martes, 29 de noviembre de 2016

REMASTERIZADOS

 
OCHO PLATOS RUSOS
QUE DEBERÍAMOS CONOCER

La comida rusa tiene una historia riquísima pero está sujeta a una pésima política de relaciones públicas. Suele estar estereotipada como poco más que carne y repollo hervido. Pero la Sagrada Madre Rusia tiene algo más que mostrar.

En realidad, la cocina rusa es una colección de diferentes tradiciones culinarias. En uno de los países más grandes y multiculturales del mundo, la cocina varía según la región.

Su base es la cocina campesina de la población rural, generalmente de clima frío y duro con predominio de pescado, cerdo, aves, caviar, hongos, moras y miel. Cultivos como centeno, trigo, cebada y mijo son los ingredientes básicos para una colección de panes, pasteles, cereales, cerveza y vodka. Las sopas y los guisos llegan con el extremo frío. Todo esto forma la comida nativa que se mantuvo estable durante la mayor parte del siglo 20.

Pero veamos ocho de los platos que podrían llamarse representantes clásicos de la comida del país que fue de los zares.

 

 
PELMENI
Son una especie de capeletis de fina masa hervida rellenos con diversos productos, como carne de cualquier tipo, hongos o verduras. Parecidos a los jiaozi chinos y a los pierogies polacos. Son una comida extremadamente común especialmente porque se mantienen muy bien en el congelador. Además, son muy fáciles de cocinar. Sólo hay que tirarlos en agua hirviendo y al instante se inflan.

 

BORSHT
Es la tradicional sopa de remolacha que se puede servir tanto caliente como fría. Rusia cultiva remolachas desde hace siglos y ningún menú en ese país está completo sin la firma de la sopa de remolacha, que se toma a cualquier temperatura y se puede modificar agregándole papas, repollo o eneldo. Es por ello que las alfombras blancas no son muy populares en la Madre Rusia.

 

BLINIS
Los Blinis son delgados panqueques de harina de trigo, generalmente enrolladlos, rellenos con dulce y presentados como postre. Son el resultado más cabal de la influencia francesa en Rusia.

 

KULEBYAKA
Es un pastel de pescado que generalmente se hace con salmón pero tradicionalmente se hacía con espinazo de esturión. El nombre abarca una amplia variedad de pasteles, que pueden ser individuales  y con masa de hojadre o de manteca. Se lo rellena con vegetales, arroz y pescado de cualquier tipo.

 

GOLUBTSY
Es un burrito hecho con hojas de repollo y relleno con albóndigas que se parecen a un pan de carne, luego, por lo general, viene bañado con salsa de tomate. Uno de los platos más comunes en la cocina rusa, los rollos de repollo existen también en toda Europa oriental y Medio oriente El repollo tiene aquí el uso clásico, que es primero hervido y luego usado para envolver carne picada sazonada.

 

POLLO TABAKA
Un pollo pequeño, abierto en mariposa, aplastado y frito debajo de un ladrillo. Un plato favorito de la época de los Soviets, algo así como traer la hoz y el martillo a la cocina. Al pollo se lo prepara abriéndolo primero por el esternón para que quede con forma de mariposa, luego golpeándolo con una maza hasta que queda chato. Luego se lo tira a una sartén profunda y se lo fríe con un ladrillo encima para impedir que se vuelva tridimensional. El resultado es un tiernísimo pollo pulverizado con una piel crocante.

 

PIROZHKI
Son bolsitas de masa con rellenos dulces o salados, luego horneadas o fritas. La variedad de sabores es infinita. Algunas están rellenas con carne, otras con frutas. Todas son diferentes. Pero cualquiera sea el relleno todas son deliciosas ya sean fritas u horneadas.

 

SALAT OLIVIER
Una ensalada hecha con papas, daditos de carne, huevos y vegetales, todo aderezado con mayonesa. (Esto es lo más parecido lo que tradicionalmente llamamos "ensalada rusa" y que ya hemos hecho nuestra). Esta ensalada figura en los menús rusos de todo el mundo para todo tipo de celebraciones. A pesar de su conquista de la mesa rusa, es invención de un belga del siglo XIX que trabajó en un restaurante de Moscú.