martes, 21 de octubre de 2014

LA COLUMNA DEL ESCRIBIDOR


Un comedor que merece visita

Ante el auge del boom hotelero en Santiago y Regiones, cuesta advertir la cantidad de establecimientos que han dado a luz este último tiempo. A decir verdad, hace tiempo que dejamos de preocuparnos del tema, sin embargo, dentro de esta oferta de nuevas habitaciones, algunos hoteles le han dado importancia a la gastronomía, abriendo espacios para que el circuito gastronómico se vaya ampliando. No estoy escribiendo de los hoteles – casinos, ya que estos prefiero sustraerlos del tema gastronómico, ya que acá lo importante es el juego, y la comida es sólo un anexo pocas veces convincente.

Hace algunos meses y aun con olor a pintura, “apareció” en la Av. Manquehue, a pasos de Presidente Riesco, el hotel Plaza el Bosque. Junto a él, y en el primer piso se encuentra el bar y restaurante Ré, cuyo gerente de alimentos y bebidas, Marcelo Romero - con vasta experiencia en el sector de A&B- instaló a Esteban Donoso como chef del lugar, quien desde el 2000 está metido en esto de las ollas y cacerolas, llegando -en su momento- a  ocupar el puesto de sous chef en los restaurantes del hotel Ritz Carlton. De ahí viene la sazón y mucho de la arquitectura de los platos, ya que trabajó con buenos chefs que no solo le enseñaron de cocina, sino mucho de arte y decoración.

No tiene una cocina rebuscada ni llena de artilugios artificiales. Con una buena carta de vinos (por copas y botellas) y espumosos de buena cepa, disfruté una nueva versión de Cebiche, esta vez marinado con cítrico de soya y ají amarillo, perfumado a la naranja (6.900), una variedad de ostiones, pulpo y camarones ecuatorianos que logra ¡por fin! modificar la clásica versión cevichera peruana, la cual ya no es novedad en nuestro país. Buena también –para los que comienzan a cuidase el cuerpo- la Ensalada Griega (5.900), con crocantes berenjenas y una alegra variedad de verdes y queso de cabra.

Los fondos, de una variedad de carnes, pescados y pastas (entre otros) opté –más que nada por el nombre, por unos Ravioles en blanco y negro (8.900), que consisten en ravioles en dos colores, tinta de calamar rellenos con locos a la parmesana  y blanco relleno con chupe de centolla. Un plato como para regresar y saborearlo una y otra vez.

Una trilogía de crème brûlée (cedrón, maracuyá y clásico, $3.600), de buen formato y mejor sabor a pesar de que llegó demasiado fría, fue el final de un almuerzo que superó ampliamente la percepción que tenía de este hotel, a pesar de que el restaurante en si tiene un “aire” a oficinas comerciales, donde nada falta pero sin la calidez necesaria para que a la vez sea un lugar que distraiga a los comensales.

Mención aparte para su menú ejecutivo, disponible los días de semana, donde cada cliente puede pedir la combinación que prefiera, a valores que van desde los $6.900 (fondo, postre, café) y los $12.700 (entrada, fondo, postre, café y una copa de vino). Si a todo eso le agregamos una terraza que debería estar lista este mes, se puede pensar seriamente que este restaurante tiene todo el derecho a formar parte del circuito gastronómico de la capital. (Juantonio Eymin)

Restaurante Ré, Hotel Plaza el Bosque Nueva Las Condes, Av.  Manquehue 656, fono 22498 1800