, queso crema y masago envuelto en tempura crocante, anduvo menos accidentado, pero el crispy no era crispy, es decir, había poco y lo poco que había no estaba crocante. Por último, el Kanisake Roll ($ 6.420), de salmón envuelto en kanikama y palta, salvó la función básicamente porque era plano, y lo plano no lo podemos interpretar como un error, sino como una falta de sazón. Que es casi lo mismo, pero que se aleja de la gravedad dentro del contexto.”