LA OPINIÓN
Hace una semana opinamos en esta columna acerca del gafe que produjo ProChile en Turquía y Rusia cuando el chef Christopher Carpentier cocinó en el programa Sabores de Chile comida peruana. Fue uno más de los errores cometidos por muchas instituciones. Con ese artículo ganamos muchos amigos, pero también bastantes enemigos. Quizá la idea de algunos era meter el desatino en un cajón y encerrarlo con llave.
Pero los expertos en comunicaciones dicen que cuando un medio no tiene opinión propia, el producto se transforma en un catálogo. Como pensar y escribir que todo es bueno y que estamos sentados en una nube de algodón sacando a relucir sólo las cosas positivas y no discriminar para que nadie se sienta mal con nuestras palabras.
En Lobby creemos que nuestro aporte fue importante para que nunca más se produzcan hechos de esta naturaleza. Y eso es bueno ya que al menos nuestra revista no teme decir lo que siente ante muchas situaciones que enfrenta nuestra industria gastronómica.
Seguiremos opinando de lo bueno y de lo malo. Por eso ya estamos llegando a las 20 mil visitas semanales, y si bien no somos líderes, nuestra opinión es tomada en serio. Si a muchos no les gusta lo que escribimos sobre alguien, tómenlo como una asesoría gratuita, ya que somos un reflejo de lo que esta pasando en esta industria. Pero decir la verdad es no engañar al lector. Y nosotros nos debemos a ellos.