martes, 1 de enero de 2013

BUENOS PALADARES


LAS CRÍTICAS GASTRONÓMICAS DE LA SEMANA

SOLEDAD MARTÍNEZ (Wikén)
(Diciembre) RISHTEDAR (Holanda 160, Providencia), fono 2231 3257): “Este local de comida de la India posee un carácter sencillo, entre familiar y juvenil, que lo aleja de una imagen solemne de esa cultura milenaria, desde los manteles coloridos y las servilletas de papel demasiado chicas hasta las pinturas rituales de las paredes, con ojos gigantescos y algún elefante, y un aviso de pipas de agua disponibles para fumar. También la comida, con cierto énfasis en los vegetales, resulta liviana y con menos picor que lo debido, quizás en consideración al público nacional. Aunque no hay mucha variedad en la carta, todo lo que pedimos fue distinto de mi visita anterior. Comenzamos por Goa chilly jheenga (aquí parte de la cocina viene de Goa, con mayor acento en productos del mar, aunque el resto es del norte, estilo más frecuente en la oferta santiaguina): unos pocos camarones ecuatorianos con cebolla en cortes anchos y pimiento rojo y verde, todo muy aliñado con las típicas especias, picante y sabroso ($5.300). Luego Badam aur ilachika, blanca, suave y deliciosa sopa caliente de almendras y cardamomo ($2.000). Como platos de fondo, todo para compartir, elegimos uno de la tradición vegetariana, agrupados en una sección llamada "el callejón de las verduras indias", y otro de carne.” “Sin alcanzar un nivel especialmente refinado, creo que nos acerca a lo que debe ser allá una buena comida casera.”

ESTEBAN CABEZAS (Wikén)
(Diciembre) FARINA (Andrés Bello 2447 (Costanera Center), local 5164): “Primero que todo su carta es muy parecida a la de Le Due Torri, aunque con algunos agregados que favorecen la ingesta rápida: pizzas y emparedados. Segundo, es un pelo más informal que los locales madre. Tercero, y esto es un verdadero regalo pascuero, su personal es encantador e informado, al punto que se nota que han probado gran parte o toda la carta (señores dueños de restaurantes, por favor sigan este ejemplo). Y cuarto, la comida estuvo muy bien, con algunos bemoles, pero nada macabro.” “De principales, dos maravillas. Una ensalada de lechuga, tomates cherry, nueces, berenjenas y zapallitos grillados y salsa tártara llamada Fonzetto ($6.600). Impecable, aunque un poquito menos de tártara habría sido mejor recibida. Y, para probar una de las míticas pastas rellenas de esta marca -o de su nuevo hijo-, unos ravioles de zapallo y ricota, con mantequilla y salvia y migas dulces de galletas amaretti. Por $7.900 es una verdadera asunción desde la silla.”