martes, 11 de septiembre de 2012

BUENOS PALADARES

LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(7 septiembre) CALETA LASTARRIA (Villavicencio 395, Barrio Lastarria, fono 632 5764): “…de una carta bien pensada (breve y en la que no falta la carne), un generoso chupe de camarones y jaiba ($6.800), sabroso pero tal vez muy cargado al queso y falto a la pimienta. Y unos panzotis rellenos de langosta ($9.900) que se ofrecen como novedad en la carta, y que transitan por el lado más fino. Sólo faltó algún pescado a la plancha, para ver cómo los tratan.” “De postre, una crême brulèe ($3.500) correcta (aunque les faltó paciencia con el soplete) y, en general, un servicio muy presente. Sumándoles el ambiente, que en verdad hace mucho, es una buena experiencia marina en un barrio turístico donde no abunda.”

BEGOÑA URANGA (El Sábado)
(8 septiembre) P.F. CHANG’S (Boulevard Parque Arauco, fono 220 4895): “Para empezar, el famoso Chang´s chicken letucce wraps, una fuente de pollo con verduritas e ingredientes secretos, al wok, acompañado de unas esplendorosas hojas de lechuga para hacerse el wrap. ¡Increíble! El Mongolian beef venía en finas láminas de carne, caramelizadas al wok con cebollines al dente, demostrando lo diferente que puede ser del que tradicionalmente se ofrece en Chile. Lo mismo el Mandarin chicken. Lo que sí, hay que elegir lo menos tradicional y aquellos platos señalados como la especialidad de la casa. Será éxito seguro.”

YIN Y YANG (La Segunda Internet)
(7 septiembre) CATEDRAL (José Miguel de la Barra 407, fono 664 5491): “… una carta sin excesivas pretensiones y de precios moderados ($ 4.400 a $ 6.800 las entradas; $ 5.400 a $ 13.200 los fondos; $ 6.400 a $ 17.200 lo para compartir, salvo la suculenta choucroute a $ 28.000, y $ 2.600 a $ 3.500 los postres). Es una serie abierta a influencias diversas sin perder el carácter propio de Dieudonné, pero difícil de encasillar en un molde determinado.” “Además de una extensa lista de aperitivos, bajativos, tragos largos y cervezas (y hasta con bebidas sin alcohol por las nuevas restricciones legales), la oferta contempla numerosos platos para compartir, adecuados para su clientela, sin perjuicio de los de tipo individual habituales. Aunque se presentan algunos mariscos, corvina y salmón en dos estilos, llama la atención el predominio de las carnes (pollo, vacuno, cordero, cerdo, ternera: nada de animales exóticos), y si bien abundan los ejemplos de cocina chilena típica de buen nivel (carbonada de gallina, plateada al horno, estofado de cordero, costillar de cerdo a la antigua, ternera mechada a lo pobre, asado de tira a la cacerola), también se encuentran crudos germanos, gyosas orientales en salsa thai, sorrentinos y lasaña itálicos, garbanzos ibéricos y por cierto recetas que recuerdan la formación francesa del chef, como choucroute alsaciana, salmón grenobloise o pollona a la Marengo.”

PILAR HURTADO (Mujer, La Tercera)
(9 septiembre) SAMSARA (Almirante Montt 427, cerro Alegre, Valparaíso, Celular 9251 3467): “El sistema nos pareció genial: por el precio del plato de fondo se incluyen una ensalada de buen tamaño y también el postre, que se puede elegir entre tres o cuatro opciones. Yo pedí curry amarillo con pescado, camarones y ostiones, que venía con arroz, delicadamente aliñado. Los ostiones estaban exquisitos y a punto y, a pesar de lo suave, estaba rico y fino en realidad. El otro plato fueron calamares rellenos con centolla y solomillo salteados en salsa de ostra con champiñones, que estaban bien pero nos parecieron menos logrados. Ricas las ensaladas y los postres también. La atención esa noche de viernes fue muy lenta, si bien amable, pero como no teníamos apuro y al frente había una botella de viognier que disfrutar, nos lo tomamos con calma y buen humor.”

RODOLFO GAMBETTI (Las Últimas Noticias)
(10 septiembre) LA PASTA DIVINA (Luis Pasteur 6585, local 6, Vitacura, fono 218 9367): “En su impecable fábrica, que huele como cuando “la nonna” se ponía a amasar, decidió ahora armar un producto ideal para estos festejos. Como ejemplo, unos raviolones con masa de tomate y huevo, rellenos de pino y con una bien lograda salsa de aceitunas negras ($9.000 los 500 grs.). Están los ingredientes y el sabor de la empanada… pero es una pasta italiana por donde la mire. También tiene entre sus productos una lasagna con pastelera de choclo de chuparse los bigotes, en una versión que incluye camarones y se ha vuelto un pedido favorito desde que la creó ($3.600 la porción). Como postres en estos días fiesteros ofrece ravioles dulces, rellenos con arroz con leche y su ralladura de naranja, con salsa de caramelo ($9.000 el medio kilo), así como un tiramisú con mote con huesillos ($8.900 para 4 o 5 personas), que hay que probar. Además incorporó unos flamantes gnocchi y fettuchini al merkén ($7.900 el kilo), que muchos califican como “me gusta”.”